Es sorprendente lo larga que se puede volver una hora, 60 minutos es más que suficiente para que una guerra deje de tener un solo frente. Las brujas habían recibido una amenaza de la peor forma posible, una de las suyas fue torturada, mutilada, destazada y finalmente asesinada. La señal era más que clara, poco sutil.
Fue el tiempo que le tomó a la doctora determinar con mucha seguridad que se trataba de la chica, de Sofie.
Los pasillos de aquel complejo palacio subterráneo se llenaron de lágrimas, se podía escuchar el susurro del llanto que parecía provenir de la misma roca, como si la montaña también lamentará su muerte, todas la lloraban como si Sofie fuera su hija, su hermana o su madre.
—Es suficiente —sentencia Zafille y la mayor parte del llanto cesó —Ya habrá un momento para llorar su pérdida, cuando ese momento llegue lloraremos lágrimas de sangre por ella, pero ese momento no es ahora. Tenemos mucho por hacer, no permitiremos que la muerte de Sofie quede impune, es nuestro deber, mientras pisemos este suelo y respiremos este aire devolver mil veces el daño que le hicieron a esta niña, nuestra niña —
Fue como un grito de guerra que avivó las llamas feroces de la ira en todos los presentes, incluidos a algunos hombres que habían llegado en los últimos minutos.
La ofensiva se organizó rápido, el aquelarre que había matado a Sofie es un aquelarre más pequeño de los bosques del sur, evidentemente más débil, no tendrán oportunidad en una pelea frontal, entonces ¿por qué habían matado a la chica?.
Estaban en desventaja, acaso ellas no lo sabían. Cuando el grupo de brujas estuvo listo para partir decidí que lo mejor seria ir con ellas, quería ver por mi misma qué clase de criaturas suicidas eran los miembros de ese pequeño aquelarre.
Las brujas habían cambiado sus bonitas y sencillas ropas por trajes enteros de cuero con cinturones llenos de piedras brillantes y cuchillos. Algunas se notaban con los ojos enrojecidos y la piel pálida, evidencia de que minutos antes había estado llorando.
Tomé prestado de Ayury un par de cuchillos, aunque si la información que tenían de ese aquelarre era verdadera no tendría necesidad de unirme a la batalla.
Justo antes de salir otra de las brujas que habían sido enviadas como emisaria llegó, escuche que Azqit la llamaba Chloe.
—Puedes ir a descansar, te pediré tu informe cuando regrese —Le dice Zafille a la joven que supuse tendría más o menos mi edad.
—Sí señora —responde Chloe y por un breve momento vi el destello de un halo rojo alrededor de sus ojos que desapareció antes de estar segura si lo había visto en realidad o lo había imaginado.
—Vamos —dice Zafille y dos brujas abrieron un portal como el que le había visto abrir a Sasha.
Azqit y Ayury no nos acompañaron. La primera por ser muy joven para pelear y la segunda fue designada como líder interino del aquelarre en ausencia de Zafille.
ESTÁS LEYENDO
Pecado de llamas violetas [MAQUIAVLICA LIBRO I]
FantasíaGemma ha estado viviendo de forma despreocupada e irresponsable los últimos 10 años en el mundo demoníaco. Pero ahora, las cosas están a punto de cambiar, el Rey de los demonios ha desaparecido sin dejar rastro y ella, la siguiente en la línea de su...