~Warm~(YM)

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Eran las nueve de la mañana y el moreno seguía plenamente dormido, había llegado muy tarde a casa el día de ayer, desde que mandó a Yoongi a casa para que descansase, su trabajo ha aumentado en grandes cantidades.

—Papá, papá — lo llamaba saltando el pequeño Kim, tratando de despertar a su padre. Su papi le había mandado para que lo despertase y él cumpliría con su misión.

Namjoon se removía molesto por los movimientos que ejercía su cama a causa de los saltos de su hijo.

—¡Papá despierta!— grita fuerte echándose encima de su padre. El golpe que siente el moreno lo hace abrir sus ojos asustado y adolorido.

Estuvo a punto de maldecir, pero observa a su hijo encima de él con una brillante sonrisa, que lo hace retractarse.

— ¿Por qué despiertas a papá tan temprano?— consulta, abrazando a su pequeño.

—Papi — acota. Entonces Namjoon comprende que fue una orden de Seokjin.

—Has despertado al monstruo de las cosquillas — declara acorralando a su hijo en la cama y empieza con las cosquillas lo que hace que el pequeño solecito empiece a reír sin parar.

—¡No! — exclama entre risas el pequeño. Él moreno sonreía feliz, su hijo era lo mejor que la vida y su Jin le habían regalado.

Después de estar varios minutos jugando en la cama con su pequeño hijo, el moreno decide levantarse para compartir el desayuno con su familia. Se va con su hijo en brazos a la cocina, observa a su esposo de espaldas preparando una limonada, que según el moreno era extraño, pero al doncel le encantaba.

Sienta a Hobi en su sillita y se va directo junto a su esposo, abrazándolo desde atrás pegándose a su cuerpo.

—Buenos días, Cariño— Saluda dándole un beso en el cuello.

—Buenos días, Joonie— responde con una gran sonrisa — Llegaste muy tarde ayer, te estábamos esperando con Hobi, pero nos quedamos dormidos —declara dándose la vuelta y quedando frente al moreno.

Namjoon no desaprovecha la posición y le da un casto beso de buenos días — Lo sé Cariño, los llevé a cada uno a su habitación — comenta sonriéndole — Vamos a desayunar y te cuento todo— agrega dirigiéndose a la mesa junto al pequeño Kim.

Ambos se sientan y desayunan tranquilamente con su hijo, la felicidad que ambos sentían al ver a su pequeño junto a ellos era muy grande, habían pasado tres años de tratamientos para poder hoy disfrutar este momento tan cotidiano. Desde que se habían casado querían ser padres, pero cuando más lo intentaban más imposible les parecía, hasta que la vida se apiadó de ellos y les regaló su pequeño Hoseok, la luz brillante de sus vidas.

— Ayer le entregué el sobre a Yoongi — declara el moreno.

Jin lo observa perplejo —¿Qué? —Consulta asustado, conocía la historia de Yoongi.

El moreno comienza a contarle cada detalle que estuvo hablando con Yoongi, acerca de lo confuso de sus sentimientos hacia sus inquilinos.

—Nam, no es la muerte de Jiyuin, la culpa que carga — expresa con tristeza el doncel.

—Lo sé, pero ya no sé qué hacer para ayudarlo Jin — suelta un suspiro — Durante seis años he intentado de todo y simplemente no he hecho nada— declaró frustrado.

—No digas eso, tú eres la persona que más lo ha acompañado y ayudado en todo este proceso— el doncel se pone de pie y se encamina junto a su esposo — ¿Quién lo sacó de la cárcel?, ¿Quién lo sacó de su encierro?, ¿Quién estuvo soportando todo sus malos tratos y sus malas palabras?, ¿Quién le ayudó a ser el productor que hoy es?… no quiero volver a escuchar que digas que no has hecho nada por él, todo lo que ha estado en tus manos lo has hecho — expresa  tomando su rostro con mucho cariño. —Nam, Yoongi necesita sanar — termina abrazándolo.