Tenías que ser tú ||Song Woo Bin||

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Todos quisiéramos detener el tiempo, pero es algo imposible de hacer, que incluso él mismo se apresura sin darnos la oportunidad de presenciar su paso...

Siempre existe la posibilidad de un nuevo comienzo, y solo nosotros sabemos si la aprovecharemos o la dejaremos ir para siempre...

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8 AÑOS DESPUÉS

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La joven niñera que había sido contratada para cuidar de un pequeño de siete años, una vez más se encontraba buscando en todas partes de aquella casa, al pequeño, a quien le encantaba jugarle bromas y meterla en aprietos.

La mujer estaba tan concentrada en su búsqueda que no notó la llegada de una persona más al lugar, quién al verla buscando debajo de las mesas, rio para sí misma.

-- ¿De nuevo no puedes encontrarlo?

Al escuchar aquella voz, la chica se sorprendió y rápidamente se puso de pie.

-- Lo siento mucho -- hizo una reverencia -- Es que...

-- No te preocupes, yo me encargo. Siempre es lo mismo con él.

-- Gracias, doctora Beak.

Ji Won sonrió y asintió, para después la chica tomar sus cosas y marcharse de la casa, pues su turno de trabajo terminaba en cuanto la chica llegara a la casa.

Después de dejar su bolso en la sala, Ji Won inspeccionó el lugar con la mirada aún sin poder ser capaz de ver a alguien, y el silencio total le confirmaba que una vez más el pequeño había fastidiado a su niñera durante el día.

Lentamente se acercó al centro de la sala, donde con una sonrisa llevó sus manos a su cintura. Se le había ocurrido una idea para sacar al pequeño de su escondite.

-- ¡Pequeño Beak! -- gritó -- ¡Mamá está aquí y trae regalos para ti!

No pasó mucho cuando rápidamente se escucharon los pasos del niño, provenientes de la planta alta para después bajar las escaleras y este llegar frente a Ji Won, quién lo tomó de los hombros mirándolo seriamente.

-- Eres muy interesado para tu edad -- se quejó -- Solo dejaste de ocultarte porque dije que había regalos.

-- No es por eso -- se defendió el niño -- Dijiste que mamá estaba aquí, ¿Dónde está?

Ji Won sonrió y alborotó el cabello del niño.

-- Aún no llega. Recuerda que hay muchas vidas que debe salvar en el hospital.

El pequeño desilusionado soltó un suspiro y se sentó en el sofá. Ji Won se acerco a él.

-- ¿Qué pasa, Seung Hyun?

-- Siempre están trabajando y no puedo pasar tiempo con ellos. Ni con papá ni con mamá. No les importo.

Ji Won lo abrazó.

-- Trabajan para poder darte todo y no te falte nada. Ellos te aman. Además... Te tienen una sorpresa para el fin de semana.

-- ¿Una sorpresa? -- preguntó emocionado el pequeño.

-- No puedo decir nada más, porque Seung Jo me mataría.

-- Por favor tía, no diré nada y me haré el sorprendido cuando me digan.

-- Ah, ah -- negó Ji Won -- No quiero arruinar por completo la sorpresa. Por ahora, ¿Qué te parece si jugamos en el jardín con Hachi?

-- ¡Si!