ATRACTIVA | Genos x T/N

Capítulo 44

Después de aquél masaje que me había dado Genos caí profundamente dormida, me había relajado tanto que no recuerdo en qué punto de dormí ya que solo sentía sus dedos presionar en los músculos tensados esparciendo aquella crema de textura ligera de sutil olor fresco, solo sentí entre sueños que se había quedado conmigo abrazándome sintiendo su calor que había generado su metálico cuerpo.

Desperté poco a poco con la respiración pesada, realmente había dormido con profundidad, escuché que alguien estaba en mi cocina porque se escuchaba algo de ruido y el fregadero corriendo el agua.

—Ya despertaste, ¿Dormiste bien?— dijo en voz suave el chico rubio asomando su cabeza en dirección donde me encontraba durmiendo.

—Si... ¿Qué hora es?— sentí algo pánico por un momento al ver el cuarto oscuro y solamente la luz encendida de la pequeña cocina.

—Las 7 p.m.— dijo y me puse de pie, pero el ciborg se dirigió rápido hacia mi. —¿Qué pasa?.

—Dijimos que íbamos a ir a cenar y pasar el rato juntos— lo miré a los ojos mientras me sentaba sobre mis piernas.

—No te preocupes, necesitabas descansar, te veías muy agotada— acarició mi mejilla con su pulgar. —Por cierto, feliz aniversario— dijo sonriéndome y apuntando con la mirada una linda caja de rojo carmín con un lazo de tela satinada de color dorado que había colocado cerca de mí mientras dormía.

—Agh, perdón, lo olvidé y no preparé nada, perdóname— si ya estaba preocupada, ahora estaba el doble.

—___, escúchame— me tomó de las mejillas para mirarle. —No te culpes, tenías cosas más importantes que hacer, yo estuve ahí, sé que tu cabeza estaba ocupada en darlo todo para tu próximo futuro— su voz era firme, pero mantenimiento un tono amable. —Tu para mí ya eres el mejor regalo que se me pudo haber dado en esta vida, tu siempre te preocupas por mí, confías en mí, me proteges, luchas por mi, haces tantas cosas por mí haciéndome sentir tan especial, el como alguien como tú tuvo la paciencia de conocerme para entenderme y así amarme con todos mis colores grises y brillantes.

Sentía comos mis ojos comenzaron a producir lágrimas.

—Siempre entregas lo mejor de ti para todo, eso me hace admirarte cada día más... Contigo aquí se ablanda mi inexistente corazón— tomó mis manos para colocarlas en su pecho. —Tu mera existencia me hace sentirme completamente vivo— acercó su rostro al mío mirándome fijamente, yo seguía con mis manos en su pecho. —Contigo aquí puedo sentir la vida totalmente diferente— miró directo a mis labios y yo a los suyos, así nos unimos en un amoroso beso cerrando ambos nuestros ojos.

El beso se fue haciendo un poco más profundo sintiendo una de sus manos ir a tomar mi nuca mientras con la otra tomó mi cintura y por inercia colocarme en su regazo rodeando mis brazos por detrás de su cuello mientras sus manos acariciaban mi espalda. Nos separamos por un momento para tomar aire.

—Me haces sentir eso y mucho más— susurró en mi oído para luego besar mi cuello y abrazarme con fuerza.

Entre el silencio se escuchó como rugía mi interior por hambre, sentí morir de vergüenza, sentía desde las mejillas hasta las orejas un calor.

—Vamos a cenar, preparé platillos deliciosos para ambos— separó su cuerpo de mí limpiando el hilo de lágrimas que habían caído gracias a sus bellas palabras.

Parecía que había preparado un banquete ya que había variedad de platillos de un delicioso olor y sabor, colocamos algo de música en el televisor, eran unas lindas baladas que ambientaron nuestra cena en mi pequeño departamento, entre nuestra plática pregunté por mi querido Karakasa y por Saitama, resultaba que fueron a la casa de King a divertirse con un nuevo videojuego que había adquirido el héroe de clase S.

Al terminar de cenar me dediqué a ver lo que había dentro de esa caja, cabe mencionar que era un tanto grande, pues dentro había una mochila la cual ya había visto en una tienda y me había gustado, habían libros enciclopedia sobre cristales y minerales el cual dijo que al verlo le recordó a mi, en una caja más pequeña contenía en lindo collar con cuarzos los cuales dijo que eran restos de mis batallas y llegaba a verlos por las calles tomando suficientes para prepararlos y hacer el collar, finalmente en el fondo había un enorme sobre, era un cuadro, al abrirlo eran varios dibujos sobre mi colocados a modo de collage, eran dibujos que los había hecho en su libreta de apuntes desde que empezó a sospechar que se había enamorado de mi. Directamente fuí a colocarlo sobre uno de mis muebles recargando sobre la pared, después lo colocaría en mi pared.

Acabando de cenar, supuestamente nos preparamos para dormir, pero claramente yo no tenía sueño por haber dormido parte del día, la luz de la luna brillaba de forma hermosa entrando su iluminar por la puerta de cristal de la pequeña terraza. Las luces ya estaban apagadas.
Habíamos retomado aquel profundo beso de antes con la diferencia que nuestras prendas estaban en el piso.

Yo estaba en su regazo tomando parte del control de nuestro caluroso y apasionado encuentro yendo de manera lenta disfrutando cada caricia, convirtiéndonos en una sola alma, me sorprendía que la avanzada tecnología hacía posible nuestro encuentro. Era lindo escuchar su voz en estas circunstancias, solo quería estar tan cerca de él y jamás soltarlo.

—No sabes cuánto te amo— dijo con la respiración acelerada. —Haces que todo mi mundo se sienta mil veces mejor.

—Tu me complementas— lo besé. —Te amé, te amo y te amaré para siempre.

La noche se volvió larga y disfrutable hasta el cansar de los dos haciéndome caer rendida por el amor mutuo que nos demostramos.

Pasaron los días y se realizó la celebración por mi aceptación en aquella universidad donde asistieron varias personas importantes en mi vida, por mi parte recibí algunos regalos como material útil para facilitar mis anotaciones y el estudio, entre otras cosas, al final entre estudiantes nos regalamos cosas similares, comimos deliciosa comida, King hizo amistad con mi padre, incluso lo convenció en volverse su discípulo, Kohaku se alegro de tener un nuevo compañero. Le dimos consejos de vida estudiantil a Kohaku y a mi pequeña hermana ya que salió el tema.
Boros fue la sensación del evento, incluso se sintió doblemente observado por mi madre y hermana.

—Oye, le puedes decir a tu mami y a tu hermanita que ya no me miren, de tanto que me miran me va a hacer mal— susurró en mi oído.
Reí y fui a comentarles de manera gentil.

La fiesta duró hasta la noche, nos quedamos a dormir ya que era demasiado tarde, incluso contamos historias de terror, pero tuvimos que parar por nuestro bien dormir.

Aquí otro nuevo capítulo, y presente desde madrugado desde bien despierto jaja.

Me puse a releer un poco la historia y dios mío, he cambiado mucho desde mi parecer es como un viaje en el tiempo leer, obvio ya soy un adulto y si veo, literalmente, a mi yo del pasado y digo "madre mía", pero bueno.

Espero que esté cap haya sido de su agrado.
Ahora sí ya se acerca el final, pienso hacer como un apartado platicando el origen de esta historia.
¿Tienes alguna pregunta sobre esta historia? Dime y responderé.

Nos leemos después.
Salud y suerte ✨🍀