SEIS

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Como en los viejos tiempos, los chicos se habían quedado a dormir en casa de Mingi, hace años que no se quedaban todos juntos a dormir en una casa.

Sus vidas habían cambiado por completo y el tiempo que tenían en la universidad había desaparecido.

Pero se sintió tan bien volver a hacer cosas del pasado, como ir a bares, juntarse en casas y despertar juntos que de seguro intentarían hacerlo más seguido otra vez.

Seonghwa fue el primero en despertar, bajo somnoliento hasta la cocina y con una gran sonrisa recordó cuando Mingi tuvo que correr a decirle cómo ocupar la llave del agua, porque si no la arruinaba.

Ya conocía la cocina, así que empezó a prepararles el desayuno a todos, su instinto de mamá nunca se iría.

Y el padre minutos después bajó a la cocina a ayudar a Seonghwa a cocinar, como en los viejos tiempos.

— Pasan los años y seguiremos siendo el papá y la mamá.

Dijo riendo Hongjoong mientras buscaba los platos y tazas para dejarlos en la mesa, el mayor se rió con él mientras terminaba de cocinar.

— Aquí mismo fue la primera vez que cocinamos juntos como los padres que somos, no puedo creer como pasa el tiempo.

Ambos chicos se miraron y con una tierna sonrisa empezaron a hablar de la vida, siempre que podían hablaban, les gustaba compartir experiencias.

Mingi había bajado a la cocina por un vaso de agua, su cabeza lo estaba matando, cuando llegó y vió a los chicos, empezó a reír y molestarlos precisamente con el mismo tema.

— Tómate esto mejor mi amor, para el dolor de cabeza.

Hongjoong le entregó un vaso con agua y una pastilla, que el menor no dudó ni un segundo en tomar.

— Eres el mejor, mmmm que rico huele, extrañaba tu comida hyung.

Le dijo a Seonghwa acercándose a ver lo que era, omelet, su desayuno favorito, que el rubio lo hacía a la perfección.

De a poco fueron llegando los chicos a la mesa, Seonghwa dejó el desayuno en el centro para que los demás pudieran sacar lo que quisieran.

— Extrañaba estar en esta situación, todos juntos desayunando, me da nostalgia.

Yeosang sonreía mucho, estaba feliz al recordar todos sus momentos en la universidad, conocerlos fue una bendición en su vida.

— ¿Porqué estamos todos normales como si ayer no hubiéramos literal visto porno entre todos?.

Yunho estaba entre sorprendido y con ganas de un ataque de risa, recordar lo de ayer era bastante curioso.

— Por favor, nos han pasado tantas cosas que eso solo es una de tantas, a que en unos años más nos reiremos de lo que pasó.

Wooyoung había bajado y sentado en las piernas de San, que todavía no volvía a la tierra, tenía tanto sueño que su mente estaba durmiendo.

Los chicos desayunaron juntos, se reían volviendo a recordar anécdotas y se contaban situaciones que habían vivido por separados en el último tiempo.

« ✨ »

Seonghwa y Yeosang ya se habían ido de la casa, ya que tenían almuerzo familiar con la madre del menor.

Debían irse antes igual porque Yeosang necesitaba ropa nueva para ir donde su madre, amaba modelarle la ropa que le compraba su novio, y Seonghwa amaba ver cómo modelaba para ellos.

Aunque ese día Seonghwa no se sentía muy bien, después de tomar con un medicamento fuerte, estaba delicado del estómago y la cabeza.

Yeosang había dicho que le dirían a su madre que llevaba días así, porque ni locos le decían que se habían emborrachado como condenados la noche anterior.

— ¿Si estoy todo el día con lentes de sol negro sería muy obvio?.

— ¿Debo responder eso mi amor?.

Seonghwa rió resignado, se sacó los lentes y tragó saliva, el solo quería dormir y desaparecer hasta el día siguiente, pero su suegra iba primero.

« ✨ »

Los seis chicos se quedaron en casa de Mingi, no tenían más que hacer y decidieron almorzar juntos, la verdad, pedir pizza para todos.

— Te reto a que te gano en este juego.

— Ni te creas primo, he practicado mucho.

Jongho saltó al sillón y tomando uno de los controles, empezó a competir con San por quien ganaba.

— ¿Es que soy el único que siente tantos deja vu?.

Dijo Yunho mientras miraba desde lejos como esos dos jugaban, recordó la primera vez que conoció al menor.

— Claro que no amigo, recuerdo perfectamente tu dramatismo aquí mismo porque te habías besado toda la noche con Jongho y era menor de edad, casi y subes al segundo piso y te lanzas por la ventana.

Mingi era experto en burlarse de los demás, pero es que recordar eso sí era gracioso, tanto que sufrió por eso y vieran cómo están ahora.

— ¿Entonces recuerdas igual que le llorabas a Hongjoong porque te ignoraba épicamente?.

Jaque mate, Yunho ahora era el que se burlaba de su amigo, los dos lo habían pasado mal en esos días.

— Tanto sufrimiento amigos, recordar las cosas malas del pasado no hacen bien, yo no lo hago, porque si no, yo sí me lanzo de la ventana.

San había llegado y abrazado a sus dos amigos, él sí que tenía un pasado terrible, podía estar bien con Wooyoung ahora, pero él jamás se olvidaría como lo engañó tantas veces.

— ¿Y tú? ¿Tan rápido te ganó Jongho?.

Yunho se burló de San y luego fue a sentarse al sillón con su novio, que cantaba victorioso como le había ganado a su primo en minutos.

— Amoooooor... ven a darme amor, estoy sensible.

Wooyoung estaba sentado en la mesa todavía, así que San no dudó en correr donde él y abrazarlo fuerte, el rubio siempre era el más sensible al momento de estar todos juntos.

Amaba pasar tiempo en grupo, los ocho juntos, lloraba al recordar todo lo que pasaron, pero luego estaba feliz al saber que todo pasó por algo, para que estuvieran ahí ahora.

« ✨ »

Se venía el cumpleaños de Wooyoung y todos sabían que debían hacer algo especial para él, era el bebé consentido del grupo.

Aparte de que todos sabían era el más feliz de tener al grupo con él, llevaban días planificando qué hacer, debía salir todo perfecto.

— Siento que todo queda como poco si es para Wooyoung, él merece lo mejor del mundo, es tan tierno.

Seonghwa estaba en su computadora viendo opciones de lugares, a todos les faltaba algo importante para poder elegirlos.

— Yo siento que estamos preocupándonos demasiado, es Wooyoung, hasta con celebrar su cumpleaños en su casa, pero todos juntos, lloraría de felicidad.

Hongjoong estaba estresado ya de tanto que veían lugares pero ninguno les gustaba, a él le habían parecido todos buena idea.

— Claro que sé eso, pero mi novio necesita el mejor cumpleaños de la vida.

San miró feo a Hongjoong mientras seguía viendo opciones de viaje junto a Seonghwa, necesitaban encontrar el lugar perfecto.

Hasta que finalmente lo encontraron, se miraron felices y empezaron a aplaudir, dejando a todos los chicos curiosos.

𝐏𝐫𝐨𝐲𝐞𝐜𝐭𝐨: 𝐀𝐜𝐭𝐢𝐯𝐨𝐬 ⭑ 𝐀𝐭𝐞𝐞𝐳 [𝐏𝟐]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora