25. La boda real (y su consumación)

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Aclaraciones: La furia luminosa de esta historia no es tan indomable como en la película 3, debido a que en esta es menos agresiva, si bien nadie logra montarla, sí es domesticada de cierta forma.

Ella no tiene una participación relevante en este capítulo pero sí más adelante, para que lo tengamos en cuenta.

HAY CONTENIDO HOTCAKE, o ligero LIME jijii... para quienes querían ver acción en ellos.

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Capítulo 25: La consumación
"Una promesa es una promesa si es hecha en sangre.
Porque: el amor nunca muere, lo que está dentro es más importante que lo que está fuera,
lo mejor no siempre es lo más obvio
y una vez que has amado verdaderamente,
Thor, entonces conoces el camino.

Como luchar contra la furia de un dragón- Cressida Cowell

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Después de que Hiccup y Astrid regresaron a Berk, las cosas no fueron las mismas en lo absoluto en toda la isla.

La Furia Luminosa se integró a la vida de la isla de manera abrupta y salvaje. Al principio le tenía mucho recelo los humanos, pero Toothless poco a poco fue mostrándole el mundo desconocido hasta entonces para ella.

En cuanto al compromiso de los jefes, una fiesta de celebración ya tenía días preparándose desde antes que ellos se fueran, y en cuanto llegaron del fiordo, se celebró.

A penas y les dieron oportunidad de cambiarse por unas prendas más formales y tradicionales para comunicar el compromiso al pueblo. No tuvieron oportunidad de verse entre ellos dos a solas, no disfrutaron de su compromiso en privado, y cuando intentaron escaparse al claro de agua que estaba en el ahora reciente nuevo santuario de drsgones, el consejo de Berk y Bog Burglar los interceptaron.
Los miembros del consejo les hicieron saber a los respectivos jefes del arreglo nupcial que había entre ellos. En la sala del trono hubonun silencio.
Tanto Hiccup como Astrid recordaban que los iban a comprometer, pero
desconocían por completo que se llegó a formalizar.
-Así es, jefes. La unión Berk Burglar fue una realidad por sus padres. -musitó Gobber con respeto.
-Bertha, Erick, Stoick y yo firmamos esos documentos una tarde antes de que tu padre muriera, hijo. -coincidió Valka.

Los muchachos leyeron el tratado, logrando identificar el propósito de sus progenitores.

-Por lo que ustedes han manifestado acerca de su compromiso, supongo que desean permanecer con este acuerdo, ¿no?

Fue un momento de conmoción para ambos ver las firmas de sus padres solicitando la unión de los dos reinos con su bendición.

Por respeto a ellos, acordaron seguir con el compromiso, aunque agregando y quitando algunas cláusulas, beneficiando a ambas partes de la alianza.
-Sí, el tratado continúa.
Gylda dio saltitos de emoción. El consejo también aplaudió fuerte la moción de su jefe y la presencia de la jefa Burglar, ya que todos les tenían mucho cariño y lealtad.
Pasados los pormenores del tratado, pasaron al siguiente tema: la fecha.

-Berk ni Bog Burglar están preparados para una boda inmensa, lo ideal sería hacer algo sencillo. –alegó Astrid, no deseando verse abrumada por tanta pompa y fiesta

-¡Tonterías! No todos los días se casan dos reyes. –alegó Gylda, con media boda planeada. -No van a arruinar mis planes.
Claro que no fue la única que dio su opinión. Si bien Hiccuo no había tenido una fiesta de coronación, al menos querían una boda para celebrar.

Sin embargo, la austeridad debía estar presente, por lo que hicieron arreglos y en lugar de festejar en el Gran Salón decidieron hacerlo en la misma naturaleza para que el pueblo entero estuviera presente.

El jefe vikingoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora