Jennie POV'S
Papá me mira con desaprobación, mientras, mamá me inspecciona como por décima vez asegurándose de que no tenga ni un rasguño.
Después de llegar a casa, solté la desagradable noticia del pequeño accidente frente a la tienda, ni siquiera sé muy bien cómo es que se los conté. Fue más como un vómito verbal, y de alguna forma, mis padres lo entendieron, aunque claro, les llevó un tiempo calmarme.
—¿Me repites una vez más el nombre de esa chica?—Mamá se sienta a mí lado en el sofá.
—Lisa, su nombre es Lisa—Papá toma una profunda respiración, cruza los brazos sobre su pecho y suelta un exabrupto. Cosa que no sucede muy a menudo, porque en casa existe una política de cero groserías. Pero aclaro, que yo no la cumplo tanto como mis padres quisieran.
—¿Tienes su número telefónico? Debemos tener sus datos para hablar con el seguro.
Mí rostro palidece. ¿Tenía que pedirle su número? Muerdo mí labio inferior con nerviosismo, y lentamente niego con la cabeza.
—Pero ella tiene el mío, me dijo que se iba a contactar en el transcurso de los días—Papá me mira como si fuese idiota, y mamá suelta un suspiro.
—En situaciones así, debes tener forma de contactarte con la persona.
—Lo siento, me puse muy nerviosa— Justifico mí innegable momento de estupidez de la manera más pobre.
William empieza a caminar de un lado al otro, y entonces sé, que esta comenzando a ponerse nervioso. Papá puede ser buenísimo, pero no quieres verlo enojado. De repente se detiene justo delante de mí, y con una mirada molesta y expresión severa, dice:
—Tú te encargarás de esto. Tengo suficiente con la apertura del nuevo consultorio— Trago saliva con fuerza. En mí vida hice algún tipo de papeleo—Tendrás que pagar el arreglo, y luego el seguro nos reembolsará, mientras tanto, si quieres dinero vendrás por las tardes al consultorio.
No lo contradigo. Me parece una buena idea, necesito dinero, y además, mantendría la mente ocupada. Asiento con la cabeza como respuesta, y me vuelvo hacía mí madre. Ella mantiene la misma expresión que William, por lo que comprendo que está en total acuerdo con la decisión que él ha tomado.
—Lo siento de verdad, no era mí intención.
Siento como la vergüenza me tiñe las mejillas de rojo.
La mirada de papá se suaviza, me extiende la mano y me lleva hasta su pecho en un cálido abrazo.
—El auto no es lo que me importa. Imagina que el choque hubiese sido de gravedad—Y al decir aquello, sus brazos me sostienen con más fuerza, como si tuviese miedo a que desapareciera—Ya hemos perdido demasiado—Su voz se quiebra.
Me toma por los hombros y me aparta con delicadeza. Sus ojos, cristalizados por las lágrimas retenidas, mantienen un brillo melancólico.
—Lo sé, y prometo que ésta será la última vez que los ponga en una situación como esta.
El fin de semana comienza sin ningún tipo de noticias de Lisa, lo que no sé si es bueno o no, aún no me decido.
Después de la larga y exhaustiva conversación que mantuve ayer con mis padres, parece ser que está todo aclarado. Así que no queda más que esperar hasta el Lunes, y ayudar a papá por las tardes con su consultorio.
Ya me explicó todo, no serán más que dos horas diarias, dado que tiene a su secretaria y no necesita mucho más para llevar a cabo los papeleos correspondientes del día.
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HEAVEN | Jenlisa G!P
RomanceEl pequeño pueblo de Westford, tan tranquilo y pintoresco como las personas que lo habitan, guarda tradiciones y leyendas más inquietantes de lo que uno se podría imaginar. Aunque Jennie es ajena a todo eso a su llegada, con el pasar del tiempo se a...