Señor Ciervo. [🦌]Yoomin. ¡COMPLETO!

Capítulo 60.

La tensión entre los prometidos era indescriptible, desde su regreso al oriente era Jimin quien pasaba más tiempo en la habitación del Ciervo, haciendo cada una de las mañanas una situación difícil para el Ciervo para cuando tenía que tomar responsabilidades.

Era quien despertaba siempre viendo la compañía a su lado, la fragancia la sensación y ha simple vista la presencia de Jimin algo impredecible para Yoongi, una maldita tortura que era aquel pelinegro.

−H-Hmm... Yoongi.

–Despierta, gorrión...

Min Yoongi reconocía lo que significaba tener intimidad con Park Jimin, aunque hasta ahora mantuviera aquella castidad con Jimin al no meter su miembro en aquel paraíso, aun aguardaba el momento después de su boda, sabiendo cual serian las consecuencias, sabia que cuando tomara a Jimin iba a ser un caos, y sus planes se irían a la borda.

En una lucha de razón, era Yoongi quien descubría la piel desnuda, apenas con una misa a medio abotonar, siendo Jimin quien suelte gemido mientras sigue dormido, abriendo sus piernas mientras su vientre se contrae a la sensación de dedos tocando en su interior, en la que para el Ciervo alguna vez bastaba, tocando el menor mientras daba su propio placer masturbando su miembro.

− ¡A-Ah! ¡Yoongi! –Titubea Jimin, en cada jadeo– ¿Q-Qué le pasa? ¿Por qué tan temprano?

Para cuando Jimin abrió sus ojos, estaba algo consciente de lo que sucedía, siendo levantado sus tobillos para juntarlos, aprovechando el mayor para hacer envestidas con sus muslos, Jimin quedaba viendo el miembro que embestía entre sus muslos sabiendo que pronto llegaría el momento que esa brutalidad llegara entrar en todo su ser.

−Buenos días, gorrión.

Eso ha sido un gruñido, junto los jadeos de Jimin, ahora con la mano pálida tantea con sus dedos en su interior, cuando Yoongi encuentra las intenciones de hacerlo sangrar aquel se detiene al Jimin contraerse y correrse, como lo hace él, ensuciando con pequeñas gotas blancas sobre la piel virgen, dejando a Jimin boca abierto respirando agitado.

Terminado Yoongi con su cometido, ahora era Jimin quien sujetaba su muñeca, siendo en los pensamientos de Jimin pensando la razón por la que no termina de tomarlo, creyendo en su inseguridad de misma razón.

− Termine, aún no termina conmigo.

−Ya lo he hecho.

−No hablo de eso, se que hay más cosas que hacer. ¿Por qué no termina de esa forma conmigo?

−Aguarda después que nos casemos.

Jimin suelta al pálido, para ser quien se reincorpore, el menor hace lo mismo no queriendo ver el desastre de aquel liquido por lo que termina de abrochar la camisa que robo de Yoongi, antes de que él mayor se levante por completo, Jimin se acerca para compartir un beso, el mismo provocativo por siempre.

− ¿Por qué no ahora? De todos modos, nos casaremos. −Convence Jimin, besando de nuevo hasta terminar en un chasquido− Cada noche es lo mismo. ¿No crees que estoy listo?

−Sí, estás listo. Pero prefiero esperar. Quiero que nuestro primer encuentro, sea para poder concebir como tengo planeado.

−Entonces esperare, para poder darte un hijo.

−Una hija. −Corrige Yoongi.

−Los niños también son bonitos, debiste estar cuando presentaron a Heechul es un bebé adorable, igual el hijo de Taehyung, Félix es muy tierno como tu hermano.

Notaba la mirada de desagrado en el Ciervo, mismo que ha negado la entrada al palacio a su hermano menor Taehyung, parecía que no podía mantener la mirada hacia su pequeño sobrino Félix y mucho menos al pequeño de Hechul.