Epílogo

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7 años después

Era la segunda vez que William Black recorría la galería de arte revisando cada una de sus obras. No era la primera muestra que realizaba, pero por alguna extraña razón era en la que más nervioso se encontraba por mostrar su arte. No estaba seguro si el cambio de estilo que había tomado en estos últimos meses sería del agrado de su público, pero como su esposa solía repetirle ''si les gusta tu talento, no habrá forma de que los decepciones'' y además él dibujaba para sí mismo primero, con estar satisfecho al final de cada trabajo él se sentía bastante contento.

—Oye William, acaban de confirmarme el evento en España—su representante, Erica, se acercó leyendo en su tablet—Será la semana próxima y durará tres días.

Él la miró—Perfecto, allí estaré.

—Terminaré de organizar los vuelos y las estadías. Avísame cualquier cosa que necesites, pero ambos sabemos que todo saldrá de maravilla, como siempre—lo animó antes de desaparecer tan rápido como apareció.

La gente empezó a llenar el lugar y eso empezó a calmarlo. Pasó a saludar a sus padres que como siempre nunca se perdían ninguna presentación a pesar de que estuvieran ocupados con cualquier cosa, antes de que las preguntas de los demás ocuparan todo su tiempo. William disfrutaba demasiado charlar con aquellos que amaban el arte tanto como él.

—Al fin puedo encontrarte solo.

Tabitha apareció a su lado con una copa de vino y una sonrisa. Will dejó un beso en su mejilla. Agradecía lo comprensiva y compañera que era, no solo se pasaba todos los días trabajando en sus proyectos, sino tenía tiempo para aconsejarlo. Se arrepentía de haberle pedido casamiento tan tarde, pero ella no quería apresurarse.

—Hayden me mandó cientos de mensajes para avisarme que están en camino, el vuelo se retrasó.—ella continuó.

Su primo había decidido llevar a Deva a un viaje por Europa para celebrar el cierre de su gira con la academia de danza en donde participaba y aunque no quisiera admitirlo disfrutaba mucho de acompañar a su primo en estos eventos. Se sentía orgulloso de él.

—Le dije que no era necesario que lo hiciera.

—Ya sabes cómo es...

—Sí y con lo que hizo en la boda no esperó menos—rodó sus ojos—Juno me dijo que tiene que decirnos algo.

—¿Debemos asustarnos?

Will se encogió de hombros y pasó un brazo por su cintura mientras miraban el movimiento en la galería. Su prima se encontraba en una especie de vacaciones en el hotel de la familia de Charles. Era lo que solía hacer hace un par de años para compartir tiempo juntos, pero no se perdía nada de la gran ciudad. Siempre le hacía una videollamada para enterarse de lo que estaba ocurriendo...tanto Will como su hermano necesitaban saber qué relación llevaba con ese chico del que lleva enamorada desde su adolescencia, pero solo para molestarlos nunca termina de responder a esa pregunta.

—¡Aquí estamos! —Hayden y Deva cruzaron las muertas de la galería un poco agitados, llamando la atención de varias personas—¡Jefe, cuanto tiempo sin vernos!

William se ahogó en el firme abrazo. Le dio unas palmadas en la espalda para hacerle saber que ya había tenido demasiado contacto físico.

—Solo fueron dos semanas, primo.

—Las suficientes para que extrañe tu amargado rostro—se separó para apretar sus mejillas—¿Acaso perdiste un poco más de pelo? ¿Qué tal los primeros meses de casados?

William lo empujó y se acercó para saludar a la novia de su hermano que se quedó hablando con Tabitha.

—¿Quieren venir a cenar a casa? —él consultó—No falta mucho para terminar, Erica debe estar por algún lado, puedo preguntarle.

—Nos encantaría—Hayden comentó y se colocó al lado de su novia—Pero mejor lo dejamos para la semana ¿si? Estamos bastante cansados con todo lo del vuelo...

—Claro, no hay problema.

Las dos parejas se quedaron en silencio, no era incomodo, pero podían sentir que habían cosas por decir. Hayden carraspeó:

—¿Hablaste con Juno?

—Sí, la veo disfrutando mucho de la playa y el calor.

—Compadezco a Charles...

Will soltó una pequeña risa y compartió una mirada con su esposa—Me dijo que tenían algo que contarnos...

—¿Nosotros?—bufó—Claro que no, no te olvides que ella es una mentirosa patológica.

Deva le dio un codazo—¿De verdad?

—Eso me dolió, cariño.

Ella negó con la cabeza y miró a William y Tabitha con una sonrisa—Tenemos una gran noticia, pensábamos hacer una  reunión para comentarlo, pero Juno se enteró y se empezó a divulgar por todos lados, así que tuvimos que llamar a nuestros padres y...—suspiró—Estoy embarazada.

—¡Felicitaciones!—Tabitha fue quien se abalanzó sobre ella, muy emocionada—¡No puedo creerlo! ¡Estoy muy contenta por ustedes!

Deva se dejó abrazar con una gran sonrisa. Will miró a su primo por unos instantes antes de abrazarlo tambien:

—Felicidades, tío. Me alegro por ambos.

—¡¿Cuándo se enteraron?!—su esposa continuaba el interrogatorio, Will podía notar que el asunto la emocionaba demasiado—¿Pueden ser mellizos?

—Nos enteramos antes de irnos de viaje, tengo turno la próxima semana para verificar eso.

—Perdón la pregunta—Will que estaba maquinando todo, consultó—¿De cuánto tiempo estás?

—Aproximadamente cuatro meses.

—Eso es...

—Sí, jefe—su primo asintió—Tu boda ha sido el lugar perfecto para crear vida.

William hizo una mueca ante esas elecciones de palabras.

—No quería saber eso.

—Pero ahora ya lo sabes y tendrás que vivir con eso por el resto de tu vida.

Deva rodó los ojos y volvió a hablar con una sonrisa—¿Qué hay de ustedes? ¿Tienen ganas de empezar una familia?

Tabitha suspiró y enganchó su brazo al de Will—Claro que sí, pero ambos estamos tapados de trabajo...no sé si es el momento aún.

—Verán que llegará en el momento en que menos se lo esperan, eso ocurrió con nosotros ¿a que sí, amor?

—Es verdad, jefe.—le colocó una mano en el hombro—Estas cosas son así.

—¿Ya estás intentando actuar como un padre superado?

—No...

Todos se rieron y compartieron tiempo juntos hasta que la galería cerrara. William se ofreció a llevarlos a su casa ya que no estaban con su auto. Cuando los dejaron, en el camino de regreso Tabitha le preguntó:

—¿Tú quieres tener familia?

Él la miró de reojo.

—Claro, ¿por qué lo preguntas?

—Es que antes he respondido por los dos y nunca habíamos tenido una charla seria al respecto.

William llevó una de sus manos a su muslo descubierto.—Tener una familia contigo es lo que más quiero, Tab. Opino igual que tu respecto a lo de nuestros trabajos, pero creo que en el momento en que ocurra podremos organizarnos y todo saldrá bien. Además, piénsalo, seremos grandes padres.

Ella rió, cualquier rasgo de tensión se disipó.

—Te amo Will.

—Me alegra, porque sino el casamiento hubiera sido un fracaso.

Ella soltó una carcajada más alta y lo miró de soslayo¬—Estás gracioso...

—Yo tambien te amo, Tab.

Estrellados © 3ºDonde viven las historias. Descúbrelo ahora