xoxo, mar| Enzo Vogrincic

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Enzo'pov
¡Capitulos finales!

7 meses, 7 meses sin poder besarla, sin poder oír su voz que no sean grabaciones, sin poder ver aquella sonrisa que tanto amaba. Y sin ver esos ojos que tanto me encataban.

Estaba destrozado, mi vida había perdido el sentido total, cada día me sentía más culpable y lloraba sin parar.

Comencé ir a terapia pero nada me ayudaba.

Lo único que necesitaba era ver qué ella despertara, y mi mayor miedo es que ya no lo vuelva a hacer.

Los médicos dieron algunas señales de que ella pudiera despertar, pero yo no confío mucho en esas cosas.

Estaba yendo para un café, me reuniría con Blas, el se había vuelto mi fuente de apoyo durante todos estos meses.

-Que onda.- Salude sin ánimos y estrechamos las manos.

Nos sentamos, pedimos y comenzamos a hablar.

-¿Por qué no la fuiste a ver últimamente? Sabes que sos muy importante para ella, seguro quisiera que fueras todos los días.- Pregunté a Blas, bueno el tenía una vida lo entiendo, pero me molestaba que no fuera todos los días. Algo en mi me dice que ella me puede escuchar, a todos, y si vamos a apoyarla siempre de alguna manera tomaría fuerzas para poder salir de aquel maldito coma.

-Estuve ocupado simplemente, mañana voy a ir lo prometo.- Bajo su mirada al piso y no dijo más nada.

Yo solo formulé un "ok".

Estuvimos charlando sobre algunas cosas más, sobre que el vio cambios en mi, en el buen sentido. Y también que muestras vidas en general habían tomado un rumbo diferente. Ya nada se sentía igual, nada.

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Estaba mirando gossip girl, cuando la mamá de Martina me llamó. Instantáneamente agarre el celular y la entendí. Tenía miedo de lo que me pudiera llegar a decir

-Martina ya despertó Enzo! Vení al hospital en cuanto puedas que acá te vamos a estar esperando!- Se notaba que desde el otro lado estaba llorando de la felicidad.

Sentí como el alma me volvía al cuerpo. Una tranquilidad intensa me embriago complemente.

Me puse lo más presentable posible, arregle mi cabello, todo listo y fui en dirección al hospital. No sin antes pasar por una florería y comprar girasoles, sus segundas flores favoritas, no tenía tiempo para buscar peonias ahora.

30 minutos después ya estaba a unos cuantos metros de la habitación de Martí, me latía rápido el corazón y estaba súper nervioso.
Sentía como si fuera nuestra primera cita o algo por el estilo.

-Enzo.. Les dejamos su espacio para que puedan charlar tranquilos.- Me habla con una sonrisa la madre de Martí y me deja un beso en la mejilla.

Yo sonreí ante está acción.

Me pare enfrente de la puerta de ella, suspiré profundamente, y finalmente entre.

Rompí en llanto al verla despierta, con una pequeña sonrisa en su cara, pero al mismo tiempo se notaba que estaba algo confundida.

Corrí a dónde estaba y la abracé con cuidado, todavía tenía varios cables enganchados a ella.

-¡Estás bien! ¡Despertaste amorcito!
Dios te amo, te amo, te amo!- Llene su cara de besos y ella soltó una risa.

Si! Dios cuánto extrañaba esa hermosa risa.

-Hola Enzo.- Hablo por lo bajito y yo me derreti completamente ahí nomas.- Yo también te amo.

Respondido avergonzada y sus mejillas se ruborizaron.

Era la primera vez que ella me decía algo así, y si, volví a llorar. Me volví un océano estos últimos meses.- Tenía muchísimo miedo de que ya jamás pudiera volver a verte Mar..

Su mirada se poso sobre la mía, note tristeza en ella- Pocas personas están en coma tanto tiempo dijieron mis papás, me siento especial la verdad haha.
Quiero que sepas algo, vos no tenes la culpa de nada ¿Si? Fue algo que puede pasar normalmente.

La interrumpí, no quería que se echara la culpa a ella o a los accidentes, cuando claramente había sido mi culpa.

-Fue mi culpa, por mi te paso eso Martí. Digas lo que digas yo siempre lo voy a ver así

Le di un beso corto en sus labios y puse las flores sobre ella- No me dio tiempo a comprar las peonias.

Ella me dió una sonrisa y acarició mi mejilla con ternura.

Blas entro por la puerta, ok, es la primera vez que me molesta ver a Blas. No quería que nadie nos interrumpíera ahora, tenía muchas cosas para contarle.

Me levanté y me fui dejándolos solos.

Me sentía realmente tranquilo en estos momentos, sin embargo me gustaría estar con ella ahora, también me da un poco de miedo saber que es lo que va a pasar entre nosotros 2 ahora. Al parecer ella no está enojada conmigo, pero ¿Si cuando la vuelvo a ver es como antes de todo esto?

Muchísimas preguntas se formularon en mi cabeza pero ninguna tenía respuesta.

Lo único que quiero ahora es estar con ella en todo momento, cuidarla y protegerla de cualquier cosa que le pueda llegar a pasar, pedirle que sea mi novia y simplemente hacerla feliz después de haber cometido tantos errores, tantos que casi muere por mi culpa y es algo que jamás me voy a perdonar a mi mismo.

¿Y si lo mejor es alejarme de ella?

Desde que llegué a su vida siempre por alguna estupidez mía la hacia llorar o pasar por una situación fea.

¿Ella sería feliz con alguien más? Seguramente.

Todas estas preguntas Martina las respondería, pero no ahora, sino cuando ella se encuentre realmente bien. No quiero sofocarla la verdad.

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xoxo,mar