ꜱᴛᴀʀ ᴄᴏʟʟɪꜱɪᴏɴ | ❝ El príncipe y la sacerdotisa. La mascota y el trofeo. Qué conmovedor ❞
Ambos eran completamente diferentes, y a su vez eran iguales. Habían perdido sus mundos a manos del mismo monstruo, obligados a vivir una vida de esclavitud y...
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Reya jamás pudo prever lo que vino a continuación.
Observó como un rayo de energía salía disparado en su dirección, y sin contarlo, Trunks se interpuso delante de ella, recibiendo brutalmente el rayo. No fue capaz de moverse. No fue capaz de hacer nada. Su mente desconectó de su cuerpo y la dejó totalmente en blanco.
Y cuando vio la sangre salir a borbotones de su cuerpo, se dio cuenta de lo que había sucedido.
El alma huyó cruelmente de su cuerpo, al mismo tiempo que la sangre se helaba en sus venas. El vacío que sintió fue improcedente.
Un desgarrador grito brotó de su garganta, y se apresuró a sujetar el cuerpo de Trunks antes de que colapsara contra el suelo. Cayó de rodillas y acunó a su hijo terrícola con pura desesperación, contemplando con horror el hueco sangrante de su pecho, justo en el corazón. Una ola de pánico se apoderó de ella al verlo desangrándose a una velocidad desmesurada. Su mirada estaba vacía, carente de vida.
El miedo que la azotó fue descomunal.
Y los gritos no tardaron en invadir el lugar.
━¡TRUNKS!
━No, no, no, no, no ━Reya lo zarandeó con suavidad, sin obtener ningún resultado━. ¡Trunks, mírame! ¡Trunks! ¡Trunks! ¡TRUNKS!
Cuando no vio ninguna reacción por parte de él, el mundo se le vino encima.
Sus ojos se llenaron de lágrimas de agonía, y sintió que respirar se le hacía una tarea titánica. En shock, abrazó el cuerpo de Trunks y enterró el rostro en su hombro, con una conmoción y consternación que la destrozaron por dentro. Lloró desconsoladamente, incapaz de aceptar lo ocurrido, de aceptar su muerte.
¿En que momento ocurrió esto? ¿Por qué no logró prevenir el rayo? Jamás había sentido semejante dolor, tan punzante y ardiente, que la quemaron por dentro. Fue como volver a morir en Namek, sólo que esta vez era plenamente consciente.
¿Por qué Trunks se interpuso en medio?
¿Por qué dio su vida por ella?
¿Por qué tuvo que perder a su hijo terrícola?
¿Por qué nuevamente tuvo que ser testigo de la muerte de otro ser querido?
Sus sollozos no hicieron más que aumentar, y todo su cuerpo tembló frenéticamente. Empezó a repetir el nombre de Trunks hasta que pareció entonar una triste canción, tan horrible, que hasta los guerreros sintieron su dolor en carne propia.
