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Habían sido muchas caras conocidas las que Julianna había visto en la carrera.

Su segundo lugar estaba bien.

Había luchado para tenerlo y no iba a desmeritarse ella misma.

Luego que Max y ella saltarán a la gran piscina que tenía el logo de Red Bull, tomarse varias fotos y celebrar su victoria. Julianna había reemplazado su ropa mojada por una seca y cómoda, estaba en busca de un helado de limón. Eso era lo último que necesitaba para cerrar bien su fin de semana.

Une glace au citron, s'il vous plaît.

La señora del pequeño lugar no tardo en recibir la orden y dársela a Julianna gustosamente. Luego de darle el dinero y las gracias, dejo que sus pies la guiarán a algún lado. La gente empezaba a felicitarla y pedir una foto, ella no dudaba en aceptar con una sonrisa.

—Felicidades, Ann.

Julianna empezó a maldecirse internamente por descuidarse.

Observo a su alrededor y el pasillo estaba lamentablemente vacío, no tenía a alguien para marcharse con excusa.

—Gracias —respondió secamente.

Charles había quedado en cuarto, su equipo había favorecido a Carlos Sainz al final.

—¿Podemos hablar ya? —Julianna bufo por la terquedad del monegasco—. Por favor.

El chico parecía no tener intenciones de moverse.

—Un minuto, Leclerc. Tómalo o déjalo.

Charles abrió los ojos de golpe pero acepto.

—Yo... se que fui un idiota.

—Uno grande —corrige Julianna, el monegasco asiente.

—Sí... un gran idiota, se que estuvo mal lo que hice, Ann —Julianna se mordió la lengua para no soltar un comentario—. Y por eso quiero perdirte perdón, no merecías eso. Tú siempre fuiste buena conmigo, incluso cuando estabas en problemas.

Julianna sólo lo escuchaba sin emitir algún sonido.

—Se que ya paso el tiempo necesario para que ambos supiéramos lo que deseamos. Y yo... yo te extraño Ann —balbuceo un poco Charles—. Entiendo que me odies, yo también lo haría. Pero quiero ser parte de nuevo de tu vida, apoyarte, escucharte, si me dejas...

—¿Por qué? —cruzo los brazos Julianna.

—Porque te quiero Ann, quiero volver contigo.

Era un chiste ¿no?

—Claro, como amigos —dijo con burla Julianna, pero Charles nego con la cabeza—. No.

—¿No qué?

—No quiero nada que se romántico contigo —Charles intenta interrumpirla—. Tienes novia Charles, una que parece que te quiere.

—Yo te quiero a tí...

¿Ahora quería volver cuando ella ya no quería nada?

—Qué lástima, yo quería ganar hoy y no pude. No todo se puede en la vida —sisea Julianna.

—Charlotte no me hace sentir como tú lo hacías, con una simple sonrisa o una risa. Tienes algo que me sigue atando a tí, Ann —dice suavemente Charles—. Dame una oportunidad más.

Julianna esperaba que la señora Leclerc no estuviera involucrado en todo eso.

—Yo estoy mejor sin tí, Charles —niega Julianna—. Y es una lástima que Charlotte este con alguien que parece solo usarla.

Electric Touch ──𝗧𝗼𝘁𝗼 𝗪𝗼𝗹𝗳𝗳 ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora