Ante un escándalo gubernamental, mensajes privados de Jungkook, el encantador hijo de la actual presidenta de la nación, son filtrados, revelando su atracción por Kim Taehyung, su apático rival académico de la universidad más prestigiosa del país. E...
La mirada de Taehyung es sombría cuando lo deja frente a su casa. Y, cuando se despide de él en un apretado abrazo, lo siente como una despedida.
—Te llamaré —susurra Jungkook con la voz rota.
La imagen de Taehyung es... No tiene palabras para describir lo miserable que se ve la persona que roba cada uno de sus suspiros. Está destruido, por fuera y por dentro. Y hay algo en sus ojos. Un mensaje que Jungkook no logra descifrar, pero tiene el presentimiento que tarde o temprano lo destruirá.
Taehyung niega con la cabeza, y dice:
—Yo te llamaré —su voz suena como antes, inexpresiva y sin vida—. Estaré ocupado con mi abuelo.
Jungkook decide no insistir, porque hay algo delicado entre ellos.
Lo sabe.
Lo sabe porque conoce más a Taehyung que a sí mismo.
Taehyung cierra la puerta.
—Oye —murmura Jungkook con una última gota de esperanza. El chico voltea con los ojos llorosos y destruidos—. Te amo.
Dos lágrimas caen de los ojos del chico, y su corazón se rompe al ver el gesto de dolor en el rostro que estaba grabado con fuego en su memoria. Y siente ganas de morir al ver que Taehyung tan solo asiente a sus palabras, sin decir nada más antes de voltearse y seguir su camino a la casa.
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