Capítulo 10: ¿Debilidades?

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Law había comprendido que a __________ no le gustara la idea de meterse en un submarino. Todo el mundo tiene miedo a ciertas cosas, pero él había subestimado el nivel de terror en estado puro que __________ iba a experimentar.

Durante todo el trayecto, su cuerpo había estado completamente rígido al lado del de él. Tenía las manos agarrotadas sobre las rodillas. Mientras, Rose contemplaba el mundo submarino con los ojos abiertos de par en par, Law no había podido dejar de mirar ni un solo instante a __________.

–¿__________, estas bien?

___________ no respondió. Law, la miro algo preocupado.

–¡HERMANO LAW MIRA! – grito Rose sorprendida

–Rose, no grites tanto

–Lo siento

La niña estaba maravillada viendo todo lo que podía ofrecer el mar, o una parte de él.

Al final, le había tomado una mano entre las suyas y había comenzado a acariciar suavemente los nudillos, que estaban blancos por la tensión. Ni si quiera _________, sintió eso, es más, le provoco tranquilidad ya que poco a poco, Law sintió que la tensión se iba aliviando dentro de ella, pero en ningún caso llegó a relajarse por completo.

Al bajar del submarino, __________ fue corriendo al baño.

–¡__________!

–Tal vez le urge ir al baño

–sí, vamos a esperarla en aquellas bancas

–sí

Law vio la dirección en la que se había ido su misteriosa esposa, mientras Rose, jugaba con las gaviotas, Law se preguntaba, ¿Qué secreto escondía aquella mujer llamada su esposa?

__________, estaba en el baño vomitando, su pánico se manifestaba de esa manera.

–maldición...

__________ aun no superaba su pasado duro y esa terrible broma que no era inocente para nada que le había echo en la niñez.

___________ sabia una cosa, no podía negar lo que claramente su esposa, Law, había visto. Estaba aterrada ahí abajo y debía tener una clara respuesta para eso ya que estaba segura que la bombardearía con preguntas.

Cuando regresaron a la casa, bajaron a la playa para bañarse allí como todas las tardes. Sin embargo, _________ se limitó a quedarse en la playa, oculta tras unas enormes gafas de sol, mientras que Law y Rose retozaban en las olas.

Cuando Rose se cansó de nadar, Law la envió a la casa para que ayudara a la ama de llaves personal de su alojamiento a bajar unas bebidas y unos aperitivos a la playa. Cuando la niña semarchó, Law se sentó sobre la arena junto a la hamaca en la que _________ estaba sentada.

–¿Te encuentras bien? –le preguntó. La miró y se dio cuenta de que no parecía estar más relajada en aquellos momentos de lo que lo había estado en el barco.

–Sí –dijo ella secamente.

–¿Significa eso que estás muy bien o solo bien?

–Estoy bien, ¿de acuerdo?

–Hoy has sido muy valiente –comentó él.

–Eso no es verdad. Estaba aterrorizada.

–Pero lo hiciste de todas maneras.

–Bueno, no ibas a llevar a Rose a menos que yo fuera también, así que no me quedó más remedio.

–Lo siento. No debería haberte hecho pasar por eso.

–No. No deberías haberlo hecho.

–_________, ¿por qué tenías tanto miedo?

–Ya te lo he dicho. No me gustan los espacios cerrados.

–El avión que nos trajo hasta aquí es un espacio cerrado. El helicóptero que nos llevó a Waikiki es un espacio cerrado. ¿Por qué el submarino?

__________ se echó a temblar. Tomó su pareo y se lo coloco sobre los hombros como si de verdad tuviera frío.

–Iré a ver si puedo ayudar a Rose.

Se levantó de la hamaca, pero, antes de que pudiera ponerse de pie, Law la detuvo.

–No, quédate, por favor. Ya la están ayudando. ¿Por qué no te quieres abrir conmigo, _________? Somos marido y mujer. Se supone que debemos aprender a comprendernos el uno al otro. Si no me permites que te comprenda, ¿cómo podremos hacer que nuestro matrimonio funcione?

La miraba fijamente, viento cómo los sentimientos se reflejaban en aquellos ojos precioso. Ella tenía el cuerpo tenso y los puños apretados, igual que en el submarino.

–Solo hace cuatro días que nos conocemos, Law. No puedes esperar conocer inmediatamente todos mis secretos. Una mujer necesita un cierto misterio a su alrededor.

–El misterio es una cosa. Lo que tú haces sea probablemente nivel de espía número 10.

Ella se echó a reír. Law sintió que su cuerpo entero reaccionaba ante aquel sonido. Sentía un profundo gozo por haber provocado una sonrisa en aquel hermoso rostro. Una reacción profunda y mucho más intensa le hacía desear tomarla entre sus brazos y trazar la línea de la clavícula con los dedos y luego con los labios.

–¿Nivel de espía número 10? ¿Qué tienes, doce años?

–Está bien. Creo que el número 10 es demasiado alto. Tal vez el 6... Ahora en serio, _________. Quiero llegar a conocerte, a comprender lo que sientes. A hacerte feliz; si es posible. Pero si no me dejas acercarme, no puedo hacer nada.

Un ligero rubor tiñó las mejillas de __________. Ella parpadeó y tragó saliva antes de apartar el rostro hacia el otro lado.

–Mírame, ___________. No sigas escondiéndote de mí.

Lentamente, ella giró el rostro hacia él. Law le tocó suavemente la mejilla con un dedo.

–No quería disgustarte –le dijo suavemente mientras capturaba una lágrima que se le estaba deslizando por el rostro.

–No eres tú. Soy yo. Tan solo estoy cansada, nada más. Mira, tuve una mala experiencia de niña. Como parte de un juego, me encerraron en un viejo frigorífico. A mí me entró el pánico y me provocó mucha angustia en lo que se refiere a estar encerrada en espacios muy pequeños.

–¿Cuántos años tenías?

–Era un poco mayor que Rose.

–¿Y tus padres no te ayudaron a superarlo?

–Acabábamos de enterarnos de que mi madre tenía una enfermedad incurable. Mi padre tenía bastante con trabajar mucho y tratar de mantener un tejado sobre nuestras cabezas.

–Una vez más, lo siento.

–No es culpa tuya. En realidad, no es culpa de nadie. Uno sigue adelante con su vida y hace lo que tiene que hacer.

–¿Es así como te enfrentas a la vida? ¿Haces lo que tienes que hacer?

–La mayoría de las veces.

–¿Es esa la razón por la que te casaste conmigo?

–¡No! –protestó ella–. Eso es diferente.

–Cuéntamelo, _________. ¿Qué esperas de nuestro matrimonio?

–Lo que espera todo el mundo –dijo sin entrar en detalles–. Mira, ya vienen Rose y la ama de llaves.

Había escuchado una clarísima nota de alivio en la voz de __________ al ver que las dos se acercaban por el sendero. Decidió que lo dejaría pasar por aquella vez, pero no iba a rendirse.





Muchas gracias por leerlo, espero que les guste mucho. Y ya esta mi nueva historia en mi perfil sobre el personaje Itachi Uchiha, espero les guste y también le den amor.  💖💖💖💖

Juramento de Venganza - Trafalgar Law & Tú 🍋💖🤞🏻💕Donde viven las historias. Descúbrelo ahora