La noche ya se había asentado sobre el internado. Hayden necesitaba pensar y estar sólo, por eso decidió no ir a cenar y quedarse bajo uno de los árboles del parque. El más alejado a los edificios. Estaba molesto, dolido y decepcionado. Siempre admiró a sus padres, pero lo que sintió al leer aquel mensaje le partió el corazón, porque a pesar de no estar confirmado, él sabía que era algo muy factible. Siempre había algo ahí, que nunca supo descifrar. Ahora, ya tenía la respuesta.
—¿Hayden?
La voz dulce de Deva lo sorprendió. Se limpió una lágrima que corría por su mejilla antes de levantar la mirada.
—Hola, preciosa.
—¿Qué haces aquí? —se mostró preocupada, acercándose para sentarse a su lado—Tu hermana me dijo que tal vez necesitabas hablar con alguien ¿Estás bien?
Hayden sonrió de lado—Ella siempre tan metiche.
—Sonaba preocupada por ti.
Él se pasó una mano por el cabello junto a un suspiro.
—Lo sé...
Deva lo miraba muy atenta y entrelazó sus manos—¿Quieres contarme?
—Es algo complicado de entender.
—Haré lo mejor que pueda, tampoco me subestimes—bromeó golpeando su hombro con el suyo. Logrando hacerlo sonreír.
Hayden respiró cuando ella empezó a jugar con sus dedos—Es un problema con mi familia que me tomó por sorpresa. Al parecer mis padres nos ocultan cosas hace mucho tiempo.
—Bueno ¿no lo hacen todos?
—Esto es mucho peor, Deva...no es una mentira típica cómo cuando nos engañaban para ir al dentista. —negó con la cabeza—Me criaron sobre ella y es horrible la forma en la que me siento ahora mismo.
—¿Qué es?
Hayden suspiró. Decirle cómo se enteró le parecía meterla en una situación que no era tan bonita por eso se limitó a mencionar lo que decía el mensaje:
—Mis padres fueron obligados a casarse el uno con el otro...al parecer mi madre salía con un tipo y mi padre con muchas personas—comentó con una mueca en su rostro, pero continuó— Su matrimonio siempre me pareció lo mejor, la complicidad que siempre tuvieron era algo que a medida fui creciendo anhelaba para mí.
—Hayden...
—No he hablado con ellos para que lo confirmen, pero algo en mí me dice que es verdad. Aunque por ahora solo son rumores, pero enserio no sé por qué me duele tanto...—la voz se le quebró—Pero lo hace y no entiendo.
¿Podían ser todas esas cosas ciertas? ¿Estaba exagerando? ¿Porqué no podía ser frio como su primo y esperar a terminar la misión? Todas esas eran preguntas que rondaban por su mente, pero lo mayor era que estaba intentando ponerse en el lugar de sus padres. Intentaba imaginarse en sus zapatos, sin opción...los veía a ambos capaces de negarse a hacerlo si no era lo que querían. Entonces ¿porqué lo hicieron?
Se sorbió la nariz—Tambien hay rumores sobre mis tios y todo es muy descabellado. Quería estar solo para pensar y tranquilizarme—la miró de soslayo—Pero te agradezco que estés aquí. Me haces muy bien.
Los ojos de Deva se habían cristalizado a medida que el contaba su relato. Por reconocer de lo que hablaba. No le gustaba verlo sufrir, pero menos le gustaba hacer lo que tenía pensado:
—Todo esto pasó antes de que nacieran ¿verdad?
Hayden aún no notaba el tono que ella estaba usando, seguía enfrascado en acariciar sus manos—Así es.
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Estrellados © 3º
Teen FictionWill, Juno y Hayden deben cumplir el último deseo de su abuelo para poder acceder a su herencia: pasar tres meses en un internado apartados de todos no parece algo malo, excepto cuando se encuentran con personas que deseaban dejar atrás. Secretos d...