Todo iba...relativamente bien. Nada fuera de lo normal, excepto por el echo de que en las últimas cuatro semanas, Lia, la novia de kei, estaba algo rara.
Su apetito había incrementado, se cansaba con facilidad, iba mucho al baño entre otras cosas.
Tsuki empezaba a sospechar lo que era y eso, le quitaba el sueño y no le dejaba pensar con claridad. Ya lo había hablado con su novia, pero ah decir verdad, ambos estaban asustados por que el resultado fuera a dar positivo.
Un día se armaron de valor y compraron una prueba de embarazo. Lia sentía un miedo intenso, ¿Y como no?, si solo era una chica de 17 años que estudiaba y trabajaba medio tiempo por la noches atendiendo una pastelería, aun ni sabia lo que quería estudiar con claridad.
Kei la tranquilizo como pudo y ella entró al baño para realizar la prueba a como decían las indicaciones. Pasado el tiempo requerido para revelar el resultado, salió del cuarto de baño y miró al rubio, no tenía expresión en su rostro pues estaba en un estado de shock.
Kei sabía lo que eso significaba y solo pudo suspirar tratando de asimilar las cosas. Iba a tener un hijo o hija antes de los 17 años.
- Tsukishima - Lia lo miro con inocencia - dime algo, ¿Crees que te engañe o que solo no tome la pastilla?
- Se que no me engañas - confiaba mucho en ella - y de la pastilla, yo vi cuando la tomaste así que ll que fallo fue la pastilla
- Pero...nunca había fallado - un deje de confusión podía notarse en su voz
- Suele pasar que la pastilla falla - tomo la mano de su chica - ¿Tu que quieres hacer?
- Bueno... - suspiro, hablaría con toda la sinceridad de su corazón - estoy de cierta forma feliz por el bebé, pero por otro lado estoy asustada de que lo tenga tan joven, yo quiero tenerlo - podía notarse lo decidida que estaba, pero el mismo tipo podía verse en su mirada la preocupación
- Yo también quiero tenerlo - sonrió levemente de lado - si, no es el tiempo en el que hubiera querido que llegara, pero ya está en camino y la verdad no me gustaría que lo abortaras
- Te amo, kei - la chica sonrió de manera tierna y eso provoca que el corazón de tsuki latiera desenfrenado
- Solo espero que mi hijo me conozca - solto divertido
- ¿Por qué lo dices? - pregunto sin entender
- Bueno, creo que suga-san me matará cuando descubra que deje embarazada a su hermana melliza
- Bobo - golpeó sin fuerza el hombro de kei - le diremos mañana
- Si, después del entrenamiento
- Bien
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Al día siguiente, trataron de pasar las clases de lo más normal posible. Lia se sentía nerviosa por la reacción de su hermano, la noche anterior se lo dijo a sus padres y en ves de recibir un regaño, castigo o incluso desterrarla de la familia como ella pensaba, su madre la brazo feliz por la noticia, su padre platico con ella de manera seria pero acepto la llegada de su nieto entre lágrimas.
Kei se lo dijo a su madre y hermano sin darle tantas vueltas al asunto. Su progenitora primero quiso que le explicara como haría para mantener a un bebé teniendo 15 años y después de dicha platica, solto lágrimas por que seria abuela. Su hermano en cambio lo abrazo apenas se le informó que sería tío, incluso dijo que le regalaría una cuna y su primer traje para salir del hospital.
Ahora, solo faltaba koushi, el peligris era tranquilo en general, pero con esta inesperada noticia, no sabían como reaccionaria.
Al termino del entrenamiento, la pareja se paro frente al equipo entero con los nervios a tope, sentían sus manos sudar y Lia como vomitaria en cualquier momento.
Lo dirían frente a todos por si suga mataba a uno de los dos, hubiera testigos.
- Chicos - habló la peligris suspirando - tenemos algo que informar y requerimos de su atención
- ¿Se van a casar? - pregunto de manera inocente y alegre, hinata
- ¡Cállate, idiota! - grito kageyama
Esto hizo que Lia riera bajo y se sintiera más liviana, kei solo sintió los nervios dispersarse un poco, pero más tranquilo si estaba.
- ¿Entonces que es? - koushi notaba rara a su hermana y compañero
- Yo... - tomo aire y... - ¡Estoy embarazada! - grito cerrando los ojos, sintiendo el peso que traía encima liberarse
El gimnasio quedó en total silencio, tanto así, que se podía escuchar el sonido provocado por una mosca.
Vaya que nadie se esperaba eso.
Koushi se acercó con lentitud a su melliza, primero le dio un zape sin mucha fuerza y luego la abrazo.
- Eres una idiota - musito llorando - pero estoy feliz
- ¿Lia-san esta esperando un bebé? - Daichi seguía procesando todo, la niña que conoce desde primaria seria madre
- ¡Que genial! - un alegre shoyo salto al rededor de los hermanos - yo pido enseñarle a jugar voleibol
- Eso lo haré yo - exclamó kageyma
Tadashi se acercó a su amigo sonriendo y sin importarle nada, lo abrazo mientras lo felicitaba por el echo de que será padre y lo regañaba por ser lo tan joven. Sorpresivamente el rubio respondió al abrazo, la felicidad que sentía era inmensa, sentía miedo, pero la alegría superaba aquel sentimiento de temor.
- Tsukishima - koushi se acercó al chico de primero - cuida bien de mi hermana y sobrino
- Lo hare con mi vida - el de lentes hizo una reverencia ante su mayor unos cuantos segundos
- Algo exagerado, pero esta bien - koushi rio suave
- Muchas felicidades, Lia-san - kyoko abrazo a la chica quien dijo un "gracias"
Próximamente, parte 2