Viaje a Italia

Perfidus Nervis

*Aclaraciones: ¡¡¡Buenas!!!, siento estar ausente, pero las cosas continuarán así un poco mientras encuentro como paso este bache; si fuéramos en orden seguirían los especiales de Ryohei y Hayato, pero hoy es el cumple de Take-chan, así que tiene prioridad. Un saludo a @KyuubiRosana ayer me preguntaste por esto, ya tenía una idea, pero no estaba segura de publicar, pero tu pregunta y una canción que ronda mi cabeza estos días me impulso a que lo publicara.

Sin más, espero que lo disfruten; tal vez sea algo corto, pero está hecho de corazón. ►►►

¿Qué tan difícil podría ser solicitar la mano de tu pareja a sus padres?, bien estamos hablando de algo que realmente pondría nervioso a cualquiera que estuviera profundamente enamorado de su pareja, no tuviera ni pizca de idea de cómo son los padres de esta y que solo tiene como referencia la personalidad de su hermana mayor que dista eones de lo que es su pareja, por lo que realmente de mucho no sirve.

Takeshi suele ser un chico calmado y amable, que mantiene con una sonrisa por más crítica que pueda ser una situación; sin embargo, a pesar de parecer despreocupado, puede tener bajones depresivos ciertamente preocupantes o enojarse siendo de temer cuando se meten con alguien importante para él; es claro que una situación como la de hablar seriamente con los padres de tu pareja de su plan a futuro (si a futuro, porque ni se lo había dicho a su adorado Peliplata), estaría en extremo nervioso y preocupado por las consecuencias, pues su pareja era bastante explosiva y siendo Vongola ya no esperaba que las cosas se desarrollaran con normalidad, y por esto último es que había tomado la decisión de hacerlo de la nada el día apenas llegaron a Italia.

POV Takeshi

Estoy seguro de que Hayato me va a matar, lo arrastré por un arrebato que tuve, apenas llegamos a la Mansión, pero sé que si me echo para atrás me va a tomar tiempo volver a tener el valor para hacer esto y no sé sinceramente si estaré vivo si volvemos y le explico a Hayato la locura que quiero hacer, pero que me arrepentí; así que no queda de otra que seguir adelante.

Hayato: ¿Takeshi a dónde vamos? - me pregunto cuando es claro por su tono de voz que ya lo sabe, trago fuerte y tomo valor para responder cuando voltea a mirar, pues su mirada estaba en la ventana.

Takeshi: a saludar a tu padre - respondo lo más fresco posible que logro con una sonrisa que oculta perfectamente mis nervios y que con frecuencia Hayato llama tonta - no es seguro que podamos hacerlo con lo que se viene cuando llegue la panda de idiotas, y la guerra contra el Bebé - añado con verdad y veo que la postura de Hayato se relaja creyendo por ahora mis palabras.

Hayato me da un aja como respuesta y toma mi mano, lo que me saca una sonrisa, pues por su personalidad sé que no gusta de mostrar afecto en público, además de ser terco por querer ocultar sus sentimientos y de ahí sus reacciones violentas. Simplemente, aprieto su mano dándole confianza e indicándole como siempre que todo está bien, y amplío mi sonrisa al ver el reflejo en el retrovisor que muestra el sonrojo que trate de ocultarme mirando "distraídamente" por la ventana.

Cuando llegamos a nuestro destino, suelta mi mano y brinca levemente en el asiento, aunque para cualquier otro hubiera pasado de ser percibido; acallo una carcajada ante su tierna actitud, pero no es burla, sé que a pesar de que ya hablo y arreglo las cosas con su padre, encontrarse sigue siendo algo incómoda para el que cerro su corazón a ellos luego de todo lo que paso; somos recibidos por algunos sirvientes con el típico "Bienvenido a casa joven amo" que eriza a Hayato haciendo que apresure el paso para entrar, el mayordomo principal nos guía a una pequeña dala donde parece estar el padre de Hayato, en este punto me vuelvo a sentir nervioso aunque agradezco de no ver pelo de Bianchi por el lugar, de lo contrario Hayato ya estaría discutiendo con su hermana.