Cuatrillizos Alfa Y Su Princesa De Hielo Perdida

Capítulo Treinta y Ocho: La cita de Zeke (Parte Uno)

Capítulo Treinta y Ocho: La cita de Zeke (Parte Uno)

Miércoles

POV de Esmeralda:

-¿Qué hiciste? ¡No, no te creo! -dijo Hannah.

Ella y yo estábamos en su comedor privado Beta. Sorprendentemente, ella se había mudado de nuevo a los cuarteles Beta, y esta estúpida no se tomó la molestia de decírmelo. Tuve que enterarme por una omega que vino a limpiar mi habitación por la mañana cuando no la encontré. Según ella, con la manera en que los cuatrillizos y yo nos estábamos poniendo cariñosos, Hannah y Luca ya no eran necesarios en los cuarteles Alfa. Además, ella dijo que no queria quedar traumatizada si alguna vez entraba a mi habitación y vela a sus hermanos metiéndomelo por cualquier maldito agujero que tuviera. En el momento en que dijo eso, me puse como un tomate, ella está completamente loca. Estaba tan feliz de que Luca o los cuatrillizos no estuvieran cerca. Hubiera sido incómodo si escucharan lo que Hannah dijo, bueno, más para mí. A los cuatrillizos no parecían importarles en absoluto los comentarios explícitos sobre nuestra relación.

¡Estúpidos machos Alfa, siempre pensando más con su entrepierna, que con la cabeza!

En cuanto entré a los cuarteles Beta, fui bombardeada con preguntas sobre mis dos citas. Aunque sabía que nunca podría ocultarle nada a este demonio, recordar lo que Azrael y yo hicimos ayer en el yate hacía que se me revolvieran las entrañas. No sabía cómo contarle todo eso. Sin embargo, no éramos mejores amigas por nada; ella vio claramente que estaba ocultando algo y me hizo soltar todo con lujo de detalle, lo cual, debo añadir, fue incómodo de narices.

Nunca supe que se podía sentir de esa manera. ¡Demonios! Ni siquiera sabía que podía sentirse tan bien. Eli y yo ni siquiera llegamos a besarnos bien, siempre decíamos que daríamos el siguiente paso una vez que supiéramos que éramos compañeros para que fuera único. Pero, si hubiera sabido que podía sentirse tan bien, ¿habría tomado una decisión distinta en aquel momento?

Pensándolo bien, probablemente no. Aunque estábamos juntos, en el fondo siempre supe que no era lo correcto, y yo, con mis inseguridades, escondí esa pequeña voz tan lejos en mi cabeza que no volvió a ver la luz en mi mente. Pero eso salió mal de todas formas, asi que supongo que no fue una buena idea.

-Hola, ¿entiendes lo que te digo? Deja de soñar despierta y dime que no estás mintiendo y que realmente tuviste tu primer orgasmo -dijo Hannah.

Le tapé la boca con las manos, las puntas de mis orejas se pusieron rojas. Las omegas estaban merodeando limpiando sus cuartos. No necesitaba ser el centro de los chismes entre todas las omegas hoy, porque Hannah no podía guardar silencio.

-¡Shhh! Han, en serio, cállate -dije, retirando mis manos y mirándola seriamente.

Ella simplemente rio y levantó las manos en señal de rendición, pero me instó a responder a su pregunta.

¡Ugh!

-Si, ahora cállate. No quiero que alguien nos oiga -dije.

Ella chilló y saltó de su silla para abrazarme.

-¡Oh, Em, estoy tan feliz de que al menos ya no seas virgen en ese departamento! -dijo riendo.

-En serio, Han, ¿en serio?

Solo le dediqué una mirada de desprecio, a lo que ella rio.

-De acuerdo, entonces al menos has hecho algo s****l con los dos mayores idiotas. ¿Crees que los otros dos idiotas también harán algo? Porque, por lo que conozco a mis queridos hermanos mayores, no hay secretos. Estoy segura de que Azrael les contó sobre su pequeña escapada en el yate -dijo Hannah, tan seria como si esto fuera una discusión que cambiaria nuestras vidas.