Capítulo 7 - Besos

118 13 20
                                    

María y Drake

En el momento en el que sus labios se rozaron, sintieron un volcán de emociones.

Conectaron.

En ese instante no importaba nada más. Daba igual la lluvia, daba igual el cine, daba igual la gente que pasaba a su lado para cruzar la calle, solo existían ellos dos.

María mordió el labio inferior de Drake y tirando de él, cortó el beso.

La respiración de ambos aún seguía entrecortada, sus frentes estaban unidas, María sostenía la cara de Drake y él había bajado durante el beso las manos a su cintura.

Al abrir los ojos María le miró sonrojada y él al ver su cara de niña inocente teñida de rojo, no pudo evitar poner una mueca y sonreír.

- Creo que deberíamos movernos - le dijo María con voz melosa.

- Estaría bien, añadió Drake carraspeando. Se estaban empapando. ¿Me das la mano?

María automáticamente le cogió la mano, entrelazando sus finos dedos con los de Drake.

- No me pides permiso para besarme, pero si para cogerme la mano. Muy considerado por tu parte Drake - dijo María con ironía.

- Ja ja ja ¿te tengo que pedir permiso si quiero volver a hacerlo? Contestó este fingiendo estar indignado.

- María asintió. Por supuesto, creo que incluso te haré firmar un contrato.

- ¿No tendrás un boli a mano?

Riéndose, cruzaron corriendo, definitivamente llegaban tarde y estaban oficialmente empapados. Entraron en la sala justo cuando estaba a punto de cerrar...

Al sentarse en sus respectivas butacas, dichosos, se dieron cuenta de que sus manos aún no se habían soltado.

María

Podía notar que Drake la estaba mirando, estaba intentando estar pendiente de la película, intentándolo, no consiguiéndolo.

Nerviosa se colocaba una y otra vez en la silla.

- Drake, estás desconcentrándome le reprendió.

- Con cara de picardía este le contestó, esa es la intención.

- Shhh, habla bajito o nos van a echar le dijo intentando disimular una sonrisa.

- ¿Tú crees?

La estaba buscando y la iba a encontrar.

En ese momento una idea se cruzó por su cabeza, había una forma de hacerlo callar, así que volvió a mirarlo y con la mano le hizo una señal para que se acercara. Cuando le tuvo a un centímetro, susurró:

- He encontrado una forma de que no hables.

Y le beso, esta vez, ella era quien llevaba la iniciativa, en ese beso le quiso demostrar que el anterior la había dejado con ganas de más.

Drake recibió su beso con sorpresa, pero al momento le demostró las mismas ganas.

Los besos se fueron intensificando, y aunque sabía que tenían que parar, estaban en un lugar público, no quería hacerlo... solo le quería besar.

De repente una luz cegadora hizo que volviesen a la realidad. Acababa de terminar la película y perdida en sus labios, no se había enterado.

Se puso de pie, adaptando sus ojos a la luz e intentó sin mucho éxito colocarse el pelo, de reojo miro a Drake poniéndose la chaqueta y cuando se miraron, lo único que pudieron hacer fue echarse a reír.

Llévame a la luna y abrázame en el caosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora