24

1K 67 9
                                    

Jennie POV's

La habitación es tal cuál la recordaba, las mismas cosas en el mismo lugar; la gigantesca cama con el rojo edredón sangre, las paredes oscuras y el marco gigantesco amurado con la sogas y cinturones. Sin embargo aunque todo sea familiar para mis ojos me tomo el tiempo para dar un nuevo vistazo a mi alrededor. En la esquina están las pinturas, el bonito lienzo con su caballete y algunos trapos sucios.

—¿Pasas demasiado tiempos aquí?—Hago un leve gesto a los pinceles usados con resto de pintura seca sobre la paleta de madera.

Su mirada no se aparta de mí en todo el camino que hago hasta allí. Lisa hace un sonido con la garganta vibrante y bajo. Me vuelvo a verla, parece pensarlo.

—Algunas veces—Dice—Cuando debo quedarme a asegurarme que todo se mantenga en orden—Hace un breve silencio—En especial en las noches agitadas.

Al ver los instrumentos que la pelinegra utiliza para trazar sus obras caigo en la cuenta de que en todo éste tiempo jamás me ha dado más de una clase. Tanto drama de por medio nos ha empujado a darnos besos que me roban el aliento y a tocarnos como todos unos desenfrenados, pero nunca nos detuvimos a repetir aquella vez que la pasamos tan bien en el lago, y eso que aquél día ni siquiera tomé una sóla brocha.

Enarco una ceja—¿Y mi turno de pintar será pronto?—Inquiero socarrona.

Rasca su barbilla con lentitud, pasando después su gran y tatuada mano por parte de la mandíbula y labios. Me quedo absorta en tan simple gesto.

—Quizás—Es ambigua.

—¿A caso te has olvidado de nuestras clases?

Niega—Nunca me olvidaría, pero me frustras demasiado cómo para tenerte la paciencia que se requiere—Bufo. En su boca se asoma una sonrisa malvada.

Me fijo en los colores sobre la paleta, varios oscuros unos pocos claros. ¿Qué habrá pintado ésta vez? Sé por lo que he visto antes que es una gran artista. Talentosa, detallista y ambiciosa. Me asaltan las ganas de preguntarle pero temo que sea demasiado para ella, puede que en ese ámbito de su vida sea más reservada de lo que ya acostumbra ser en lo demás.

—Entonces eso es todo, nada de clases para Jennie—Frunzo los labios. Su sonrisa se ensancha.

—Cuando te di una tarea te llevó más de diez minutos confiar en mí y decirme en lo que estabas pensando—Aquel brillo de superioridad aparece en sus ojos. Se jacta de que haya sido en ella. Tengo buena memoria, fue uno de los momentos más vergonzosos que he vivido en toda mi vida.

—Tal vez pueda hacerlo ahora—Me encojo de hombros. La expresión en su rostro resplandece con una idea.

—Bien—Acepta.

Me sorprendo de que acepte tan rápido, esa es la señal que necesito para comenzar a prepararme mentalmente para lo que sea que se avecine. Lisa camina hasta los tarros de pintura y toma algunos pocos colores al azar, saca las tapas volcando lo justo sobre la tableta de madera. Me la entrega poco después, mi vista se dirige a los vibrantes colores y luego al lienzo en blanco.

—Comienza—Alza una ceja con arrogancia. Me está retando.

La miro sin comprender.

—¿Sólo así?—Cuestiono. Ella asiente.

Me inclino para tomar uno de los cuantos distintos pinceles acumulados en un vaso, pero con un suave "no" de su parte entiendo que no quiere que los toque.

—¿Cómo se supone que vaya a trazar algo sobre el paño?—Arrugo el entrecejo.

—Usa las manos—Dice como si fuera obvio.

HEAVEN | Jenlisa G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora