El mago y el vampiro ( traducción )

Capítulo 32: Ser invitado

No había castillos góticos, ni pasillos sombríos... La villa en el terreno abierto era bastante luminosa y espaciosa, con casi la mitad de sus paredes hechas de vidrio transparente, muy parecida a una villa ordinaria de vacaciones en el bosque.

Harry dejó escapar un suspiro de alivio porque no era muy diferente de donde vivían los demás. Pero al mismo tiempo se sintió un poco decepcionado; Siempre pensó que los lugares donde vivían los vampiros deberían ser diferentes.

Al entrar, incluso notó cruces decorando las paredes de la sala de estar.

A los vampiros que habían abandonado a Dios les gustaba celebrar la Navidad y vivían en un entorno tan luminoso...

En ese momento, se sintió muy sutil.

Pero cuando vio a toda la familia Cullen aparecer en la sala para saludarlo, el estado de ánimo relajado de Harry de repente se volvió tenso.

Emmett, que llegó a casa antes que ellos; Alicia de pelo negro; Jasper, el rubio; e incluso Rosalie, a quien normalmente no le agradaba, asintió levemente hacia él.

Los padres de Edward se mantuvieron unidos. Carlisle, quien lo abrazó incluso antes de que entrara a la casa, y Esme, a quien nunca había conocido antes.

El cabello largo y ondulado color café, el rostro pálido y hermoso y la suave sonrisa maternal hicieron que Harry instantáneamente se encariñara con esta dama vampiro.

Sabía que ella era la madre de Edward y la "persona" de mayor edad entre ellos en términos de edad física.

"Encantado de conocerte, Harry", sonó la suave voz de Esme.

La sonrisa de Esme hizo que Harry se relajara. "Encantado de conocerla también, Sra. Cullen." No estaba nervioso porque estaba en la guarida del vampiro, sino porque hoy necesitaba conocer formalmente a los padres y la familia de Edward. Esperaba que les agradara y a él también le agradaban.

No está tan mal, pensó el chico de ojos verdes.

"Llámame Esme, Harry. ¡Feliz Navidad! Bienvenido. Quizás nuestra familia ha estado esperando este día durante cien años", dijo con amor, mirando a Edward.

Harry entendió lo que quería decir, que él era la primera persona que Edward había traído a casa desde que se convirtió en vampiro.

Miró discretamente a Edward, quien también lo miraba, incluso sonriendo con una sensación de alivio.

¿Le preocupa que su familia también me acepte?

El rostro de Harry se sonrojó, miró hacia otro lado y se aclaró la garganta. "¡Feliz Navidad! Creo que me gusta aquí".

"Me alegra escuchar eso, Harry. Creo que un humano parado solo entre un grupo de vampiros debe dar miedo, pero tú no tienes miedo. ¿Lo eres, joven mago?" La voz de Alice era suave y melodiosa, con su característico entusiasmo.

"Sí. Pero incluso si no fuera un mago, no te tendría miedo", dijo Harry con sinceridad. Encontró a los vampiros de la familia Cullen bastante amigables, aunque a veces parecían un poco...

Su mirada recorrió a la inexpresiva Rosalie Hale y al silencioso Jasper Hale.

Los fríos ojos de Rosalie lo hicieron sentir incómodo, pero el chico de Gryffindor rápidamente descartó ese sentimiento.

Y el vampiro alto y rubio al lado de Alice lo miró con una mirada inquisitiva. Harry sabía que Jasper podría ser el más interesado en su identidad y magia de mago. Pero Jasper no parecía tener la intención de preguntar ahora; él simplemente le dedicó una rara sonrisa.