daylight ── ❛NANAMI KENTO; JUJUTSU KAISEN

-09: Big reputation.

Me considero alguien que casi nunca tiene miedo a cometer errores, también me considero alguien que es capaz de soportar hacer el ridículo en público algunas veces y ser el centro de atención no me incomoda para nada si hay una buena razón para hacerlo. Pero supongo que nada de eso te prepara para caminar de la mano con uno de los chicos que es considerado como una estrella en la universidad. Es decir, muchos nos han visto juntos y saben a la perfección que hemos sido amigos durante mucho tiempo, en todo ese tiempo nadie difundió rumores de que podríamos haber sido pareja ya que siempre estaba Mahito ahí para acabar con cualquier duda sobre ello, éramos amigos y lo fuimos todo ese tiempo.

Y aún así creo que ahora que caminaba agarrada de la mano con él sin disimulo alguno por toda la universidad era como abrir la caja de Pandora que durante mucho tiempo se mantuvo cerrada. Es como caminar a cámara lenta, puedes ver como algunos se giran curiosos, escuchar lo pequeños murmullos que se dicen entre ellos, puedes ver sus expresiones en su rostro, la forma en la que se tensan cuando notan que no están viendo mal. Es igual a las películas cuando la chica salida de la nada aparece un día sosteniendo la mano de la estrella de la escuela, pero no estamos en secundaria, no estamos en una película, estamos en la realidad y la realidad es que quiera o no esto a penas comenzaba.

Odiaba que la facultad de Choso estuviera casi del otro lado de la universidad, si fuera la mía solo necesitaríamos cruzar un par de edificios para llegar, sería un camino más corto y uno en donde no hubiera tanta gente mirando y murmurando. Aun así, estamos tomando el camino menos transitado, aquel donde osamos frente a la biblioteca y las oficinas de los maestros que rara vez usaban. Creo que Choso ha notado lo mismo que yo, he mantenido la cabeza en alto todo este tiempo y tampoco me he encogido de hombros, demostrar que me importaban sus comentarios y miradas sería darles lo que querían así que debía ser fuerte, debía ser a como siempre fui.

Él tiene una gran reputación, ¿y yo? El mayor logró que había hecho en la universidad fue cuando en mi segundo semestre logré publicar un artículo en un pagina web que era medianamente popular en esos momentos, recibe un reconocimiento por ello y después volví a quedar en el olvido. No hay nada interesante en mi, soy una chica normal y ordinaria como el resto, soy de las que desea ser como esas otras chicas que pueden usar todo porque les queda bien, las que tienen el maquillaje impecable todo el día, las que pueden peinarse con una simple cola alta y verse elegante. Soy de las que se conforma con lo que le dan para no ser una pesada. Pero también soy de las que sueña despierta, de las que desean un amor duradero y soy de las que rara vez se deja pisotear por alguien, así que lo haría, caminaría de la mano orgullosa y sin mostrar alguna clase de miedo o pánico como todos esperaban que reaccionara antes los rumores que se esparcirían en los siguientes días.

La facultad de Choso por fin está frente a nosotros y en cuanto hemos dado un par de pasos por ella en cuestión de segundos han salido chicos de la nada que lo rodean sin sofocarlo, le saludan, se ríen, hablan de diferentes temas a la vez que me cuesta seguir el ritmo a una sola conversación, son solo tres chicos y dos chicas que se han colocado para caminar a nuestra par por todo el lugar. Incluso entre esa pequeña multitud Choso no deja de tomar mi mano, de hecho me ha guiado para que mi agarre pasa de nuestras manos para enrollar nuestros brazos para afianzar el agarre aún más. El habla con todos, ríe con ellos, entiende lo que le dicen incluso si no ha escuchado una sola palabra y es entonces cuando el hace lo que yo considero el primer moviente en este tablero de ajedrez.

— Ella es Hina — Choso me presenta, en cuanto ha hablado el grupo se ha quedado en silencio. Es como si él fuera Jesus y los demás el resto de sus apóstoles que esperaban la sagrada palabra. Creo que esta vez la sagrada palabra era cuando Jesus los reunió en la última cena y dijo que uno de ellos lo matarían, entonces eso me convierte a mí en Judas. Pobre judas, ahora entiendo mejor tu situación. — Ya la conocen ¿no?