24-Situaciones

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Narradora

De alguna manera luego de lo sucedido Lucifer intentaba acercarse a Alastor, al principio fueron pequeños detalles con cartas de disculpa acompañadas de una rosa y un poema.
Alastor solo bajaba las orejas por cada presente que encontraba en su puerta al despertar, el problema era que peleaba con su instinto por darle su perdón - nos va a volver a dañar- le dijo, su sombra solo le hizo un puchero - nos vamos a ilusionar, vamos a terminar como Stolas- la sombra se mostró ofendida ante lo dicho, se cruzo de brazos y desapareció. Al parecer el ciervo no tendría sombra por una semana, poso su mirada en aquel presente, agarro la rosa y lo puso en el florero con las demás, miró la carta para leer su escrito, lo leyó y solo sonrió por lo escrito.

Enserió me arrepiento
El daño, las lágrimas, los gritos...
Tu no mereces eso
Querido se que es muy tarde para remediar y retractar mis palabras, pero puedo intentar buscar tu perdón y luego tu amor.
Solo espera yo me encargaré de remediar todo, quiero que seas feliz, lo sé
Soy un tarado pero porfavor quiero que algún día si es que me lo permites... Dame el honor de ver aquella sonrisa tan hermosa y verdadera que tus labios pueden formar.

-Todavía pides disculpas... Ja, haber si no te cansas de jugar de nuevo ‐el locutor sonreía con tristeza; su cabeza no podía olvidar cada cosa que aconteció al presente- En sí yo también tengo la culpa querido, me permito sentir de nuevo cuando bien se que lo tengo prohibido -dijo para cerrar la carta y salir de sus aposentos-.

Por otra parte estaban un felino y una pequeña con cuchillo y tenedor gritando ¡comida, comida! Era de mañana, los contrarios tenían hambre y no se disponían a ocultarlo. El venado rodó los ojos y empezó a cocinar, si cachorra bajo de su asiento, de paso movió un poco la silla de su tío para que se asustara. Se debía decir, el felino casi se cae y tuvo que gruñirle como respuesta.

-A que gatito ya se le fueron las agallas -hablo Alastor para lanzarle un poco de agua, su amigo solo lo miro con enojo pata reír nuevamente, al parecer siempre los acompañaba una canción nueva- Se que quieres que me valla mal pero no lo vas a lograr querido.

-Quien dijo que ese era mi deseo -se levantó de su asiento para ayudar en la cocina, al parecer le agradaba ayudar y más si podían cantar al hacerlo, el demonio de orejas de ciervo siempre le gustaba tararear las melodías que salían de la Radio mientras su compañero cantaba- Deja que te ayude, voy haciendo la mezcla de las tortillas.

-Como gustes, Niffty deja de esperar a Lucifer con un cuchillo -hablo el cervatillo mirando a su cachorra que tenía una daga entres sus mano y mostraba su sonrisa de siempre. Ya era normal que la menor se escondiera detrás de la puerta para que cuando llegara el de altura "común" saltará sobre el y lo atacará- No es de una dimita hacer ese tipo de cosas bonita.

La pequeña solo agacho su cabeza y puso ojos de cachorros.

-Nos es de damitas hacer ese tipo de cosas por la mañana espera cuando se haga de noche -la pequeña lo abrazo y dejo su arma a un lado para ayudar tambien-

La princesa estaba bajando de la escaleras con su novia, al parecer algo había sucedido la noche pasada. Angel solo las miro con su sonrisa pícara para mirar a otro lado cuando Vaggie lo fulmino con la mirada para luego acomodarse en el cuello de su alfa.

Alastor al ver a Charlie solo le dio pequeñas palmadas en la cabeza y le dio una sonrisa un poco gustosa cuando vio las marcas que la alfa tenia en el cuello, está al darse cuenta solo pudo sonrojarse. Los demás rieron ya que habían acertado, se acomodaron y empezaron a servir el desayuno para comer.

Cada volvió a sus asuntos solo que Charlie de vez en cuando buscaba a su pareja para saber si esta bien, cabe aclarar que la cintraria debes en cuandk se sobaba la cadera y dacaba leves quejidos de dolor. Gracias a ello Anthony les dijo una afirmación de lo que pudo suceder para que este así recibiendo un zapato en la cabeza que fue lanzado por Vaggie, el omega araña corrió con los ojos llorosos para quedarse con si alfa, el cual rodó los ojos y abrió sus brazos para que el omega se escondiera y recibiera mimos.

El locutor y su cachorra solo se reían de la situación para luego irse y caminar por los pasillo, de todas maneras el hotel era muy grande y a veces algunas habitaciones se quedaban sin limpiar o la menor se perdía y todo el hotel se ponía patas arriba para encontrarla.

-Papá ¿vas a perdonar a Lucifer? -la pequeña lo miro, el sirvió mostró ligera sorpresa-

-¿Quieres que lo perdone? -miro a si cachorra para luego cargarla y ponerla en su regazo-

-En realidad no, te hizo daño, no quiero que suceda de nuevo lo que te paso en vida y muy a parte es un imbecil de mierda -el ciervo solo la miro y rió-

Siguieron por lo pasillos hasta llegar a la torre del gobernante del infierno, el mismo ya no se quedaba muy seguido. Niffth entró para ver como estaba y casi le da un ataque al corazón  por lo que vio. Alastor solo pudo irse a otra parte del cuarto.

—Esto est peor que la apariencia de Husk luego de la borrachera -su mano estaba en su frente en simulación de que se va a desmayar. Por otra parte recibieron un ¡¿qué dijiste?! De parte dem felino, los demonios se miraron-

La ciclope agarro escoba, trapeador y recogedor y en poco tiempo todo estaba como nuevo y no como una pocilga según ella.

—Mucho mejor, ya nos podemos ir pa- -el ciervo estaba dormido en la silla que el monarca utilizaba para su papeleo. La menor agarro la chaqueta que estaba en el perchero y lo arropó con eso- Lo despertaré luego.. Descansa papá.

Un Amor Confuso Y DolorosoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora