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Amity.

—Salir con Willow y Gus no es una opción, ellos te están obligando a salir y yo estoy de acuerdo —mencioné terminando la llamada con Willow. Luz estaba aferrada a no quitarse el cinturón de seguridad.

—¿Qué pasa si él está por ahí? ¿Y si me ve? —tragó saliva cubriéndose el rostro con su gorro—. No, no, ya le arruinó el día a mi madre y no quiero que me lo arruine más a mí.

—Irán al cine a esos musicales que les gustan, pasarán a comer y luego irán de compras, dudo que tu padre esté en los mismos lugares que tú —intenté mencionar cosas positivas.

—No lo creo... Tengo una capacidad increíble para encontrarme a personas que no deseo. Como aquella vez que encontré a Odalia, quiso matarme en cuánto me vió.

—Ella no se acercará, el abogado fue claro —recalqué. Tuvimos la primera sesión con los abogados para establecer los acuerdos del divorcio y ahí mismo quedó escrito que Odalia no podría mantenerse cerca de cualquiera de nosotros a no ser que nosotros demos consentimiento—. ¿Sabes? Creo que eso mismo aplica para tu padre.

—¿A qué te refieres? —Luz giró su cabeza para verme.

—Eres mayor, si él intenta acercarse puedes no acceder a verlo. Incluso, no quiero sonar cruel, pero él no te hablará porque te verá con más personas, es tan cobarde que no dejará que otras personas lo escuchen —expliqué.

Luz se mantuvo pensativa. Desde hace un tiempo que el tema de su padre no afecta tanto hacia Luz, pero ahora tiene todo para que esto le cause conflicto, hormonas, embarazo y sobretodo porque su padre fue a molestar a Camila a la veterinaria.

Y en definitiva, a Luz no le cae nada bien que molesten a su madre. Y yo la defiendo y entiendo.

—¿Salir me ayudará a despejar la mente, no? —habló después de un rato— ¿Willow y Gus no dejarían que él me arruine una salida, verdad?

—¿Quién podría meterse con Willow? —la miré con diversión y tomé su mano—. Te hará bien.

—¿Y mamá? —cuestionó apretando mi mano.

—Bueno... Me quedaré con ella en casa si eso te mantiene tranquila. Necesita algo de compañía después del encuentro —sugerí. El rostro de Luz reflejó de inmediato una increíble calma, después de eso sonrió animada y se quitó de encima el cinturón de seguridad.

—Mamá ama ir de compras cuando está triste, siempre tengo un apartado cuando ella decae, puedes ocu-

—No es necesario, déjame pagar eso —intervine.

—No discutiré eso, si gustas usar algo de eso puedes ocuparlo. Lo tengo en una caja de galletas en el armario —asentí—. Le gusta ver series o alguna película que le divierta, solo no pongas Frontera Cósmica.

—Anotado —Luz se inclinó para besar mi mejilla—. Diviértete.

—Ustedes también. Gracias, Amity —sonrió antes de bajar del auto y adentrarse a la plaza del centro comercial.

Suspiré encendiendo el auto se nuevo y manejando ahora hacia la casa. Mi lado sobreprotector me gritaba desde mis adentros que no dejara ir a Luz, por un lado me preocupaba su padre y por otro era el embarazo.

Oh Amity Blight, ¿alguna vez te imaginaste estar en ésta situación? Sinceramente no.

Seguí manejando imaginando qué podría hacer yo para ayudar a Camila, claro, puedo hacer lo que Luz me comentó, pero muy probablemente Camila se aburra de eso o tal vez no le parezca. Me preocupo, ella se ha vuelto una persona bastante importante para mí, debo de al menos regresar algo por todo lo que me ha dado y ayudado.

Gotta Have You [G!P] |Lumity|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora