Cómo era de esperarse, todos hicieron un gran escándalo debido a que Jae Kyung se opuso a su boda, y al final ella cargó con la responsabilidad.
El grupo de amigas la habían felicitado, a pesar de que aquello había sido algo muy duro para Jae Kyung, sin embargo, ella se había caracterizado siempre por ser una chica genial, y no quería perder su reputación como tal.
Jae Kyung ayudó a que Jan Di y Jun Pyo estuvieran juntos, olvidándose por un momento de la tormenta que aún continuaba.
Yi Jeong se ofreció a llevar a Ga Eul de vuelta al hotel, y en el camino se detuvieron frente al campo de flores mientras veían el mar. Ga Eul no dejaba de llorar debido a lo conmovida que estaba por la buena obra de Jae Kyung, a lo que el alfarero solo pudo sonreír ante eso, a pesar de todo, Ga Eul seguía siendo tan sensible como siempre.
Yi Jeong respondió a las dudas de la chica respecto al porqué no había acudido a su cita con Eun Jae hacia ya tres años, lo que cada vez dejaba ver más al verdadero So Yi Jeong.
Por su parte Ji Won decidió ir a su habitación a cambiar su ropa, al igual que el pelirrojo, pues antes de regresar a Seúl querían pasar un rato agradable en el lugar, esta vez sabiendo que los planes de Kang Hee Soo seguían arruinandose respecto a separar a su hijo de Geum Jan Di.
Woo Bin llegó a su habitación, y al entrar de inmediato supo que algo no estaba bien. Sabía que alguien ajeno se encontraba dentro, aún si no lo veía.
A paso lento ingresó inspeccionando todo a su alrededor aún sin ser capaz de descubrir quién se había atrevido a invadir su espacio.
Estaba cerca de la llegar a la pequeña sala del lugar, la cual se encontraba delimitada con puertas de madera, entonces un par de pasos fueron suficientes para que un hombre se acercara a él tomándolo desprevenido lo que terminó con él sobre el suelo siendo sujetado del brazo.
Woo Bin hizo una mueca de dolor, pero al escuchar la voz de su oponente, la sorpresa no tardó en expresarse en su rostro.
-- Veo que aún te falta entrenamiento.
-- Padre, ¿Qué haces aquí?
Jae Wook ayudó a su hijo a ponerse de pie, y saliendo de la habitación del chico, Ye Sol se acercó a su esposo.
-- ¿Qué pregunta es esa? Parece que no estás muy feliz de vernos.
-- No es eso, sólo que... Me tomaron por sorpresa.
-- No podíamos faltar al matrimonio de Gu Jun Pyo. Sabes que también lo apreciamos como si fuera de la familia. Aunque... Las cosas no terminaron como debían.
Woo Bin junto a sus padres, tomaron asiento en la sala del lugar, y por alguna razón el pelirrojo sentía que ese encuentro era en cierta parte sospechoso.
-- Veo que vinieron algunas otras personas que no debieron estar aquí -- mencionó seriamente Jae Wook mirando fijamente a su hijo -- Y terminaron arruinando el evento.
-- No creo que haya sido por ellas, ya que al final la novia fue la primera que se opuso a su boda -- dijo el pelirrojo sosteniendo la mirada de su padre.
-- Sabía que dirías algo como eso. Siempre buscando justificar a todos.
-- ¿Sólo querías hablar de eso?
-- Quería esperar a que regresaremos a Seúl para poder tocar el tema, pero dadas las circunstancias, creo que en cuanto antes hablemos, mejor.
-- ¿Qué quieres decir? -- de pronto un escalofríos recorrió por completo el cuerpo de Woo Bin.
-- Beak Ji Won -- y el nombre que tanto temía, fue mencionado, por lo que de inmediato frunció el seño inconscientemente sin saber que aquel gesto solo confirmaría las sospechas del mayor -- Me he dado cuenta de que eres cercano a ella.
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Tenías que ser tú ||Song Woo Bin||
Fanfiction¿Qué pasaría si todo lo que esperabas, cambiara de pronto por la aparición de una sola persona? Una persona que ni siquiera quería entrar e intervenir en ese destino que se decía escrito, que no pensaba siquiera que su vida también cambiaría. ¿Pero...