La Manshin y el Príncipe heredero ~찬백~

No hay calma, después de la tormenta

El eunuco Do, cargando pesadamente al sensible príncipe consorte, sacó la llave y abrió la gruesa puerta de madera con complicaciones. Recorrió con dificultad un pasillo alargado hasta que divisó una habitación con cerradura, abrió nuevamente con trabajos por estar sosteniendo al príncipe, una cama enorme, una pequeña sala y una tina de baño detrás de una pantalla le dieron la bienvenida. Baekhyun solo asentía cuando se le preguntaba algo, sin poder formular una palabra coherente, sin poder siquiera ponerse de pie adecuadamente. Retiró la tela que restringía sus sonidos y estos no se hicieron esperar, pues sonoros comenzaron a salir. El rostro de agonía del príncipe le partió el corazón, pues no había nada que pudiera hacer para aligerar su carga.

-Estaré tras la puerta, si me necesita... bueno, ya vendré yo en un rato a ver si me necesita.

Salió, dejándolo recostado en la cama. Era un tormento escucharlo, cerró la puerta y se concentró entonces en el lugar en el que estaba. Sin duda era una posada que albergaba decenas de habitaciones, el pasillo se alargaba aún más, bifurcándose hacia la mitad, lo que indicaba la gran capacidad que poseía para albergar inquilinos. No sabía que Tamora era un lugar que acarreara visitantes. Puso atención a los ruidos a su alrededor y se dio cuenta de que los gemidos del príncipe no eran los únicos que se escuchaban. En cada habitación los clamores que indicaban unión sexual eran escuchados con claridad ¿Cómo había dado el príncipe consorte con este lugar y por qué tenía una llave? Asustado comenzó a mirar en todas partes, entró en pánico cuando tres tipos corpulentos se acercaron al unísono por los pasillos que los rodeaban.

...

Los señores Byun bajaron del barco en medio de un ambiente festivo, los pueblerinos reunidos daban la bienvenida a sus familiares y los invitaban a la fiesta de celebración en la casa del noble del pueblo. La pareja de chamanes, que nunca había pisado tierra tan sucia como la de esa isla sintió de inmediato la carga negativa del lugar

-Si esto sentimos nosotros, que tan mal la habrá pasado nuestro Baekhyun? - preguntó con tristeza Byun Minhee

-No es tiempo de preocuparse por esas cosas, mujer. El tiempo apremia

El señor Byun que era hombre de pocas palabras y muchas acciones comenzó de inmediato a preguntar a los que lo rodeaban. No fue difícil, el pueblo estaba gustoso de brindar información a la pareja de chamanes, creyendo que eran invitados de honor y agradecidos aun por librarse de la tormenta. Las mejores posadas se nombraron y la casa del noble fue la conclusión obvia debido a la celebración en honor del manshin real. Deseaban tener caballos a la mano que acortarán el camino, pero se consolaron con una lenta carroza en la que bondadosos isleños se ofrecieron a llevarlos.

Byun Mynhee revisó que la ánfora no tuviera fugas y envolviendola en sus túnicas para que conservara el calor subió igualmente a la carroza rogando a los dioses que no fuera demasiado tarde. Que su hijo tuviera la fortaleza suficiente hasta que ellos llegaran y que Cheosin fuera un poco indulgente y no lo abandonara.

...

El registro de las habitaciones estaba por concluir y JongIn, con cada habitación que anunciaban despejada se ponía mas y mas nervioso. Si encontraban al príncipe consorte y al eunuco, haría que este pagara con su vida por haberse atrevido a moverlo de habitación sin consentimiento. Y si encontraba a esa maldita Taeyeon y al príncipe... bueno, había que esperar que pasaba esa noche. Si hacían lo que la mujer tenía planeando toda la noche, estaría feliz por su amigo, con suerte, si los dioses eran bondadosos, concebirían un heredero. ¡Si tan solo apareciera de una vez el maldito Chaman!

Debió haber sospechado algo cuando Chanyeol mencionó su intimidad hace un par de horas, debió de haberlo intuido cuando comenzó a beber como desesperado y a rechazar los cariños de la mujer. Seguramente el maldito chamán lo había rechazado nuevamente. Ojalá los dioses le concedieran la muerte y así su amigo tendría un matrimonio normal, con alguien bella, virtuosa y atrevida. El príncipe consorte podría ser agradable y talentoso, no lo negaba, no le caía mal. Pero era un hombre y ni siquiera uno que está dispuesto a dar el culo al príncipe. Es más, si él se hubiera casado con el Taeya y los beneficios del matrimonio se aplicaran, no escatimaría en favores sexuales.