Le Malefatte del Prefetto - HBD-HK

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*Este es un especial por el cumpleaños de Kyoya (5May), puede que sea corto o tal vez no, será lo que salga mientras escribo.

Kyoya y Tsuna habían salido en la mañana escapando de Ryujii-sensei, pues, estaban haciendo caso omiso a su advertencia de descansar; sin embargo, como Tsuna ya estaba recuperado al Prefecto no le pareció mal salir y reunirse con su Madre y Tía para ver los movimientos del consejo de ancianos de su clan que solo hacían estupideces.

Cuando arribaron al del restaurante, se sorprendió al ver a su padre acurrucado en una nube gris sin poner atención a lo demás, sin embargo, cuando entro en el privado el estado de su padre perdió importancia al ver la magnitud de dulces en la mesa, por lo que gruño enfadado mientras tomaba asiento con el Castaño y este tomaba una rebanada de pastel de chocolate.

Tione: tranquilo Nadeshiko hablo con Daniela - aseguro su tía al ver el ceño fruncido de su sobrino, señalando a su acompáñate - Daniela superviso todo el proceso y les enseño lo que habían descubierto en la mansión - explico con tranquilidad viendo como el Azabache se relajaba - es y otros 10 restaurantes por el momento ya cuenta con el manejo de azúcar marca Vongola - añadió con diversión viendo la sorpresa en el rostro de su sobrino.

Kyoya: esa Carnívora no se queda quieta ni un momento - aseguro con una sonrisa, tomando su taza de café y una rebana de pie de limón que estaba tan agrio como le gustaba.

Nadeshiko: no me la prestarías un tiempo para arreglar algunas cosas en casa - pregunto con diversión la bella Pelinegra de piel blanca como porcelana, que acompañaba a Tione.

Kyoya: Madre, esa mujer no para en ningún lugar y por el momento está de baja, aunque se hace de oídos sordos - explico con tranquilidad, mientras la Bella Pelinegra miraba a su Cuñada que asentía.

Tione: hace poco se desmayó por exceso de trabajo, derivado de una condición no identificada - explico, pues, su sobrino no era de dar explicaciones.

Nadeshiko: a pobre señorita, acompáñame en un rato y le envías algo de mi parte - aseguro con calma - pero eso no quiere decir que quito mi petición Kyoya - añadió con seriedad observando a su hijo que solo asintió.

Tsuna: Dani no se negará Nadeshiko, pero va a poner de cabeza tu casa - aseguro divertido, haciendo reír a ambas mujeres.

Tione: eso es cierto, Dani pasa por encima de todo para lograr su cometido - añadió divertida - bien ahora vemos lo que planean los viejos tontos - cambio de tema sería mientras desplegaba una pantalla holográfica en la mesa mostrando todo lo que habían encontrado.

Estuvieron revisando la información por al menos dos horas entre total seriedad, aunque hubo una que otra broma, el Castaño era muy querido por las dos mujeres del lugar y el Azabache no se quejaba, pues, aunque no lo dijera en voz alta, quería mucho a esas dos mujeres. Ya habían decidido como proceder con los viejos inservibles que no dejaban de joder cuando el teléfono de Kyoya sonó llamando la atención de todos.

Kyoya: Irie - reconoció al que lo llamaba poniendo su teléfono en altavoz.

Irie: toma el mando que te di - pidió con calma, aunque con un poco de temblor en la voz - acabo de establecer la conexión remota, tienes acceso al 40% de los cañones/trampas, activa la pantalla y disfruta - aseguro con sorna - en dos minutos empieza - añadió para cortar la llamada.

Tsuna: ¿qué es? - cuestiono con curiosidad observando la pequeña consola en manos del Azabache que sonreía con una mueca macabra, que los tres acompañantes identificaron como no hostil para ellos.

Kyoya: Irie nos dio este control manual para usar cuando creamos conveniente - explicó con calma, dejando que el Castaño se sentara en sus piernas mientras activaban la pantalla holográfica, sorprendiendo a todos al mostrar el circuito que los arcobalenos habían montado en el jardín, mostrando al Pelinegro que le había hecho la vida imposible al Castaño a punto de empezar. La sonrisa de todos en el privado se tornó molesto, pero con un toque sádico.

Fue solo que comenzaran y desde el primer obstáculo Kyoya comenzó a dirigir los cañones al Pelinegro, que gritaba al no poder esquivar los chorros de agua, que curiosamente tenían mayor presión porque el Azabache la había aumentado haciendo reír complacidos a sus acompañantes, luego fue el turno de Tsuna qué contrario a lo que pensaban a punto uno de los caños a la Pelinegra que corría a la par de Mochida revelando así el problema de piel que ahora presentaba haciendo carcajear a todos, la Peliblanca le había informado divertida de su travesura, durante la mitad del recorrido entre golpes con más fuerza de la original configurada y juegos de derribarlo, pero volviéndolos a ponerlos dentro del circuito Kyoya y Tsuna rieron al ver la frustración en el rostro de Mochida y Yanomori; en un momento de descuido por su diversión el control les fue quitado haciéndolos quejarse.

Nadeshiko: ustedes ya se divirtieron, ahora es nuestro turno - aseguro con una sonrisa demasiado sádica para la apariencia de la mujer, que solo hizo sonreír de lado a su hijo y al Castaño hacer un Mohín.

Kyoya: todavía te faltan por conocer algunas facetas de mi madre - aseguro con diversión acariciando le cabello del Castaño.

Las dos Pelinegras se habían grabado como funcionaban los controles mientras la parejita los usaba y cuando tomaron posesión del mismo, se desató el averno para los cinco que corrían en el circuito, a pesar de solo tener el 40% del control de los cañones y trampas, fueron capaces de combinarse con el 60% haciendo que el recorrido fuera de nivel imposible y dejando marcas en la piel de los jóvenes que demorarían en sanar, casi al final del recorrido logran sacar a 3 de los que pasaban por el circuito sin que los otros dos se percataran, ya que fueron empujados por dos cañones cruzados cada uno que los empujaron al final haciéndolos completar el recorrido pero terminando con la cara enterrada en el suelo de forma dolorosa.

Tione: dile a Shoichi que haga dos y envíe uno a tu madre - ordeno con sadismo, haciendo sonreír a su sobrino, mientras el Castaño trataba de para de carcajearse, pues las dos pelinegras se las habían arreglado no solo para joder a los que pasaban por el circuito, sino para dejarlos con secuelas mentales, pues a pesar de la limitación de armas fueron capaces de prever el movimiento del resto de trampas y cañones para alinearse con ellos y causar más daño; el cómo termino el recorrido fue una cereza deliciosa y de la cual el Castaño aún reía junto al Azabache.

Nadeshiko: bien, creo que se acabó la diversión - aseguro al ver como el control se apagaba - pásame una lista de todos Kyoya - solicito con seriedad - cariño deja el show y entra de una vez - aseguro molesta llamando al hombre que se encontraba afuera.

Tione: solo está haciendo pataleta porque no sabía que Chi-chan está en Italia - aseguro con calma mientras tomaba otro postre - va a pasar algo más allá o ya vimos lo más interesante - pregunto apuntando a la pantalla.

Tsuna: falta el regalo de Lu-nee - aseguro con una sonrisa que no auguraba nada bueno, llamando la atención de ambas Pelinegras dejaron de ponerle atención al que era el esposo de una de ellas.

????????: qué demonios!! - grito sorprendido al escuchar la fuerte explosión en la pantalla y los gritos de varias personas - que hicieron para merecer algo como eso? - cuestiono con seriedad, pues esas cosas no suceden porque sí.

Tione: Toshi-nii, son los que se metieron con Tsuna-chan - respondió con tranquilidad mientras el mencionado tomaba asiento, y clavaba su mirada en el Azabache que tenía por hijo.

Kyoya: no es de tu incumbencia - aseguro cortante para ignorar al hombre.

Nadeshiko: Satoshi, deja de molestar por eso - riñe con molestia al que es su esposo - Chi tomo la decisión de estar con Tsuna y no ella tiene la potestad de hacer o no lo que él le ordena - añadió con seriedad, dejando sin palabras al hombre.

Luego de ver los estragos que causo el detalle de Luce continuaron a hablando de banalidades esperando la hora del almuerzo, mientras el que se supone que era el hombre adulto sacaba uno y otra excusa para molestar siendo reñido por su esposa; hasta que la Alondra se cansó de las payasadas de su padre y lo molió a golpes para tener tranquilidad, haciendo reír a todos.

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Viaje a ItaliaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora