Entendimiento II

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Para entender las peticiones de su Dios, debía entenderse a sí mismo, con ese pensamiento en mente y después de leer las biografías de chamanes que el Taeya poseía, llegó a una conclusión. Su Dios no era egoísta. Cheosin, a su manera, siempre demostró cuánto lo amaba, siempre lo ayudaba y es a quién le debía todo su ser, el egoísta no era nadie más que él.

Baekhyun y solo Baekhyun era un egoísta que quería monopolizar a Cheosin, así que, era válido que al negarse a la única petición que su Dios le había hecho, este se enojara. Cheosin tenía un mundo entero a sus pies y la posibilidad de obligarlo a realizar sus mandatos si quería, solo era cuestión de poseer su cuerpo y hacerlo, pero no lo hizo así, su Dios le daba la oportunidad de retribuir un poco todo el amor que obtenía de él.

Baekhyun se permitió entonces pensar en los sentimientos que lo embargaron en Tamora, esos, de los cuales esperaba que su dios le ayudara a comprender, y se dió cuenta que en realidad no era tan malo, ya no. El taeya le había dicho que lo respetaría, que no volvería a forzar la consumación y él se hizo la misma promesa. El príncipe heredero demostró ser un buen esposo, no importaba si en esa relación ninguno era mujer, ambos eran capaces de entenderse bien. Antes de Tamora llevaban una relación de amistad y que es el matrimonio, sino una confianza absoluta en tu consorte, una que trasciende la amistad?

Así que, ese toque, ese beso… no eran malos, era tan solo un camino que su Dios le pedía explorar.

—Alteza, la concubina real pide audiencia con usted — anunció el eunuco Shik que lo acompañaba desde que le quitaron al eunuco Do y se dijo que debía priorizar su restitución antes que nada. Ahora, pensar en la consorte era otra cosa que debía organizar. Recordó tan vívidamente la frase “los celos son del diablo” dicha por su dios hace tanto tiempo, que casi creyó que había vuelto. Sonrió. Él ya estaba mejor, no debía seguir ocultándose, su esposo no era suyo, pero él no era una mujer. Hizo otra nota mental de eso, diciendo que investigaría y se dirigió a su eunuco.

—Saldré ahora.

Taeyeon se mostró muy sorprendida cuando lo vió salir en lugar de permitirle entrar a ella. El príncipe consorte vestía de nuevo con la túnica azul y rojo característica de los chamanes, nada comparable al hermoso hanbok color del cielo con grabados en hilo de plata que ella usaba, sonrió por dentro, sabiendo que a los ojos de todos Joseon, se pensaría que la princesa era ella.

Bajó la cabeza cuando estaba a escasos pasos, saludando con un falso respeto. Así que fue otra sorpresa cuando el chamán dijo “puede levantarse” pues ella nunca se postró y, al voltear hacia atrás, vio que su maldita dama de compañía lo había reverenciado y mostraba una sonrisa radiante cuando se levantaba. La odió.

—Alteza, vine a presentar mis respetos matutinos — habló con voz melosa y baja y, antes de añadir otra cosa, fue interrumpida por el chamán, lo que sólo contribuyó a molestarla. Sabía que su posición social, a pesar de ser un hombre, era más alta, sin embargo, como se atrevía a interrumpir!? Ella era la que en el futuro estaría en la cima de todos al ser la madre del gran príncipe!

—Está exenta de ese deber. No venga más a mis habitaciones

Baekhyun comenzó a caminar, seguido por su eunuco, el guardia Lee asignado a su cuidado y las damas de corte que lo acompañaban y nuevamente eso molesto a Taeyeon, ya que ella, al ser una concubina, no disponía de un séquito real.

—Alteza, tal vez, podría honrarme con su presencia para tomar un té? Me gustaría hablarle sobre algunos asuntos…

Taeyeon, después de más de un mes en palacio debió entender que el chamán era un ser intocable e inflexible en su pasión por los dioses, los habitantes del palacio lo entendían y hacían todo lo posible por ayudarlo en sus esfuerzos en pro de la paz de Joseon. Hasta la reina viuda que se quejaba tanto de él no interrumpió sus funciones, excusandolo a regañadientes de los respetos matutinos, los bordados, el té… Sin embargo, Taeyeon seguía comportándose con lo que ella creía que era respeto, cuando todos a su alrededor solo la veían comportarse de manera irresponsable.

La Manshin y el Príncipe heredero ~찬백~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora