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Yoongi no podía aún creer todos los pequeños cambios que han estado sucediendo en su vida alrededor de estos quince días de conocer a Jimin y su bebé, había estado durante seis años encerrado en un doloroso pasado del cual no sabía cómo salir, pero sin saber ellos lo estaban ayudando a salir de ese lugar, lo cual les agradece inmensamente.

Aunque el dolor y los recuerdos siguen presentes, trataba al máximo de poder concentrarse en la oportunidad que tenía de enmendar sus errores del pasado. Yoongi sabía que debía ser sincero consigo mismo y con Jimin, pero primero quería ganarse plenamente la confianza del doncel, su mayor miedo ahora es que no lo aceptará después de saber lo roto que estaba.

Con una gran sonrisa se adentra a la casa de su amigo, venía a recoger a sus flores, entra silenciosamente para observarlos. Ambos donceles estaban en la sala conversando, Yoongi podía ver maravillado a Jimin reír, sus ojitos  desaparecian a causa de la risa, no sabía de qué iba la conversación que tenían, pero verlo tan contento, hace que se dé cuenta que no sabía muchas cosas del doncel, la primera persona en verlo es su pequeña Pulguita que venía rápidamente a recibirlo.

— ¡Papá! — grita feliz la pequeña a su encuentro. Yoongi aún no sabía como explicar todo lo que provocaba en él, el simple llamado.

— ¡Tío Yoonie! — exclama el pequeño Kim, tras de la pequeña.

Yoongi se arrodilla y con una sonrisa recibe a ambos pequeños en sus brazos, les deja un beso en la cabeza de cada uno, pero cuando intenta levantarse siente los bracitos de su pequeña en su cuello sin soltarlo, el mayor solo ríe de lado y la carga, sin duda era una pulga.

— ¿Y Nam? — consulta el doncel embarazado acercándose al mayor.

— Debe terminar los últimos trámites del viaje de mañana — responde, sosteniendo fuerte a la pequeña en brazos. El doncel asiente comprendiendi,  la administración estaba a cargo de su esposo.

— ¿Se portaron bien? — consulta a los pequeños. Ambos pequeños se quedan en silencio sin responder nada, Yoongi frunce su ceño confundido.

—Pequeños inconvenientes — responde el doncel embarazado. Yoongi aún no entendía.

— Nada que preocuparse, te lo cuento en casa — comenta Jimin, también acercándose junto a él.

Yoongi entonces lo comprende — ¿Nos vamos? — consulta. Jimin asiente, estaba agotado y necesitaba darle un baño a su bebé.

La pequeña familia se despide de su amigo y el pequeño Kim, asegurando que mañana se volverían a encontrar en el campamento.

Saliendo de la casa se dirigen al coche de Yoongi, donde Jimin abre la puerta para subirse, pero queda estático observando la sillita de seguridad instalada en el coche.

Yoongi observa la relación del menor —Sorpresa — anuncia con una sonrisa — No es alquilado, lo compré especialmente para nuestra pulga.

—¿Por qué? — consulta.

— Porque es necesario para la seguridad de la pequeña — empieza a explicar sin entender la pregunta que le hizo el doncel.

—¿Por qué eres tan bueno con nosotros Yoongi? — consulta ya con lágrimas en sus ojos.

—No llores — pide, coloca a la pequeña en su sillita dándole a Haru en sus brazos para concentrarse en el gato y no en ellos — Solo quiero darles lo mejor — declaró acercándose.

Jimin lo observa lloroso, le parecía irreal la existencia de Yoongi — ¿No crees que es muy pronto todo esto? — consulta aturdido.

Desde ayer en la noche el pequeño doncel se ha estado matando pensando en su situación con el mayor, no podía negar sus sentimientos hacia Yoongi, de verdad lo estaba queriendo de una manera que jamás pensó, pero la preocupación y la duda no lo dejaban, le parecía todo muy rápido, muy apresurado.

Yoongi comprendía al menor, él estaba igual o peor que él, pero ha dejado pasar seis años de su vida en la infelicidad y la soledad, ahora que tenía esto quería disfrutarlo al máximo, pero estaba seguro de que no presionaría al menor, está dispuesto a ir al ritmo que él quiera.

—Vamos a casa — susurra el mayor abrazándolo. Jimin asiente.

Ambos se suben al coche esta vez el doncel iba de copiloto en el asiento delantero, ya ninguno de los dos dijo nada.

Jimin empezaba a creer que molestó al mayor, ya que Yoongi no le ha dirigido ni una solo mirada, como hoy en la mañana que estaba muy atento con él, intenta distraerse observando a su bebé que se había quedado dormida con Haru encima de ella, sonríe ante la tierna escena.

—Yoongi — lo llama quería salir de la duda. El mayor lo observa al instante — ¿Estás enojado? — consulta con cautela.

Yoongi lo observa confundido sin entender su pregunta — ¡No! ¿Por qué piensas eso?—

— Has estado muy callado, después de lo hablado — comenta nervioso e inseguro.

Yoongi suelta un suspiro por su falta de tacto, toma las manos de Jimin y le deja un beso en ella — Estaba pensando en las palabras correctas para expresarme — declara — No quiero que te sientas presionado de ninguna forma, si piensas que todo es muy apresurado, estoy dispuesto a ir a tu ritmo, me importas mucho Jimin — termina agregando con sinceridad.

El doncel lo observa emocionado y maravillado — Gracias por entender — expresa con cariño.

El mayor solo le sonríe de acuerdo con él, pasó a pasó eso era lo importante, tal vez y Namjoon tenía razón este campamento sería una gran ventaja para él.

Habían llegado a casa, ambos estaban más tranquilos, después de todo Jungkook tenía razón, la comunicación era la mejor solución ante cualquier situación.

— Mila papá — la pequeña Minki había despertado emocionada, queriendo mostrar su dibujo a sus padres, eran simples rayas de colores en una hoja.

Yoongi observa el supuesto dibujo sin entender absolutamente nada — Está hermoso, pulga — expresa con cariño.

— Obi bonito dio — exclama contenta dando saltitos de emoción por su amiguito.

La expresión del mayor cambia a un ceño fruncido — ¿Hobi bonito? — consulta en dirección del doncel. Jimin asiente y ríe de la expresión del mayor.

—Está feliz con su nuevo amiguito — declara el doncel.

El doncel empieza a contarle el día tan agradable que tuvo con Jin,  la pequeña pelea de los niños y los muchos postres que realizó, mientras Yoongi estaba emocionado escuchándolo, eran estos momentos tan agradables lo que no quería que terminarán nunca.

El doncel empieza a contarle el día tan agradable que tuvo con Jin,  la pequeña pelea de los niños y los muchos postres que realizó, mientras Yoongi estaba emocionado escuchándolo, eran estos momentos tan agradables lo que no quería que terminarán...

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Tenganme paciencia ya les dije que yo apenas ando empezando en esto de escribir ☹️

~Warm~(YM)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora