6. Perdí la ilusión

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─¡Abran esa maldita puerta! ─El capitán Park entró corriendo y gritando, seguido de un grupo de policías y, tras ellos, los paramédicos con la camilla lista para recoger a Baekhyun.

Changmin había estado muy ansioso por lo que sucedía dentro de la celda, infortunadamente, Baekhyun había escogido la esquina más alejada de la cámara para ubicarse y el capitán casi no podía verlo, los demás presos lo cubrían, pero cuando notó un alboroto dentro de la celda y a su agente ser golpeado, se imaginó lo peor y corrió a llamar refuerzos y una ambulancia.

Junmyeon quería matarlo, tanto a él como a los ineptos guardias que no habían hecho nada al ver el ataque directo hacia su hijo, seguramente el chico había gritado y batallado pero esos imbéciles no movieron ni un solo dedo por defenderlo. Los iba a demandar y les iba a quitar hasta las medias que traían puestas por semejante falta tan grave.

─¡Detengan a esos animales! ─El capitán Park estaba furioso, sus hombres entraron y dominaron rápidamente a los delincuentes, alejándolos del cuerpo inmóvil de Baekhyun y del agente que también yacía inconsciente en el suelo.

Un escalofrío recorrió el cuerpo del capitán cuando vio una línea de sangre salir de la boca de Baekhyun y sus muñecas amoratadas por la fuerza con la que había sido sujetado, la sudadera levantada dejaba ver una gran hematoma en sus costillas y él se temió lo peor. Los pantalones del chico estaban bajados hasta el inicio de sus muslos y eso dejó muy claras las sucias intenciones que tenían esos delincuentes. A Changmin la sangre le hirvió en ese mismo instante queriendo despellejarlos vivos a todos.

─¡¿Qué mierda estaban haciendo ustedes dos?! ¡Les dije claro que tenían que cuidar a ese chico! ¡Malditos imbéciles!

─Es normal que se molesten entre ellos, capitán, toda esta escoria es lo mismo. ─replicó uno de los guardias con desdén.

─Aquí la verdadera escoria eres tú, esto te va a costar tu trabajo, maldito infeliz. Él es un menor de edad y tú ibas a dejar que lo violaran o algo peor.

El hombre palideció al oír esas palabras y por fin sintió el peso de sus actos o, mejor dicho, la falta de ellos; como mínimo iba a tener una suspensión y un proceso disciplinario. Miró a su compañero que estaba en las mismas condiciones, mierda, la habían cagado en grande. Ellos sí fueron advertidos de no despegar la vista del chico y no permitir que ningún otro preso lo lastimara, pero no le dieron la importancia que merecía el asunto porque, si estaba fichado, era porque algún delito había cometido y se merecía la lección.

─Sin importar la razón por la que están aquí, voy a agregar los cargos de intento de violación a un menor de edad y agresión para todos ustedes.

─Oiga, no fuimos todos, no puede hacer eso. ─Yifan replicó, el intento de violación a un menor era mucho más grave que sus cargos por robo de auto.

─Tampoco hicieron nada para evitarlo. Las cámaras grabaron todo. Ustedes son tan estúpidos. ¡Malditos enfermos!

Mientras el capitán daba las reprimendas, los paramédicos habían atendido a Baekhyun y ya se dirigían a la ambulancia con él en una camilla, a la vez que el joven agente, que ya había reaccionado, se trasladaba cojeando junto a ellos ayudado por un par de compañeros. Baekhyun estaba bastante golpeado e inconsciente, seguramente con lesiones internas, pero con signos vitales fuertes y eso era lo importante.

Los días posteriores pasaron uno tras otro en una sucesión lenta que parecía interminable. Junmyeon estaba desesperado, ya habían pasado dos semanas desde el ataque en la celda y Baekhyun no despertaba. El día del incidente lo llevaron de urgencia al hospital y allí le tomaron muchos exámenes. Tenía varios hematomas en todo el cuerpo, pero lo más grave era una costilla rota que había alcanzado a perforar uno de sus pulmones y por esto tuvieron que operarlo.

⚠️HAFEFOBIA⚠️  [Bilogía Hafefobia - Libro 1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora