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Difícil.

Esa era la palabra que mejor describía la situación.

Tener un novio como kei era complicado, pues su falta de expresión en cuanto a sentimientos, su sarcasmo, sus bromas, sus malditos comentarios nerds que solo te dejan pensando hasta que lo captas, era algo que frustra a cualquiera.

Pero para Riku era diferente, todo lo antes mencionado lo volvía interesante a su parecer, era como un tipo de reto para poder liberar por completo el corazón de su rubio.

Ahora bien, si eso era cierto, lo difícil para ella es que su novio no captaba las indirectas con doble sentido.

O quizá se hacia pato, lo que sea.

Le iba más a que no las entendía.

¿Entonces para que tenia esa cabezota? ¿Es solo un dorno además de su inteligencia?.

La chica pensaba cada cosa...

- Kei, hola - la azabache lo abrazo de forma cariñosa siendo correspondida

- Pensé que tardarías más - habló el de lentes luego de separarse

- El club terminó antes - informo - el entrenamiento aun no termina por lo que veo - echo una ojeada a los sudados jugadores

- Tenemos que entrenar más por los partidos que se acercan - acaricio la cabeza de la más baja

- Oh, bueno. Esta bien, yo espero - dejo la mochila aún lado de la banca - oye, kei

Esta le hizo una seña con su mano para que se acercara, el masculino frunció un poco el ceño y se agacho.

- No traigo ropa interior - susurro

Ahora kei se acercó a su oído para susurrar de manera confundida.

- ¿Por qué no? ¿Paso algo? - confusión total

- Olvídalo, tsuki - suspiro - era una broma

Se alejo para acercarse a sus amigos de curso, los de tercero para ser mas exactos. estos notaron al instante el puchero que su amiga tenía en los labios, solo pudieron reír pues ya estaban al tanto de la situación.

Despues de cierto tiempo, el equipo tuvo otro descanso para tomar agua y secarse un poco el sudor.

Bien, segundo intento del día.

La azabache diviso a su chico sentado mientras tomaba agua, veía el sudor correr por las partes visibles de su cuerpo, inconscientemente mordió su labio al mismo tiempo que imaginaba a su chico encima de ella mientras...

Ok, mucha información.

Se acerco a él sentándose en su regazo, el de lentes solo le dio una sonrisa leve para comenzar a secar el sudor, la femenina acaricio con sus dedos de manera discreta la nuca de kei, su boca tomó lugar a centímetros del oído de su novio, susurro con un toque de seducción en su voz.

- Kei, estoy caliente - solto un jadeo para ver si eso funcionaba

- ¿Te sientes mal? - se podía notar un poco de preocupación en su mirada

- ¿Qué? - habló incrédula

- Mhm, no tienes fiebre - el chico toco la frente y mejillas de su novia con su mano libre, buscando alguna respuesta al malestar de su chica - ¿Comiste algo en mal estado?

- Kei, te amo - lo abrazo y segundos después se separo - pero a veces eres un bobo

Sin más, se levanto para ir con Daichi en busca de consuelo. Pues nuevamente había fallado.

One Shots - Tsukishima Kei Donde viven las historias. Descúbrelo ahora