ES POR TI || Kivi

No te voy a limpiar las lágrimas

A la mañana siguiente, o más bien unas horas después ya que Chiara y Violeta estuvieron hablando, llorando y riendo durante dos horas después de la fiesta, los chicos se levantaron y fueron saliendo de la habitación para desayunar. Chiara y Violeta seguían en el sofá, la pelirroja miraba a la más pequeña con ternura que estaba acurrucada sobre su pecho para guardar el calor. Le había cogido mucho cariño a esa chica en horas.

Mientras algunos se preparaban el desayuno y se sentaban en la mesa, Chiara se remoloneaba sobre el pecho de Violeta tapándose la cara con la mano para evitar la luz del sol por un rato más. La pelirroja sonrió con ternura y la apartó con delicadeza de encima de su pecho para ir a desayunar y dejar que descansara un rato más.

—¿Tía que hiciste anoche? no te he visto en la habitación.— preguntó su amiga y concursante Denna en cuanto la vio en la cola del desayuno.

—Me quedé con Kiki en el sofá, tenía frío.

Denna alzó una ceja poniendo su plato sobre la encimera. —¿Kiki?

—Chiara, la amiga de Martin, que por lo que veo sigue en la habitación con Juanjo.— respondió sin mirarla.

Denna rió. —No sé si quiero saber que están haciendo ahora que estamos todos desayunando.

—Martin cualquiera cosa menos preocuparse por su amiga desde luego.

Denna se puso un par de lonchas de pavo y dos tostadas sobre el plato. Violeta se hizo unas tostadas con jamón, queso y aguacate, ese había sido su desayuno durante todo el concurso y quería disfrutarlo una vez más. Ambas caminaron juntas hasta la primera mesa y se sentaron la una frente a la otra, como habían hecho durante todo el concurso de la rubia.

Al lado izquierdo de Violeta solía sentarse Omar, pero por trabajo había tenido que irse de la academia hacia unas horas, así que esa silla estaba vacía, sabía que nadie se sentaría, a todos les gustaba mantener sus sitios del concurso. A su derecha y presidiendo la mesa se encontraba Salma, habían tenido algún encontronazo durante el concurso pero se llevaban bien, aunque no como en los castings finales y en esa misma mesa también se sentaron, Bea, Álvaro y Ruslana, Juanjo y Martin solían ocupar los últimos sitios de la mesa, uno frente a otro, pero a saber que estaban haciendo o en las duchas o en la habitación.
Violeta estaba muy molesta con Martin, ni siquiera se había preocupado de darle los buenos días a Chiara, que justo se acababa de levantar del sofá con una cara que no pudo evitar hacer reír a la mayoría de los chicos, incluida a la de Motril, que sentida se levantó de la silla entre risas para indicarle como se cogía el desayuno.

—Ahg, my head hurts, odio el alcohol.— dijo en cuanto Violeta se acercó.

—Ayer no decías lo mismo, amore.— rió la pelirroja dándole un plato y señalándole la comida del desayuno.

—Hay una silla vacía a mi lado, te puedes sentar si quieres, Martin está con Juanjo por algún rincón así que.

Chiara asintió con pesadez, realmente le dolía la cabeza por la resaca, no sabía que había bebido tanto. Cogió un par de tostadas con jamón y en cuanto vió los yogures alpro de lima limón pegó un gritito de alegría que llamó la atención df algunos de los chicos, también de Violeta, que giró la cabeza preocupada y se echó a reír en cuanto vio la situación. Chiara incluso había soltado el otro plato y se estaba echando en un bol dos yogures alpro con la lengua fuera toda concentrada para que no se derramase ni una gota fuera del bol.

—Está chica es un show.— rió Ruslana.

A Chiara le encantaban los yogures alpro de lima limón, desde que empezó a ver el programa por su amigo y la pelirroja, quiso probar esos yogures y vaya que si lo hizo, tenía dos cajas en su nevera por semana y si por ella fuera aún se compraría dos cajas más, pero su tía, que le controlaba la compra y el piso en general por lo desastre que era la chica, no le dejaba comprar más de dos cajas a la semana.