My Electric Love; Kakashi Hatake

Capítulo 3

ʟᴀ ᴍɪᴛᴀᴅ ᴅᴇ ᴛᴜ ʙᴇʟʟᴇᴢᴀ ᴇʀᴀ ᴛᴜ

ᴇxᴛʀᴀÑᴀ ꜰᴏʀᴍᴀ ᴅᴇ ꜱᴇʀ....

Caminaba por el bosque, ese día en específico era especial, Minato Sensei acaba de ser nombrado Hokage y por lo tanto no tenía misiones. planeaba quedarme en casa todo el día pero de camino me encontré con Kushina San y ella me preguntó si podía irte a buscar porque no te habías presentado en todo el día.

Recuerdo que solo podía pensar en cómo alguien tan ruidosa podía desaparecer de la faz de la tierra, llevaba toda la tarde buscándote. Miraba al piso revisando si había huellas.

—Hola Kakashi, ¿qué miras?— Me preguntaste mientras aparecías enfrente mio colgada de cabeza en la rama de un árbol.

—Donde estabas, Kushina San preguntan por ti. —Frunciste el seño cual niña chiquita mientras inflabas tus mejillas, jugaste con tu mano con uno de los mechones de tu cabello que colgaba.

—Agh, puedo cuidarme sola— Dijiste y un segundo después te caíste del árbol, colocaste tus manos sobre tu cabeza mientras te sentabas como indio en el piso, solté una pequeña risa.

—¡De que te ries TontoKashi, me dolió!— Me gritaste eufórica, pensé que te habías enojado conmigo pero cuando me miraste a los ojos, pude notar que esos orbes azules solo reflejaban diversión.

—¿TontoKashi? Que clase de apodo es ese— Te dije burlón, a lo que tu te reiste contagiándome la risa.

—Uno que te queda muy bien—Sacaste la lengua de forma infantil. — Oye Kakashi creo que deberías reír más, tu sonrisa es preciosa así aunque la tape esta tonta máscara. —Frunciste el ceño otra vez mientras en tu boca se dibujaba una sonrisa maliciosa.

—Ka-ka-shi—caturreteaste mi nombre—Me dejas ver debajo de tu máscara.

—No.

—Que amargado eres, Kakashi— dijiste mientras te levantabas, cuando estuviste de pie tomaste mi mano y empezaste a correr hacia la aldea. Tu cabello me rozaba levemente el rostro, me queje pero tu solo te reíste y seguiste corriendo.

—Apresúrate Kakashi, Minato y Kushina-Nee ya deben de estar celebrando. —Asentí y dejé que me arrastraras. En mi mente se repetía la imagen tuya colgada en el árbol y como te caías cuando tu chakra disminuyó, el recuerdo hizo que una sonrisa se dibujara en mi cara y no pude evitar pensar, que linda y extraña forma de ser.