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—WooJe y MinHyung me pidieron que te preguntara si querías salir con nosotros —dijo Hyeon-Jun al medio día, poco después de que él y MinSeok se unieran a una llamada de discord —sería en unas dos horas, en el centro comercial de aquella vez.

—Me encantaría, Hyeon-Jun —contestó MinSeok con desgano —pero Hyuk-Kyu me prohibió salir sin su autorización.

—¿Y quién es él para prohibirte cosas? —cuestionó su mejor amigo —no es nadie para prohibirte salir en tu día de descanzo.

—Es mi superior.

—Pero no es tu jefe ni tu coach. En todo caso, éste último debería ser quien debería prohibirte las salidas.

MinSeok lo pensó por bastante rato. Realmente tenía ganas de salir con sus amigos y olvidarse del mal rato que había pasado con Hyuk-Kyu. Por otra parte, tampoco quería decepcionarlo aún más haciendo caso omiso a sus órdenes.

—¿Por qué no le preguntas a tu superior de verdad? —preguntó Hyeon-Jun de nuevo, refiriéndose al coach del equipo de DRX —dudo que él no te de permiso. Además, hay alguien que te quiere ver.

MinSeok se sonrojó un poco al escuchar aquello. Recordó un vago momento de él y MinHyung en el hotel donde habían pasado la noche. Aún no estaba seguro si la escena de ellos dos besándose había sido producto de su imaginación o no, pero cada vez que llegaba a su memoria la timidez lo derrumbaba.

—¿Quién me quiere ver? —preguntó haciéndose el desentendido.

—MinHyung, ¿Quién más? —contestó Hyeon-Jun —que por cierto, no quiso contarnos lo que pasó con ustedes ese día.

—No pasó nada.

—¿De verdad? —Dijo en tono decepcionado —creí que el regaño de SangHyeok al menos había valido la pena.

—¿Regaño?

—SangHyeok-Hyung regañó a MinHyung por llegar tan tarde a la Gaming House. Creí que al menos se habían divertido.

—Ahora me siento culpable —respondió con voz sincera —lo menos que quería era que MinHyung tuviese problemas por mi culpa.

—Estuvo muy cansado durante toda la jornada. Pero al final de cuentas todo salió bien; ganamos la partida.

MinSeok sentía que tenía un asunto pendiente con MinHyung a raíz de eso. A pesar de que no tenían la mejor de las relaciones a raíz de lo que había pasado hace más de un año, MinSeok estaba seguro de no quería perjudicarlo de ninguna manera. El mayor se había portado de una forma muy amable con él, y no podía quedarse como un mal agradecido sin devolverle el favor.

Ahora sentía que era su obligación encontrarse con él.

—Lo haré —dijo de repente.

—¿Qué cosa?

—Iré con ustedes.

—¿A qué debo ese cambio de opinión? —contestó Hyeon-Jun, sonriente

—Me hiciste pensar muchas cosas.

—¿Entonces puedo confirmar que Irás?

—Sí. Ahí estaré.

La llamada finalizó al cabo de un rato. Decidido, MinSeok se dirigió escaleras abajo hasta el punto de la casa donde sabía siempre podía encontrar a su Coach. Buscó por un considerable periodo de tiempo, tratando de evitar encontrarse con cualquiera de sus compañeros de equipo, mucho menos si se trataba de Hyuk-Kyu.

Tras una exhausta búsqueda, encontró por fin al hombre. Se acercó sigilosamente a la sala de entrenamientos donde su superior se encontraba supervisando a los chicos de la academia junto a su respectivo coach. Gritó el nombre del hombre por al menos tres veces hasta que este último se percató de la presencia de MinSeok, escondido detrás de una de las paredes que separaban la sala común con la del entrenamiento. MinSeok le hizo señas para que se acercara, sin dejar de esconderse y mirar a todos lados.

STRAY (SECUELA LITTLE GUY) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora