Capítulo 34

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___ Pov.

Las vacaciones se encontraban más cerca cada día, solo unos cuantos exámenes más y listo ya era libre, dormía más tarde por estar estudiando arduamente escuchando una canción que me encantara para memorizar mejor y mantenerme positiva mientras que escribo un acordeón de estudio anotando palabras clave, esa era la única manera en la que me gusta estudiar.
Era lunes, hoy presentaba un examen por lo que estaba nerviosa, una paleta de caramelo permanecía dentro de mi boca para calmar los nervios, respiraba hondo para tranquilizarme, de vez en cuando unas imágenes se proyectaban en mi mente de un lindo Genos sobre mí en una noche donde demostramos de otra manera lo cuanto que nos amamos, esos recuerdos me desconcentraban porque nunca me imaginé de esa manera con alguien y ya habían pasado dos días de ese encuentro.

Llegué a mi salón, sentándome en mi respectivo lugar sin antes saludar a Saori, mi mejor amiga que igual se encontraba nerviosa, antes de entrar a la escuela no vi a Metal Bat ya que había dicho que igual tenía que estudiar.
El maestro llegó y todo el alumnado, incluyéndome, dejamos de respirar.

—Sólo necesitan lápiz, sacapuntas, borrador y bolígrafo, guarden sus cosas donde hayan anotado cosas para copiar, igual el teléfono celular y todo reloj inteligente, gracias —dijo el maestro quien siempre venía vestido con traje, con decir que las maestras y alumnas lo persiguen es más que suficiente para darse una idea para imaginarlo.
Pasó a nuestros lugares para darnos nuestro examen y cambiar a unos cuantos de lugar que eran los más copiones de la clase.
—Pueden empezar —

Primero leí las preguntas y contesté las que me sabía a la perfección, después continué con las demás, pasó media hora, me puse de pié y entregué mi examen después de que unos cuantos igual se habían parado para entregar su hoja. El maestro nos dijo que era preferible salir del salón, tomé mi celular y mis auriculares antes de salir del salón.  Fui a dar un paseo al patio para tranquilizarme, vi a un chico que estaba sentado en una de las mesas junto a la cafetería, me le acerqué para saludarle, estaba muy concentrado leyendo un libro.

—Hola Kohaku, ¿qué tal estás? —me había sentado junto a él.

—Ah, hola shisho, gusto en verla, am pues estoy algo estresado ¿y usted? —contestó mirándome con una gran sonrisa.

—Igual, acabo de presentar un examen, y dime ¿ya no quisiste que te enseñara técnicas de energía y todo eso? —pregunté ya que le ofrecí darle clases pero nunca salimos para entrenar.

—Ah, es que le conté a mi maestro y rápidamente me dió clase del control y dominación de las energías, por eso ya no le llamé —dijo apenado.

—Bueno, por lo menos ya se propuso a darte una mejor clase... ¿puedo conocerlo? —cuestioné.

—¿A mi maestro? —se puso algo nervioso, lo pude notar por el tono de su voz, me pareció extraña su reacción.

—Si y ¿por qué te pones así? —fruncí el ceño confundida.

—Es que a mí maestro no le gustan las visitas, es que es algo difícil de tratar, no le gusta el ruido, le gusta la tranquilidad, pero es muy amigable y divertido a pesar de parecer tan serio, me recuerda a mi papá antes de irse de casa, comparándolos, ambos son raros —dijo riendo.

—Entiendo, entiendo, podrías preguntarle si puedo ir a conocerlo y me mandas un mensaje de su respuesta —dije como mejor opción.

—Claro, con gusto, creo que si llega a conocerlo pueden llevarse bien —dijo muy amable.

—Aw, genial —sonreí.

—Y dígame, ¿le gustaría salir después de clases a comer algo? Solo usted y yo ¿no hay problema? —dijo con una gran sonrisa y algo tembloroso.

—Claro que si, necesitamos relajarnos un rato —dije mientras me estiraba.

—Muy bien, oh tenga —me entregó una bolsita de galletas . —Mi mamá hizo por primera vez galletas y le quedaron muy ricas, las rellenó de mermelada de fresas y espolvoreo azúcar glass por encima —tomé con gusto la bolsita que tenía un moñito color rojo amarrado.

—Gracias Kohaku —miraba el detalle tan bonito.

—Planeaba darle esto al salir de clases y decirle la invitación a la comida —se veía y escuchaba tímido.

—Pues estás de suerte que llegué —revolví sus cabellos que luego volví a acomodar.— Bien, te dejo para que estudies —me puse de pie.

—Oh no... y si ¿me ayuda a repasar? —dijo dándome su libro.— Ahí están las preguntas a un lado del texto y lo subrayado es la respuesta. Volví a sentarme tomando el libro entre mis manos.

—¿Donde empiezo? —pregunté, al indicarme el inicio y fin de las preguntas comencé, duramos así 20 minutos hasta se escuchó el timbre de la siguiente clase.— Oh, bueno, espero haberte ayudado, nos vemos en la salida, y que te vaya bien en el examen —dije y me retiré.

Nos reencontramos en la salida de la escuela, avisé a Genos por mensaje para que él y Saitama no me esperaran a comer como ya era de costumbre desde que salgo con el bonito rubio.

—Hola, vamos —me saludó y fuimos en camino al restaurante de comida rápida que lleva el nombre de "MOB".
Durante el camino hablamos cosas de la escuela y nada más, hasta ahí teníamos cosas en común.

Cuando íbamos a entrar alguien abre la puerta que por desgracia al estar frente a la entrada me llevé un buen golpe en la nariz.

—¡Fíja —no pude terminar la frase pues quien estaba frente a mí era un chico de secundaria por su estatura, su cabello negro con el famoso corte "Bob" y con una cara de preocupación y que cerca de su hombro flotaba un fantasmita color verde con mejillas rojas.

—¿Esta bien señorita? —se acercó a mí para revisar el cómo estaba. Su voz suave y baja temblaba.

—¡Ah, no te preocupes! ¡Estoy bien! —retiré mi mano para sonreírle asegurándole que no me había pasado nada.

—¡Ah, su nariz está sangrando! —dijo el mismo de suave voz temblorosa. En eso me dió un pañuelo de papel que sacó de su mochila, limpié mi nariz y mi mano.

—Gracias, no te preocupes estaré bien, pasa — dije dándole paso al menor para que se retirara.

—Jajaja, bien hecho, Mob —decía el fantasmita quienes se escuchaban hablando un poco lejos de nosotros.

—Fue un accidente, Ekubo, me siento avergonzado, espero que se encuentre bien esa chica —decía.

—Pobre niño, lo preocupé —dije con una sonrisa tierna.

—Entremos —dijo Kohaku dándome el paso.

Entramos pedimos nuestra orden y mientras que esperábamos la llegada de nuestra comida decidí averiguar un poco más de su maestro.

—Y... ¿cómo se llama tu maestro? —pregunté.

—Él dice que no tiene nombre, que solo lo llame "maestro", es extraño y hablando de él, me dijo que igual quiere conocerla, después de comer podemos ir si gusta —asentí emocionada ante sus palabras. En eso llegó nuestro pedido.






Wenaaaaaaaas, ¡¡¡¡¡referencias de Mob Psyco 100!!!!!
Tengo pensado hacer un capítulo especial de navidad, yyyyyy así.
Creo que eso es todo.
Los jamo con musho quesito rashado yyyyy nos leemos después ❤️❤️❤️❤️❤️

ATRACTIVA | Genos x T/NDonde viven las historias. Descúbrelo ahora