Querido diario:
Ayer fui tan feliz, genuinamente pensé que mi vida podía mejor, pero esta misma me golpeó en la cara recordándome que no merezco ser feliz.
¿Tan mala persona soy como para no merecer sonreír?
Hoy pasé toda la tarde en el hospital con suero y un montón de enfermeras y gente gravemente herida, incluso habían policías y todo porque la tonta casi se mata al perder el equilibrio por sus mareos.
Mi salud va de mal en peor, ya no puedo mantenerme en pie y cada músculo de mi cuerpo duele como si me dieran una pálisa constante.
Mi mamá en juego dijo que soy inútil y solo sirvo para estudiar ¿Dolió? La verdad es que ya no duele, ya no siento dolor emocional, estoy tan cansada que mientras escribo esto mis ojos derraman lágrimas, pero aun así no siento la tristeza.
Eso es gracias al dolor físico que siento, impide que me concentre en el emocional.
¿Por qué no puedo ser como Cami? Ella a sufrido más de lo que cualquiera debería sufrir y aún así mantiene la frente en alto con una sonrisa y confianza en sí modas.
Ay diario, esto ya es patético ¿No lo crees?
Jajajaja ¿Sabes algo? Me rindo.
Ya entendí que no merezco estar bien.
Me rindo.
Aquí me tienes vida, ganaste, me rindo.
Ya no me quejaré.
Ya no esperaré nada bueno.
Ya no me ilusionaré con la idea de que alguien me ame.
Ya no lloraré.
Ya no lucharé.
Solo... solo... fingiré hasta convencer a mi cerebro.
Eso o esperar a que mi salud acabe conmigo.
Estoy resignada.
Andrea M-C
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El rincón secreto de Andrea
No FicciónUn diario que nos ayudará a conocer la vida de Andrea; una joven discapacitada que lucha contra la depresión.
