Ya pasaron tres semanas desde mi noticia, Tom era cuidadoso conmigo, básicamente no quería ni que los chicos se me acercaran ya que eran unos brutos.
Mi barriga había crecido, aún así me veía gorda.
Tom siempre me hablaba de que su sueño se cumpliría, de qué haría cuando nuestro bebé naciera, y que le enseñaría a tocar la guitarra, me ponía feliz al verlo así de emocionado.
Estábamos en la casa esperando a que los chicos nos recogieran, íbamos a cenar a un restaurante.
Yo estaba en el baño, poniéndome pincitas rosas y blancas con estampado de fresas en mi pelo, mientras que Tom se arreglaba y se ponía su camisa.
—Me Dan ganas de hacerte cosas, pero no puedo.—Me burlé de él.
—Luego el hormonal era yo, pero no digo nada porque ahora estás tú con las hormonas raras.—Me besó.
—¿Te has echado colonia?—Asentía.—Se nota, se nota.
Una bocina Sonó, corriendo bajamos para sentarnos, esta vez iban en una furgoneta.
—Habéis flipado con la furgo, eh.—Decía gustav.
—Ya ves, porque si no la pobre Ani se tendría que sentar en Tom, pero como Bill no quiere trillizos..—Dijo Georg.
—¡Eh, eso no dije yo! —Bill hacia puchero.
—Bill, ¿Otro paquete de pañales?—Suspiraba Tom.
—¡Tenemos para hacer un centro comercial! No tengo ni ocho meses, Bill dios mio.—Ironicé.
Dejando esta conversación de lado, llegamos. Era un restaurante chino, aunque no se me apetecía comer.
Entramos y nos atendieron, nos situaron mesa y pedimos.
—Oh, Annie encantado.—Me dijo el camarero, yo giré mi cabeza, no entendía nada.—Soy un amigo de tu padre, bueno, era... tenía muy mal humor hasta que lo dejé.—Que buen dato.—Ten cuidado, dijo que iría a por tí antes de que le pusieras una denuncia o consultaras con policías.—Murmuró.
—¿Puede dejarla y hacer tu trabajo de una vez?—Saltó furioso Tom al ver que el camarero nunca terminaba de murmurarme.
—Sí, lo siento. —Se fué.
—Annie, cuenta.—¿Sabían que Bill es un chismoso?
—Ah nada, me decía que era amigo de mi padre y..
—Eso no, lo que te Susurraba.—Añadió Gustav.
—Eh, que vendría a por mí antes de que lo denunciara.—Se quedó en shock.
—¿Y a qué esperas? —Decía Georg.
—Tarde o temprano lo denunciaré junto a Nessa y mi hermano, o mejor dicho, Matías. No entiendo como esa horrible persona tiene mi sangre.
La comida llegó, para mí, puro arroz con algunos guisantes.
Me dio calor, probé un poco y fui directa al baño, sin decir nada.
Cerré la puerta, me agarré el pelo para comenzar a vomitar. Era inevitable.
—¿Nena?—Sonaba Tom a fuera de la puerta.
—Pasa.
Tiré de la cisterna y me eché algo de agua en la cara, estaba pálida.
—¿Estas bien?—Me preguntaba mientras que cerraba la puerta y rodeaba mi cintura con sus manos.
Comencé a llorar, ni yo misma sabía controlar mis sentimientos, y esto que.
—Me da asco la comida y tengo hambre.—Seguía llorando, Tom se Reía de mí.—¡No te rías!—Hacía como que pataleaba.
Tom me abrazaba, pero de fondo estaba su risa.
Luego de un rato, comencé a reírme yo también. Esto es raro.
—Lloras y ríes, ¿que haces? Decídete.—Me Sonreía.—Vamos con los chicos.—Me dio un beso en la frente, me sentía como una niña pequeña.
Fuimos hasta la mesa, los chicos ya se habían comido los platos, joder, engullen la comida, ¡lo que me gustaría a mi hacer en estos instantes!
—Hasta que deciden llegar.—Soltó Bill.
—¿Que hicieron?—Preguntó Gustav, con mirada coqueta.
—Oh, nada.—Dije.—Agarrar un pene.—Finalicé con una sonrisa.
—Ni le hagan caso, en el baño conmigo estaba llorando y riendo.—Le eché una mirada desafiante.
Mari's note
Holaa, hoy una comidita corta para no dejarlos sin caps mientras que creo ideas :)
Yo soy tipo el humor de Annie
Tik Tok: Fanddom_tokioblink
Voten!!
Alguna duda, critica, idea o fallo aquí!! <33♡☆
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Mi profesor de guitarra ; Tom Kaulitz
Fanfiction"No todo acaba como empieza." "A la tercera va la vencida." Annie, una niña tranquila en clase, solidaria pero ya estaba acostumbrada. Su hermano era nombrado Matías, el mimado de Papá y Mamá. Yo siempre fuí la retirada de la familia. Un día decidí...