Capítulo 44.

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El pequeños Park Jimin que vivía una vida calmada en el Campo, en la ciudad del Oriente recordaba bien las carencias por las que siempre paso sus padres. Era en la pequeña granja Park que fue enseñado a ser amigables con los animales, en el arduo trabajo después de sus horas de estudios.

En cómo sus padres luchaban por darle una buena educación, en como incluso las carencias no eran razón para sentir ese ambiente familias, entre su amado padre y madre, Jimin aprendía ser educado, honrado e incluso amable.

Si tan solo sus padres supieran en donde estaba parado ahora, en uno de los mejores hoteles de la ciudad de Dante, donde se ha convertido la persona que todo el mundo hospeda, luciendo ropas finas remplazando a las de sus incorregibles trabajos o las que correspondían en el campo, viviendo en un hermoso departamento, servido por varios sirvientes y con comida suficiente para un ejército.

Jimin en sus recuerdos en el campo como una pesadilla, ahora que estaba dispuesto en tomar su libertad, pensaba en las carencias que tendría que volver a tomar, pero. ¿Valia el precio al rencontrarse con su familia?

−Joven Jimin, necesita tomar su medicina para recuperarse. −Menciona Youngjae ofreciendo en bandeja de plata− El día de mañana mediante, volverá a verse saludable.

− ¿Aun no hay noticias de la familia Min?

−No, joven Jimin. Después de esa noche que fui por usted, los hermanos del Ciervo desaparecieron. He escuchado a los otros líderes que la señorita Solar y el señor Angust se encuentran en el oriente, el señor Taehyung y el jovencito Jungkook, en su hogar.

− ¿Qué hay de...?

−El señor Ciervo aún se encuentra en el Oriente, aun sin noticias.

Jimin recordaba aquel día como si hubiera sido ayer, a dos semanas de cumplirse había sido teletransportado por Youngjae al hotel principal, junto al resto de hermanos que fueron trasladados sin decir nada, como si los hubiera tragado la tierra, ninguno hacia caso al poder que dejo el Ciervo, porque desapareció.

Tenía el camino libre, pero las cadenas invisibles de que lo hace pensar que volverá lo hace aguardar de nuevo en aquel hotel, que era funcional para cualquier familia que buscaba refugio contra los militares del Oriente, parecía que el control policiaco volvía a gobernar Dante.

Jimin temía también la intensión de que no volviera nunca Min Yoongi, en como la fama y el respeto que le costó escalar con cada pequeño escalón sea de nuevo para el olvido, eso hasta las personas en el hotel que esperaban el siguiente movimiento.

− Youngjae. ¿Sabes dónde está el hogar de Min Taehyung?

−Sí, joven Jimin.

−Llévame con él.

Para el menor que no podía mantenerse de manos cruzadas, ahora se encontraba con su fiel sirviente bajo las sombrar de aquel hotel, escondiendo a aquellos que preguntan por el Ciervo y ahora salen con los pocos escoltar por la parte trasera en uno de los autos, mientras Jimin aguarda piensa en el Ciervo como un criminal más en la cárcel, además de su estabilidad al estar el solo aquí.

El auto avanzaba mientras Youngjae le indicaba el camino, en el interior de un bosque en el que Jimin alzaba sus ojos para reconocerlo cuando faltaba al menos un kilometro de distancia, con ello la misma mansión donde comenzó todo, el mismo lugar en el que el Ciervo lo capturo.

−La mansión de Min Taehyung se encuentra al fondo, estoy seguro que lo recibirá.

Cuando el auto para frente la gran casa Jimin lo piensa antes de poder ingresar siendo uno de los sirvientes quien abre la puerta, recordando el fatídico comienzo, y comenzando a entrar en el comedor donde vio una de las víctimas del Ciervo.

Señor Ciervo. [🦌]Yoomin. ¡COMPLETO!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora