⚠ Este one shot está un poco subido de tono, si no gustas leerlo, simplemente salte o pasa al siguiente OS (si es que ya subi uno) ⚠
Tener una novia, era más lindo de lo que kei pensaba, creía que tener una pareja era perder el tiempo y volverse débil en cuanto a sentimientos se trataba.
Pero al darse una oportunidad para amar, descubrió que no era así, saber que le importas a alguien, que se preocupan por ti, que te den amor incondicional por montones, era bastante agradable.
Su novia era atenta, celosa, inteligente pero no una nerd, de un tamaño ideal para sus gustos, sabía al menos lo básico del voleibol, detallista, era lo que el buscaba. Pero luego de un año y cinco meses de relación, la confianza aumento en sobre manera, lo que dio oportunidad a la chica de sacar su lado...pervertido.
Primero le tiraba piropos subidos de tono al rubio, eso a kei lo ponía nervioso pero nunca le dijo que parara con eso o algo parecido, a decir verdad le gustaba.
Tres meses después, Kaori dejaba chupetones en el cuello de su novio, mordía el lóbulo de su oreja, incluso se sentaba en su regazo y movía de manera discreta sus caderas, todo tenía un gran efecto en tsuki, desde ponerlo rojo hasta causarle una erección.
Muchas veces trato de no caer ante su juego por provocarlo, pero para kei, su chica era tan sexy, que siempre terminaba por dejarse llevar.
Nunca tuvieron relaciones, eran simples roces por parte de Kaori.
Por otro lado, el de lentes se sentía frustrado, el también quería provocarla al menos una vez, decirle algo que la pusiera tan nerviosa que se quedara sin habla y roja hasta más no poder. Cuando intentaba responderle, se ponía nervioso al pensar que haría el ridículo y provocaría burlas de la chica hacia el.
Se lo comento a su amigo luego de mucho dudar, yamaguchi por su parte le aconsejo que dejara el miedo de lado y se dejara llevar por sus instintos carnales, que era normal tener ese sentimiento de miedo por echar a perder el momento, a fin de cuentas el rubio no era alguien experimentado.
Ese día la chica lo puso contra la pared de un solitario pasillo, aprovecho que era uno de los descansos del horario escolar y dejó un chupenton en la clavícula de su chico. Luego se fue no sin antes besarlo.
Kei no hizo nada de nuevo, le ganó el nerviosismo.
En la hora del almuerzo, la chica se sentó en su regazo y de manera muy discreta, movió sus caderas en círculos y daba ligeros saltos sobre el miembro del rubio, provocando que este despertara.
Tuvo que ir al baño para relajar la zona.
En el último descanso, su novia fue a su salón para pedirle un favor.
- Darling, ¿podrías ayudarme a estudiar después de clases? - cuestiono con una sonrisa
- Si, ¿en dónde? - presto atención
- En tu casa, hoy estará mi hermano y ya sabes que es muy molesto, además irá con su novia y ella no me cae bien - hizo un puchero
-Esta bien - solto un suspiro - paso por ti en cuanto termine el entrenamiento
- Oh, no te preocupes, iré a verte entrenar - beso su mejilla, de su mochila saco dos barras de chocolate - una para ti y la otra para Tadashi
- Gracias - agradeció de manera suave, eran pequeños detalles que hacían latir como loco a su corazón
- No hay de que - sonrió y se fue
<◇>
La pareja ya estaba en la casa del masculino, llegaron directamente a su cuarto y la chica se tumbo a la cama soltando un suspiro cansado.
Kei se sentó en el colchón mientras sobaba su cuello, el entrenamiento lo había sentido más cansado que de costumbre.
La chica lo admiro unos segundos para posteriormente sonreír, tsukishima se le hacía tan atractivo en todos los sentidos, de verdad estaba enamorada de aquel rubio amargado.
Se levanto de la cama para ponerse frente al de lentes ganando la atención ajena. Con sus manos lo empujó hasta hacerlo caer acostado dejándolo confundido. Subió sobre el quedando a horcajadas en su regazo, dejando ambas partes íntimas juntas.
Con picardia en su sonrisa, acortó la distancia y beso aquellos labios que tanto le encantaban. Sentía una y mil cosas cada que probaba los labios delgados del de lentes. Era algo simplemente único que no encontraría en alguien más.
Ella empezó a mover sus caderas con lentitud haciendo jadear al chico, notando un sonrojo instantáneo en el más alto.
Y ahí se encontraba, en la misma situación de siempre, el siendo algún tipo de "sumiso". Pero esta vez, seguiría el consejo de su amigo, dejaría salir sus instintos sin miedo a nada.
Con valor, posicionó sus manos en la cintura de su novia con firmeza, lo que la dejó sorprendida pues por primera vez, le estaba respondiendo. Al notar su pequeña desconcentracion, dio un giro a las cosas.
Ahora el, estaba arriba.
Con sus manos, tomo las manos de Kaori poniéndolas sobre su cabeza, dejándola inmovilizada. Puso su rodilla derecha en la intimidad de su chica haciendo un poco de presión, sentía los nervios en todo su cuerpo, pero nada lo detendría.
Movió su rodilla provocando jadeos en su novia, lo que lo motivó aún más para seguir. Bajo a besar el cuello de su chica dejando dos chupetes en el, la vio sonrojarse de manera violenta, con una mano sostuvo las muñecas de Kao, y la otra bajo al cuello ajeno haciendo presión en el sin llegar a causar algún daño.
Busco con desespero los labios de la más baja, los beso con amor y pasión metiendo su lengua en el procesó. La chica gemia por tanto placer que sentía, quería tener el miembro del rubio, dentro de una vez.
Kei al notar que logro su cometido, se alejo de ella dejándola con la respiración pesada y con ganas de más.
- Iré por algo para beber, tu saca tus libros - al salir de la habitación, se sentó en las escaleras sintiendo como el corazón se le saldría por la garganta
Al fin pudo responderle como quería, era claro que lo repetirían, pero quizás la próxima vez, habría algo más que solo roces.
Alitzz fuera.
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