Confusión

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Lo primero que vio Baekhyun al acercarse a su palacio fue a Minseok, quien ya no estaba fuera de la habitación de Sehun, sino que lloraba con fuerza bajo el sol abrasador fuera del palacio. Baekhyun se agachó para levantarlo y lo abrazó.

—¿Por qué estás aquí?

—Manshin, él… Yo no quería… pedí que preparara el sauzgatillo pero tardará medio día y él… Sehun pidió estar con él… Me dijeron que saliera, no quería, no quería dejarlo con él, pero no lo puedo ayudar yo.

—Está bien Minseok, todo estará bien. Quédate aquí. Yo me necargaré, no dejaré que se aproveche de él.

Baekhyun entró y el eunco Do, que llegó segundos después, corrió aún más fuerte al escuchar al manshin para cerrarle de nuevo el camino.

—Alteza, no le había dicho, más he estado siguiendo al sirviente. Esos dos tienen algo, viste su ropa, pasa las noches con él, salen juntos al pueblo. Quizá debería…

—Debiste decirme antes. Sehun es un niño, mientras que el señor Zhang posiblemente tiene una familia en su país. El señor Zhang solo está aprovechando el cuerpo de Sehun. NO QUIERO HABLAR CONTIGO AHORA!

Grito de pronto y el eunco se asustó, retrocediendo un paso y disculpándose por sus acciones

—Lo siento, no te lo dije a ti. Es solo que… lo que sea. No me sigas.

Su Dios, no paraba de llenar su mente con ideas y Baekhyun ya no quería escucharlo. Hace nada le había vuelto a mentir, a influenciar sus decisiones y, aunque siempre había actuado conforme a sus deseos, ahora solo actuaría con los propios, se acercó hasta donde escuchaba los sonidos de Sehun y las voces se hicieron más claras.

—Despacio… por favor… más espacio…

jadeaba Sehun

—Eso intento, pero sigues moviéndote, déjame hacerlo a mi, mira como estas, todo mojado

Contestaba Yixing

—Por favor…

—Deja de hablar y solo tragalo

—Caliente….

—Ya sé que soy muy caliente, verte así me calienta. Eres cruel.

Baekhyun se apresuró hacia la puerta ignorando la pregunta de su Dios “seguro que quieres ver?” y la abrió con rapidez. Había imaginado que vería muchas cosas. Como a ellos dos unidos, desnudos, en posiciones parecidas a las del libro al escuchar ese “solo trágalo”. Así que la impresión inicial fue… muy diferente.

Ambos estaban en el suelo, Sehun sentado, con la espalda recargada en una pared, su torso era visible y la parte baja de su cuerpo estaba cubierta por una manta. Yixing permanecía con toda su ropa en orden, de cuclillas ante Sehun, sosteniendo su barbilla al obligarlo a tomar de una ánfora de sostenía con su mano libre. Sehun estaba, como había oído, completamente mojado, pues hacía lo posible por resistir los movimientos de su cuerpo y derramaba el líquido al tomarlo. Había un fuerte olor a almizcle, más parecía que este provenía únicamente del sirviente.

—¿Qué le está dando?

Preguntó Baekhyun y ambos voltearon a mirarlo, pues ni siquiera había oído la puerta deslizándose.

—Ah! Alteza… hojas de sauzgatillo. ¿Me ayuda sosteniéndolo por el otro lado? No para de moverse.

La primera impresión de Baekhyun sobre el señor Zhang fue buena, sin embargo cambió al saber que Sehun quería irse con él, después de eso, no fue ajeno a que asistieron juntos al ritual, así que cuando minutos atrás, su eunco mencionó la relación, no fue difícil aceptarla y lo resintió un poco más. Pero ahora, viendo que el extranjero respetaba al sirviente, que lejos de aprovechar la situación lo ayudaba a beber el té, haciéndole saber que lo deseaba, más no así, se dio cuenta que quizá se había equivocado. ¿El señor Zhang amaba al sirviente de verdad?  tanto él como Minseok habían malinterpretado el deseo de Sehun cuando dijo que se iría a Ming? Pero entonces… no debió de haberse sentido triste cuando le expresó la noche anterior que se quedaría? Y esa coquetería con el Taeya… Había muchas cosas que no podía comprender y Cheosin solo lo confundía más.

La Manshin y el Príncipe heredero ~찬백~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora