Alexander Orión es un empresario hotelero que en el 2019 tuvo un accidente en su auto, el cual le hizo perder la vista.
Ava es una estudiante a maestra y mejor amiga de la ex prometida de Alexander, un día ella descubre que ella planea dejarlo solo...
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El día de la gran cena familiar, Ava estaba un poco ansiosa, aún así no dudó en vestir su mejor vestido y maquillarse para la ocasión. La joven llevaba un bello vestido rosa con olanes en las mangas, y finas tiras que lo sostenían en sus hombros; aquel hermoso vestido acentuaba su cintura, mientras realzaba su gran belleza. El largo de la falda le llegaba hasta las rodillas y el simple pero refinado escote en V le hacía relucir las ondas de su gran cabellera negra. Su perfume a lirios era más dulce de lo habitual y su maquillaje era lo suficientemente sutil como para enamorar a cualquiera; después de todo, sus bellos labios rosáceos hipnotizan a cualquiera.
Al llegar al departamento de Alexander, respiró profundo y llamó a la puerta.
- Voy - se escuchó detrás de la puerta la voz de Patrik- bien parece que la bella Claris acaba de- atónito se quedó sin palabras al verla.
- Hola, Patrik, ¿llegué temprano? El hombre asombrado parpadeó varias veces y al fin reaccionó: - ¡Casi me da un infarto!.
- ¿Qué?.
- No, nada, llegas a tiempo, pasa - la joven ingresó al departamento y mientras lo hacía el aroma de su perfume llegó a Patrik.
- ¿Lirios!?
- Ah, es mi perfume- rio pero al verlo un poco abrumado soltó ansiosa-¿acaso eres alérgico o algo? ,¿Mejor me lo quito?.
- ¡No!, ah, perdón, no, voy a buscar a Alex - tragó saliva y al ingresar al cuarto de su amigo lo miró y corrió hacia él.
- ¿Qué pasa? - soltó asustado ya que Patrik lo tomó de imprevisto.
- Escucha, por más que lo quieras, no digas nada, no puedes hablar.
- ¿Estás borracho? - lo apartó y se dirigió a la puerta, pero cuando la abrió.
- Estás bien, qué alivio, me había preocupado, ¿por qué tardaban tanto?.
- Ah, yo - sonrojado y anonadado por su belleza, intentó responder - ¿Cuándo llegaste, Claris?.
- Hace unos minutos.
- Ya veo, ah, bien entonces - atontado intentó alejarse un poco pero chocó contra una silla- ¡aah!.
- Aún no aprendes a caminar solo, creí que habíamos logrado un gran progreso - << a este paso, si seguimos así, no seré capaz de irme >>.
- Estoy bien, ¿por qué no mejor no nos vamos?.
Con eso, los tres bajaron hasta el estacionamiento y subieron al auto de Patrik, ansiosos los tres, uno más que el otro, se dirigieron a su destino.
- ¿Nerviosa?.
- Un poco.
Alexander tomó su mano y - está bien, estamos juntos - << ah, quiero decirle lo hermosa que se ve, pero ¿qué dirás cuando sepas que te mentí, me tratarás igual?, ¿o huirás?>> Repetía una y otra vez en su cabeza hasta llegar a la gran puerta de la casa de sus padres. - Bien, aquí vamos. Al bajar, Marlen les recibió con un gran abrazo, elogió su apariencia y los invitó a entrar. El padre de Alexander estaba muy feliz de recibir a su nuera, tanto que inmediatamente comenzó a acercarse para hacerle saber lo bienvenida que era.
