Cuatrillizos Alfa Y Su Princesa De Hielo Perdida

Capítulo Diez: De Regreso a la Academia Storm (Parte dos)

Martes

POV de Esmeralda:

Después de terminar un cuarto de toda la comida que me dieron, Hannah y yo pedimos permiso para irnos, con la esperanza de que los Alfas no se dieran cuenta de que intentábamos ir a la academia sin ellos. Pero desafortunadamente, antes de que pudiera levantarme, mi muñeca fue sujetada por el Alfa Samael con un fuerte agarre.

¡Maldición!

Sabía que dijeron que me llevarían a la academia, pero esperaba que se olvidaran o estuvieran ocupados con cosas de la manada.

-Pequeña Luna, por mucho que no quieras que vayamos a la academia a dejarte, no está en discusión -dijo el Alfa Ezekiel, con un dejo de enojo en su voz.

-Hannah, también volverás a la casa de la manada con Esmeralda. Lo que hicieron anoche ustedes dos es inaceptable. No permitiremos que nuestra compañera y hermana menor estén borrachas en un bar rodeadas de lobos que no están emparejados -dijo el Alfa Azrael.

La boca de Hannah se abrió literalmente, mientras que Luca tenía una sonrisa burlona en su rostro. Era como si hubiera ganado la lotería. Antes de que Hannah pudiera siquiera responder, el Alfa Zaqeil habló.

-No intenten discutir. Ya se lo hemos dicho a mamá y papá, y están de acuerdo. El chofer las llevará y las traerá de vuelta.

Hannah y yo estábamos totalmente atónitas. Sabía que querían que me mudara a la casa de la manada, ya que era una de sus reglas; no tenía ni idea de que Hannah también tendría que sufrir.

Intentamos argumentar por nuestra libertad, pero la forma en que los cuatrillizos nos miraban, sabíamos que era mejor no meter la cabeza en la boca del león, o en nuestro caso, en la boca del lobo. Así que ambos suspiramos y asentimos.

-Ahora que eso está resuelto, ¿nos vamos? La academia está a unos cuarenta minutos en coche. Algunos omegas irán con ustedes para traer sus cosas de los dormitorios, así que no se preocupen por hacer maletas -dijo el Alfa Ezekiel.

Como si tuviéramos opción, entonces ¿cuál es el punto de decírnoslo?

Cuando estábamos a punto de dirigirnos al garaje, los Alfas se detuvieron en seco y me miraron de arriba abajo. Pude ver cómo apretaban las mandíbulas.

¡Maldición! ¿Ahora qué?

-¿Dónde está la chaqueta que te dimos, ángel? -preguntó el Alfa Zaqeil, podía decir que estaba a punto de estallar si daba una respuesta equivocada.

-Hum, está arriba. Hace bastante calor afuera y no queria sudar al caminar por la academia -respondí.

-Cuando nosotros te damos algo para que te pongas, lo usas, pequeña Luna. La chaqueta no era una elección -dijo el Alfa Ezekiel.

Decir que estaba sorprendida ya sería redundar en lo mismo. ¿Cómo podian dictar lo que debía usar? Además, nunca fui de usar ropa sugerente de todos modos. El vestido que tenía apenas mostraba algo.

-Con todo el respeto, Alfas, soy una persona independiente. Sé que usar y qué no -respondí con toda la confianza que pude reunir. Pude ver a Hannah casi dándose una palmada en la cara, y Luca estaba alerta, listo para intervenir si los Alfas perdian el control.

Levanté la vista y vi cuatro pares de ojos negros mirándome fijamente. Tragué saliva y retrocedí. No me harían daño, ¿verdad? Dijeron que soy su compañera, así que eso cuenta como alguna protección, ¿no?

Con cada paso que retrocedía, los Alfas avanzaban, hasta que mis piernas tocaron el sofá y me tropecé al sentarme en el. El Alfa Samael se inclinó y pasó su dedo indice desde mi mandibula hasta la base de mi cuello, deteniéndose en mi marca.

-¡Oh, bebé! Ahí es donde te equivocas. Creo que sigues olvidando que eres nuestra pareja y podemos decirte absolutamente qué hacer -dijo Alfa Samael.

Mi respiración se entrecortó. Giré ligeramente la cabeza a la derecha y vi a Alfa Ezekiel cerca de mi oreja.

-Mientras este lindo cuello tuyo esté desprovisto de nuestras marcas, obedecerás cualquier cosa que te pidamos -dijo Alfa Ezekiel en mi oído, luego mordiendo mi lóbulo de la oreja.

Me sobresalté.

-Hermano, ¡detente! La estás asustando-dijo Alfa Azrael.

Él y Alfa Zaqeil apartaron a sus hermanos.

-Lo que mis hermanos quieren decir, mi amor, es que nos sentiríamos más cómodos si tu cuello no estuviera visible hasta que te marquemos y nos apareemos contigo- continuó Alfa Azrael.

En este punto, no tenía ni idea de cómo reaccionar, Los cuatro eran una montaña rusa de emociones, que me incomodaban y me emocionaban. Pero, jah! Necesito salir de aquí.

Asenti simplemente y subi las escaleras para ponerme la chaqueta, Vi que los cuatro parecían satisfechos y me guiaron al garaje. Fui a sentarme con Hannah y Luca cuando Alfa Zaqeil agarró mi muñeca y frunció el ceño hacia mi. No me molesté en luchar y me relaje en su mano y lo segui hacia el coche de los cuatrillizos. Todos nos subimos en lo que creo que es el Lamborghini Urus de Alfa Azrael.

Conmigo en el medio de Alfa Samael y Alfa Zaqeil, y los dos Alfas mayores al frente. Estaba aplastada entre los dos hombres más jóvenes, y frotaron sus cuerpos contra el mío, probablemente tratando de olfatearme. Rodé los ojos internamente. Después de eso, el viaje fue relativamente tranquilo, solo hubo pequeñas conversaciones entre los hermanos.

Yo, por otro lado, estaba asustada hasta los huesos. Yo no era nadie en la academia, la gente me intimidaba, y ahora tener la atención de los famosos cuatrillizos Alfas no iba a ayudar a mi situación debido a su gran base de fanáticos de lobas. Además, el hecho de que podría encontrarme con Eli y Leah me ponía nerviosa. No estaba tan herida como anoche, pero aún me afectaba cuando lo pensaba demasiado. Los dos cuádruples más jóvenes sintieron que me tensé y me miraron. Alfa Samael tomó gentilmente mi mentón y levantó mi cara para mirarlo.

-Bebé, ¿estás bien?

-Ah, si, Alfa-Pude ver cómo fruncia el ceño, ya sea porque lo llamé por su título o porque no compartia mis sentimientos, pero simplemente asintió.

-Pequeña Luna, hoy te anunciaremos, le diremos a todos que eres nuestra pareja y que serás la Luna de todos. Celebraremos tu ceremonia de Luna el próximo fin de semana dijo Ezekiel.

Giré la cabeza tan rápido que me dio un latigazo en el cuello.

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Autor original: PlatinumStar

Enlace: https://www.dreame.com/story/1549738496-quadruplet-alphas-and-their-lost-ice-princess