CAPITULO 13

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En el presente, Daniel, luego de recordar su pasado, cerró sus ojos y cayó en un profundo sueño para, a la mañana siguiente, despertar y saludar a su familia con una gran sonrisa antes de salir en busca de un empleo

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En el presente, Daniel, luego de recordar su pasado, cerró sus ojos y cayó en un profundo sueño para, a la mañana siguiente, despertar y saludar a su familia con una gran sonrisa antes de salir en busca de un empleo.

—¿Hola, Samuel, pasa algo? — preguntó al tomar su teléfono luego de que este sonara.

—Tus padres me dijeron que el fin de semana hay una cena en su casa, ¿sabes algo?

—Ah, eso — suspiró mientras colocaba su celular en el auto y tomaba los audífonos para continuar la llamada — al parecer, quieren que Claris se presente a la familia.

—Entiendo, pero no suenas muy feliz.

—¿Debería estarlo?

—Mmm, escucha, no hagas locuras.

—No lo haré, solo voy a divertirme un rato.

—Escucha, sabes qué, mejor solo dime a qué hora es.

—No sé, pregúntales tú, ahora estoy en busca de trabajo.

—¿Trabajo?

—Sí, bueno, aún soy desempleado.

—¿Por qué no mejor trabajas en el hotel o el bar? Suena como una buena opción.

—Mmm, de acuerdo, entonces iré hoy.

—Bueno, le informaré a los empleados.

—Genial, nos vemos.

—Espera, no me cuelgues.

—¿Pasa algo? — soltó mientras paraba frente a un semáforo.

—Iré a ver a Alex en la tarde, ¿irás?

—No, tengo planes y si quiero comenzar a trabajar creo que sería mejor empezar hoy.

—De acuerdo, nos vemos.

Luego de terminar la llamada, entró en un café, y no cualquiera, pues tenía la intención de ver a Ava.

—Lo lamento, pero Ava no trabaja hoy.

—Entiendo, entonces, deme un descafeinado para llevar.

Luego de tomar su café, al caminar hacia su auto, una mujer de cabello corto, tez morena y cabello pelirrojo ingresaba al café.

—¿Has visto a Ava? — soltó un poco nerviosa la joven frente al mostrador.
—No, pero dime, ¿tú y ella se pelearon o?

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