𝟬𝟬𝟲

77 9 0
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.







































_______________________________________

— ¿Tus amigos saben que estás hablando con una Marginada?

— Nah. Tampoco me importa.
_______________________________________











































































— Che, ¿qué te pasa boluda? —Valesk notó como revolvían su pelo y alzó la cabeza con los ojos entrecerrados, mirando a quien le había tocado—. ¿Y esa cara de re muerta?

— Marcos no paró de llorar en toda la noche —frotó sus ojos para poder quitar cualquier rastro de sueño.

— ¿Querés un poco de café? —Juani le extendió su vaso, para que ella lo cogiese y le diese un sorbo.

— Posta, ¿qué haréis con la obra? —Matías llevó su sándwich a la boca para morderlo. Juani y Valesk se dieron una mirada larga.

— ¿La verdad? Ni sé —este encogió los hombros.

— Yo pensé en una cosa para que no nos den algún papel principal —la chica dio una sonrisa triunfadora por lo que se le había ocurrido el día anterior—. Simplemente hacerlo mal —encogió sus hombros.

— Wow Valesk, has tenido que pensar mucho eh —se burló el de pendientes, recibiendo un golpe por parte de ella.

— Callate —murmuró.

— Nos presentaremos juntos, ¿no? —Juani intervino en ese momento.

— Si, claro —ella dijo segura—. Haremos de Sharpay y Ryan —recibió miradas confusas de sus amigos.

— Pensé que te gustaría ser Gabriella —ella le miró con duda—. Ya sabes, por tu fanatismo con Troy.

— Ya, pero, prefiero a Sharpay antes que a Gabriella —encogió sus hombros sin dar mucha importancia.

— Pues haremos eso —Juani alzó su mano para chocar los cinco con su amiga.

— ¿Cuándo tenéis las pruebas? —preguntó con curiosidad el castaño.

— Mañana.

— ¿Podré ir? —volvió a preguntar con burla.

— Nah —Valesk le dio una sonrisa burlona para volver a tomar del café de su amigo. Matías hizo un ligero puchero—. Haberte apuntado a esa clase boludo.

Mundos diferentes | Felipe OtañoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora