Los latidos del circuito [Lando Norris]

17: El desafío de los kilómetros de separación

AMÉLIE

Este año ha sido un año ajetreado, todo lo que he hecho ha sido dentro de la universidad. Sí, he conocido a gente, entre ellos, Lara. Ella me ayudó en el primer día y estudia ingeniería mecánica. Es super simpática y graciosa. No se le escapa ninguna y aunque es algo insegura de sí, hace todo para parecer todo lo contrario.

Una vez que salí de fiesta con ella, unos chicos se nos acercaron para bailar con nosotras y aunque les dijimos que no, lo hicimos igualmente, me pareció bien unos minutos hasta que me dije que no era Lando y me fui de allí lo más rápido que pude para llamarlo llorando diciéndole que lo sentía por haberlo engañado. Luego me dijo que bailar con alguien no era engañarlo pero yo lo sentía así, y la verdad es que lo sigo sintiendo así. Luego, al fin de semana siguiente, me tatué en la muñeca junto a Lara: "never stop believing in yourself" Una frase que nos pertenece. Y ahora, ella me había arrastrado hasta Barcelona para ver las carreras, se lo dije a Pierre y él nos recogió. Resulta que a Lara le gusta mucho la fórmula 1 y se emocionó mucho con la idea de poder ir las dos juntas. Ella sí sabe que soy hermana de Pierre pero eso no es para ella porque se emociona igual. Su piloto favorito es Charles Leclerc y no quiero que lo conozca y la cague, pero sé que le gustará.

La prensa me reconoció, no sé cómo ni porqué, pero lo hizo y nos rodearon pero aún así, sus ojos azules me vieron y mi cuerpo tembló bajo la mano de Pierre.

Verlo de nuevo hizo que mi mente viajara al pasado, viendo lo bien que estaba sin él y con él, lo mal que lo había pasado los tres primeros meses donde solo podía llamarlo o ni eso. Porque me he dado cuenta de que aún mi cuerpo reacciona a un simple roce suyo. Porque aún lo necesito en mi vida y espero que él también me necesite en la suya, porque volvemos al circuito de Barcelona donde se peleó con Hamilton por sus celos. 

—Tía, ¿qué te parece este circuito?

Lara iba delante mía y a mi lado estaban Lando y Pierre cada uno agarrados a mi mano.

—Ya he estado aquí antes—nos reímos.

—Es cierto, pero ¿qué te parece?

—Mientras no se maten, me da igual.

Los miré a los dos y estos se encogieron de hombros.

Pierre se despidió de nosotros cuando llegamos al box de Alpine y seguimos caminando.

En algún momento, Lara nos dejó solos y paramos.

—Le gusta mucho la fórmula 1—le dije mientras la miraba, se estaba haciendo una foto con Sainz.

—Se nota.

Le sonreí y él me devolvió la sonrisa.

—Te quiero.

—¿Me quieres?

—Te quiero.

—Yo también.

—¿Nos queremos?

Nos reímos y me aferré a su pecho, mi lugar seguro, lo he echado tanto de menos.

El grito de Lara hizo que Lando me dejara de mirar, suspiré, dios bendito, ¿por qué me das estos amigos?

—Acaba de conocer a Leclerc, ¿cierto?

—Sí.

—Dios mío.

Me separé de Lando y le di un beso en la mejilla. Me acerqué a Lara y saludé a Leclerc.

—¡Ami! Te he echado de menos.

Le sonreí al monegasco.

—Y yo a ti, Ratatouille—me sonrió—Te presento a Lara, es una gran fan tuya, no le hagas mucho caso—le susurré lo último y soltó una pequeña risilla.

—¿Qué le has dicho?

Lara me miró con la ceja levantada. 

—Tú solo disfruta.

Asintió un poco insegura y la dejé sola para acercarme a Lando de nuevo.

—¿Vas a estar en mi box?

Asentí.

—No te pelees con Isabella, ¿ok?

—Yo no soy como tú, Norris.

—No, eres muchísimo peor, Gasly.

Abrí la boca ofendida y acaricié su mejilla.

—¿Es muy pronto?

—¿Para?

—Besarte y dejarte tonta.

—Ya me has dejado tonta con solo verte, ¿qué más da?

Se rió y negó con la cabeza.

—Tendrás que esperar.

—Vale.

Nos quedamos en silencio.

—Te quiero.

—Y yo a ti.

Sus labios rozaron mi frente y se despidió para irse a su box.

—No me habías dicho que cuanto estábais enamorados pero ya veo que no hace falta.

Me giré hacia Lara.

—¿Tú crees?

—Chica, aún no sé porqué no te has muerto con tanta ternura.

Largué una carcajada y andamos hasta el box por donde se había ido Lando.