Lienzo

ONCE

Camila Barceló

Por alguna razón quede en shock con lo que me acaba de decir Gus, ni siquiera sabía que le podía contestar, solo podía verlo, ver como lloraba por lo que acaba de decir, siempre he sido egoísta, nunca he pensado en cómo se siente él, solo pensaba que no podía estar lejos de mi porque yo lo necesito, porque no puedo estar sin él, pero no me di cuenta del daño que todo esto le había causado, agache la cabeza sin poder decir nada, quería llorar, tengo un nudo enorme en la garganta, voy a llorar.

- No te preocupes, sabía lo que implicaba, o eso pensaba - dijo poniendo una mano en mi cabeza con mucha delicadeza - en un mes me iré a Francia, espero verte por lo menos una vez ante de eso, te amo galletita, se muy feliz, solo eso te pido.

Dicho eso depositó un beso en mi cabeza, uno tan dulce, que a pesar que tuvo sus labios en mi cabeza por mucho tiempo yo no quería que él se alejara de mi, pero se alejó y solo escuche sus pasos, me dejó ahí, no pude decirle nada, realmente no debo de decirle nada, ¿con que derecho?

La realidad me empezaba a pegar, esto no lo esperaba, no quería, pero no podía hacer mucho, frente al dibujo que había hecho de su mirada hermosa me desplome, no habían siquiera sollozos, las lágrimas solo caían sin ser consciente de ello, el dolor que emanaba de mi interior era simplemente indescriptible, no tenía fuerzas, en absoluto podía emitir siquiera sonido alguno, tantas cosas pasaban por mi mente que me era difícil comprenderlas porque razón estaba teniendo tantas imágenes desvanecerse frente a mi, cosas que daba por hecho ya no están, simplemente todo se me escapó entre los dedos, era como querer retener agua con ellos, esta bomba que simplemente deje que explora en mi cara, porque claro que sabía que esto pasaría de alguna u otra manera, ¿Qué puedo hacer? ¿Retenerlo? no tengo la moral suficiente como para hacerlo, poco a poco sentí como simplemente mis fuerzas se fueron perdiendo y mis párpados empezaron a caer para poder entrar en un profundo sueño que por unas horas me alejarán del dolor y la realidad que tendría que afrontar después de todo esto. 
 
       
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Randall Richter

Camino a casa cada quien estaba sumido en sus pensamientos, por más vuelta que le diese a mi mente no encontraba nada para poder dar inicio a la investigación, definitivamente ellas escapaban de algo, pero de que, como investigar si ni siquiera sabíamos por  dónde empezar a levantar piedras, sus nombres sólo figuran de trece años atrás, esa mujer trabaja muy bien, al cabo de unos minutos ya nos encontrábamos en casa, al entrar nos topamos con papá y Rolf tomando whisky.

- ¿Cómo les fue con Cami? - preguntó Rolf - he de advertirles que si esperan que ella sea su nuevo pasatiempo piénsenlo mejor, ella no es para que jueguen al tonto y al retonto - dijo mordaz.

- Pero mira nada más, tal parece que a nuestro hermano le gusta Cami, ¿Qué piensas Randy? - espetó Kurt de manera socarrona.

- No seas tonto Kurt, solo les advierto que con ella no pueden tener los juegos de los que esta acostumbrado - le advirtió con una molestia notable.

- Basta chicos, no es para que peleen, ustedes dos ¿lograron sacarle información a Cami? - lo interrumpió papá.

- No papá, no tenemos más que la tonta historia de ella con el tal Gustavo - bufé con ironía.

- ¿De qué hablan? - preguntó Rolf con molestia.

- Queremos saber todo sobre las chicas Barceló pero solo tenemos información de ellas de hace trece años y nada más, es como si antes de eso no hubiesen existido y que aparecieron de la nada en la faz de la tierra - le contestó papá.

- No, a ellas no las investigarán, lo siento papá pero tendrás que confiar en mí esta vez, ustedes no necesitan saber nada más de lo que ya saben de ella.

- ¿Cómo esperas que no investiguemos con quien trabajamos? Esto es absurdo Rolf.

- Papá, perdón pero a ellas no las puedes investigar así tenga que matar a quien tenga que matar no las investigaras, no sabes lo arriesgado que es eso.

- ¿Y tu como mierdas lo sabes? - espete con fastidio

- Porque llevo dos años conociendo a Isabella, al inicio la investigue todo de ella, lo logré, se todo de ella y de quienes la rodean, pero eso iba a tener un costo, tuve que trabajar el quíntuple para tapar toda la mierda que había desatado en ese momento, estuve medio año, ¡¡MEDIO AÑO!! - gritó lo último con exasperación.

- Primero que nada ¿Qué razones tienes tú para contactarte con ella hace dos años? - preguntó Kurt.

- Les recuerdo que hace dos años ustedes empezaron a negociar con los carteles acá, yo necesitaba estar preparado para cualquier cosa que pasase, siempre lo hago porque claro, al parecer soy el único con cerebro en la familia, ahí es donde conocí a Isabella, a pesar de todo nos hicimos amigos.

- Ahora entiendo porque no se inmuto al saber todo de nuestro caso, ella llevaba dos años esperando el momento - razonó papá.

- Si, si, muy inteligente y todo, pero está bien, investigaste su vida, entonces si sabes algo porque no nos has dicho nada de ellas - le pregunté.

- Porque no necesitan saber nada más de ellas, no necesitan alborotar la mierda, no son conscientes de cómo sus malditas acciones les puede afectar a las personas, pero mientras ellas me tengan de su lado ustedes no harán nada en contra de ellas y mucho menos investigar su vida, no es necesario.

- ¿Las proteges? - le preguntó papá haciendo una mueca de confusión completa en su rostro - ¿En verdad es tan malo?

- Papá por favor no me hagas repetirlo, no es necesario que las investiguen, yo ya lo hice, se todo de ellas, eso les debe de bastar y si papá, las protegeré inclusive de ustedes - le contestó levantándose del sofá y yéndose a su habitación he de suponer.

Un frío recorrió toda mi espina dorsal por la furia y frustración que sentía en este momento, claro que no dejaría esto así, investigaremos a cualquier costo, solo le hice una seña a Kurt con la mirada, era simple comprendernos así los cuatro, pero procure que papá no se diera cuenta.

- Bueno ya escucharon a su hermano, no sean imprudentes, no actuemos en falso a lo desconocido - dijo papá y de la misma manera que Rolf se paró y se retiró.

Nos quedamos en un perfecto silencio con Kurt.

- Debemos investigar, no me quedaré con lo brazos cruzados solo porque lo dice el idiota de Rolf - espetó Kurt.

- ¿Desconfías de Rolf? - pregunté con incredulidad.

- No es que me encante desconfiar de él, pero... ¿no se te hace un tanto extraño? ¿Por qué nos ocultaría algo así?

- No creo que sea capaz de traicionarnos - traté de que lo pensara un poco.

- Solo piensa un poco, dice que tiene dos años viendo esto, él perfectamente se pudo confabular con los carteles, armar todo con esa mujer y a la primera de cambio nuestro imperio cae ante nuestros ojos.

- No seas absurdo Kurt, no puedo creer que desconfíes de él.

- Hermanito, hermanito, lección número uno, jamás confíes en nadie cuando de la organización se trata, desconfía hasta de tu sombra porque sigue tus pasos.

Realmente trataba de ser racional, pero todo era demasiado extraño Rolf nunca se había comportado de esa manera con nadie y mucho menos nos ocultaba cosas, pero de algo estábamos seguros, debíamos investigar que nos ocultaba.

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Capitulo editado

NO OLVIDEN DEJAR SU ESTRELLITA, LES MANDO UN PEDAZO DE QUESITO DESDE ALGUN LUGAR DEL PLANETA, BESITOS.