CUARENTA Y SIETE

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Yunho miraba a su pequeño dormir plácidamente en la cama, se reía tiernamente, iban a tener que dejar la lectura para mañana porque Jongho sí que estaba durmiendo.

Su culpa por tener que revisar unos papeles de la empresa que el gerente antiguo no lo había hecho, pero ya que, ahora tenían mucho tiempo para estar juntos.

El mayor lo movía de un lado a otro y nada, pero los ronquidos era lo que más demostraba que Jongho de verdad dormía.

— Mi pequeño hermoso, te amo mucho, que duermas bien mi bebé.

Le susurró para luego darle un suave beso en la frente, así que no le quedó más que ir al baño y arreglarse para dormir.

Total, ahora tendría a su novio todos los días con el, podrían tener más tiempo juntos y eso lo hacía muy feliz.

« ✨ »

Al día siguiente los dos pequeños estaban ansiosos de que les llegara algún correo avisando que pasaría con las clases.

Estaban los dos juntos en el departamento de Wooyoung atentos a sus celulares, mientras que sus novios conversaban de la vida.

— ¿Qué crees que les dirán?.

Preguntaba Yunho mientras se tomaba su taza de café diaria para poder sobrevivir el día a día.

— Estoy seguro que les darán clases online, o al menos trabajos en casa que deberán enviar online.

San trabajaba en su computador, no es como si ser dueño de varias empresas lo hiciera no hacer nada nunca.

Podría ser, si quisiera San podría no mover un dedo y todo saldría bien igual, pero le gustaba estar al tanto de todo lo que ocurría.

— LLEGÓ UN CORREOOOOO!!

Gritó escandalosamente Wooyoung al momento de saltar del sillón y abrirlo rápidamente, y ahí estaban los dos pequeños leyendo concentrados lo que decía.

— ESTÁ SEMANA NO TENDREMOS NADA!!

— DICE QUE TIENEN QUE ORGANIZARSE PARA EMPEZAR CLASES ONLINE!!.

Jongho y Wooyoung saltaban de felicidad mientras seguían leyendo el correo, mientras que los mayores se reían de lo tierno que se veían.

— Eso es perfecto... podríamos organizar alguna junta u otra actividad...

Yunho dejó su taza de lado y se levantó para ir a abrazar a su pequeño, al verlo tan feliz ya no se sentía tan mal por ser cómplice de lo que pasó.

— Ayer se instaló un parque de diversiones a unos minutos de aquí, lo vi ayer cuando volvía de la empresa... podríamos...

— SIIIII!

Gritaron los dos pequeños mientras saltaban abrazados y felices, que se haya quemado la universidad fue lo mejor que pasó, según ellos.

« ✨ »

Seonghwa se reía junto a su novio aún sin creer lo que había ocurrido con la universidad ayer, tomaban desayuno tranquilo, el mayor no iría a trabajar ese día.

— Esto es tan irreal, justo cuando llegábamos de vacaciones pasa esto...

— Eso mismo dije yo mi amor, por eso pensé que San tenía algo que ver... pero de verdad que estaba igual de sorprendido que yo!

— Oye mi pequeño hermoso, hoy solo debes preocuparte de arreglarte y verte tan hermoso como siempre, reservé una mesa en el restaurante que amas, tendremos una cita.

Yeosang lo miró sorprendido y dió saltitos de felicidad, amaba eso de Seonghwa, llevaban ya tres años juntos y seguía siendo exactamente igual que desde el inicio.

Se levantó de la mesa y fue a abrazarlo, dándole besitos en la mejilla, Seonghwa muy seguido lo invitaba a citas y le compraba sus flores favoritas.

— Mi amor, recuerda que mañana debemos ir a elegir la decoración de la boda, prometiste me acompañarías...

— Y claro que lo haré mi bebé... esto lo haremos juntos, es nuestra boda, tú planeas todo pero en lo que pueda te ayudaré.

Yeosang estaba realmente feliz, su vida era perfecta, se había ganado la lotería con Seonghwa, eran el uno para el otro, el miedo de alguna posible discusión por vivir juntos o no estar de acuerdo por algo, se esfumó hace mucho.

Seonghwa siempre le encontraba razón a su pequeño, nunca discutían, el mayor encontraba que cualquier decisión que tomara Yeosang era perfecta.

— Wooyoung me acaba de escribir que en toda la semana no tendrá clases, debe estar gritando y saltando de felicidad seguro...

Yeosang se reía mucho al leer todos los mensajes que le mandaba su mejor amigo, algo bueno que pasara después del incendio.

— Uhhh... eso significa que de seguro van a organizar algo para juntarnos, ojalá y no sea hoy...

Seonghwa sonreía tierno al saber, el igual estaba feliz de lo que pasaba, de verdad todos estaban cansados después de todas esas vacaciones que se dieron.

« ✨ »

Hongjoong estaba de muerte, sentía que se iba a desmayar en cualquier momento, cuando Mingi llegó a su casa después de la reunión en la empresa con su padre...

Jamás creyó que llegaría diciéndole que tendrían un almuerzo formal al día siguiente con su padre, para presentarlo como su novio.

— Ay mi bebé hermoso, debes relajarte! Si ya lo conoces, sabes que es todo un bromista, agradece que no es de esos empresarios fríos y malas personas...

Mingi tenía razón, el caso de su novio no era nada comparado con otros suegros empresarios, el papá de Mingi era el ser más amigable y gracioso del mundo.

— Lo sé mi amor, pero aún así estoy nervioso, esto es más formal, no es como esa vez en el auto... aunque de seguro volveré a ser el centro de bromas.

— Claro que si mi amor... AUch!! HAHAHAH

— Debes calmarme no ponerme más nervioso Song Mingi!!

Mingi empezó a reír fuerte mientras corría a tomar en brazos a su novio, dándole besos por todo el rostro.

— Hongjoong, mi amor, todo va a salir bien, mi padre te ama, dice que no puede creer que me sigas soportando... yo tampoco lo creo, te amo mucho!!

Hongjoong era ahora el que se reía, pero todo se iba a poner más serio cuando el mayor se enterara también cuál es el otro motivo del almuerzo.

— Te amo Song Mingi, tú hiciste que me volviera el ser más sensible y amoroso, nadie de la universidad creería que soy así contigo ahora...

— Es que yo suelo provocar esas... auch!! Ya no más golpes!! MÁS AMOR MENOS VIOLENCIA!!.

— Mejor bésame Mingi.

𝐏𝐫𝐨𝐲𝐞𝐜𝐭𝐨: 𝐀𝐜𝐭𝐢𝐯𝐨𝐬 ⭑ 𝐀𝐭𝐞𝐞𝐳 [𝐏𝟐]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora