𝐏𝐫𝐨𝐲𝐞𝐜𝐭𝐨: 𝐀𝐜𝐭𝐢𝐯𝐨𝐬 ⭑ 𝐀𝐭𝐞𝐞𝐳 [𝐏𝟐]

VEINTE

Había llegado el día en donde tendrían la primera parada en tierra firme, una hermosa isla en medio del mar, conocida por su variada vegetación y por sus amistosos hogareños.

Pero ya eran las 10 am ninguno de los chicos se levantaban aún, siendo que en una hora más era la llegada estimada a la isla.

No había intención alguna de despertar en ninguno, había pasado media hora más y nada, así que como buen servicio, recibieron una llamada a la habitación.

Por mala suerte, Yeosang era el que estaba más cerca de la sala principal y el único que sintió la llamada, así que sin ganas se levantó a contestar.

— Buenas... si... si entiendo... ajá... si... ¿CÓMO? Oh muchas gracias, si, estaremos listos, gracias.

Yeosang corrió a despertar a su novio, para luego ir a despertar a los demás, les quedaban veinte minutos para bajar del crucero.

— Me duele todo, maldita sea, mi cabeza, mis brazos, mis rodillas, ¿Porque me duelen las rodillas?.

Mingi se quejaba mientras se tomaba un vaso de agua lleno, no recordaba nada del día anterior claramente.

— ¿Es enserio Song Mingi? Te caíste más de diez veces, chocabas con todo y más encima cuando te tuvimos que traer a penas con Seonghwa hyung, te tropezabas de un lado a otro.

Yeosang no podía creerlo, definitivamente había perdido la apuesta con su novio, Mingi ni si quiera recordaba y estaba lleno de moretones.

En cambio Wooyoung, ahí estaba sentado tranquilamente tomando agua, sin moretones y recordando todo.

— Parece que alguien perdió una apuesta, mi amor.

Le susurró con burla el mayor a Yeosang, éste negando con la cabeza fue a vestirse, les quedaban unos minutos para salir.

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Después de dos largos días en el crucero, finalmente tocaban tierra firme, Seonghwa y Jongho corrieron felices y como los dramáticos que eran, ya estaban de rodillas en el piso tocando la arena.

— Si quieren se quedan aquí y los venimos a buscar cuando termine el viaje.

Dijo Yunho burlándose de los dos, parecían dos niños pequeños que llevaban meses en el mar, adorables.

— No, mi amor tiene que ir a Disney conmigo, me prometió que iríamos al castillo de cenicienta.

Yeosang fue a abrazar a su novio y le dió un beso en la mejilla, pero se extrañó al ver a Seonghwa nervioso y con una sonrisa tierna.

Exactamente frente al castillo de cenicienta es donde le pediría a Yeosang que fuera su esposo, con solo imaginarlo se ponía demasiado nervioso.

— ¿Dije algo malo?.

— Para nada bebé, solo que estoy muy feliz de estar en este viaje contigo.

— Ya ya, mucho romanticismo, ¡Conozcamos la isla!.

Hongjoong se adelantó a los demás y empezó a visitar las tiendas de artesanía que habían cerca, siendo seguido por su novio.

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Wooyoung y San estaban sentados viendo un show en vivo a orillas del mar, mientras se tomaban unos mojitos, acompañados de unas ricas papas fritas.

— Sería mucho si digo otra vez... ¿Qué estoy muy feliz por este viaje?.

— Claro que no mi amor, puedes decirlo todas las veces que quieras, yo igual estoy feliz, feliz cumpleaños otra vez.