Capítulo 21

31 13 0
                                    

Muerdo la manzana, mi última comida del día. Sigo sin entender del todo lo que ha pasado con Lorenzo, está claro que oculta algo. Algo que no se esfuerza por ocultar, como si quisiera que lo descubriese. ¿sino por qué me ha dejado siquiera acercarme a él? De normal hubiese salido corriendo nada más verme para evitar una incómoda interacción entre nosotros.

Por otro lado, sigo dándole vueltas a todo ese asunto del sueño. Mi mente viaja de un tema a otro constantemente. Aquel fuego rodeándome aún me provoca escalofríos solo de recordarlo. ¿Y si las chicas tienen razón y ha sido, simplemente, una pesadilla? No sería nada raro. Estas últimas semanas he estado estresada, era cuestión de tiempo que repercutiera en mis horas de sueño. Quizá debería dejar correr el tema, al menos hasta que encuentre alguna señal que me equivoco.

Por otra parte, he despertado en el sofá. Algo desconcertante porque no recuerdo haberme quedado dormida ahí, sino en mi cama. Puf, ¿sabes qué? Ya no sé ni qué pensar. Últimamente parece que estoy más muerta que viva por el cansancio, tampoco se me haría raro haberme quedado dormida en el sofá y que se me haya olvidado.

Anila es la última en llegar, su pelo aún está húmedo, no le ha dado tiempo a secárselo del todo. Deja la bandeja en la mesa y se sienta frente a mí.


– ¡Hola! –Nos saluda mientras se quita la chaqueta y la deja sobre el respaldo de la silla.


Yo solo le respondo con un gesto de cabeza y vuelvo a darle otro mordisco a la manzana. Llega bastante tarde, la mayoría de nosotras ya hemos acabado nuestra cena y vamos por el postre. Normalmente nos esperamos hasta que terminamos todas, pero hoy me encuentro particularmente cansada. Estoy por terminarme la manzana e irme de una vez.


– ¿Te encuentras bien? –Pregunta mientras se remanga la camiseta para comer cómoda.

''Sí, no te preocupes. Estaba pensando en lo ocurrido esta tarde.'' –Trago el trozo de manzana que se me está haciendo bola.

''¿Qué ha pasado?'' –Pregunta Astra tras dejar el vaso de agua en la mesa. Se me había olvidado que ninguna más había estado presente.

– Ella y Lorenzo han tenido una pelea bastante intensa en el entrenamiento de esta tarde. –Responde Anila por mí.


En realidad no me refería a eso, el entrenamiento no me puede importar menos, ha sido uno más, como cualquier otro. Me refería a lo que sucedió más adelante con él, aunque ninguna tiene ni idea, tampoco voy a contárselo, no es de su interés.


''Tú y Lorenzo, Lorenzo y tú...'' –Suspira Maylea mientras sacude la cabeza, agotada por nuestra actitud.– ''Es increíble que no os hayáis matado entre vosotros todavía.''

''¿Es que no os parece que está raro?'' –Me atrevo a preguntar, aún con miedo a parecer la loca.

''Es Lorenzo. Siempre actúa raro.'' –Se encoge de hombros.–

Pasando de él. –Interrumpe la rubia.– ''A lo importante. Tenías cosas que contar.''

¿Cosas importantes? –Ondine no es la única con curiosidad, las miradas de las demás demuestran que tienen interés por lo que tengo que decir.

''Ah sí'' –Menos mal que me lo han recordado, porque por mi cuenta no me hubiese acordado. Di que tampoco pasa nada, aún queda tiempo para poder comprar los billetes a buen precio y todo eso, pero estaba esperando a que estuviéramos todas para contarlo en persona.– ''¿Qué os parece venir a mi casa en el próximo puente que viene?''


En el tiempo que llevo siendo amiga de Maylea, he descubierto que a ella le gusta mucho pensarse las cosas durante un tiempo antes de hacer cualquier cosa, por más simple que sea. Es algo que me gusta en ella, puede frenar al resto si ve que nuestras ideas son demasiado absurdas como para llevarlas a cabo.

Por eso no me extraña cuando todas están a favor de la idea a excepción de ella, que no lo tiene claro.


''Yo aún me lo tengo que pensar, tengo parciales a la vuelta y no sé si me dará tiempo a estudiar todo si voy.'' –

''De acuerdo. Pero no tardes mucho en decidirte, que tenemos que comprar los billetes''.


Maylea tiene razón, los exámenes y pruebas que nos han puesto tras el puente me echan un poco para atrás, pero gracias a mis anteriores años como estudiante he aprendido que no voy a dejar de hacer planes por tener que estudiar, hay tiempo para todo. Además, un examen se recupera, un viaje con amigas no, hay menos oportunidades.

Try Me © [LIBRO 1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora