Lágrimas.

Capítulo No. 46

HeeChul abrazó a su hijo, sin parar de llorar.

—“Yo... estuve mucho tiempo en coma, cuando desperté no sabía quién era, lamento que mi imprudencia...”.
Presionó sus labios sosteniendo entre sus manos su atormentada cabeza.

—“HeeChul, nosotros no sabíamos que estabas embarazado, no te hubiéramos desamparado. SiWon nunca comentó nada sobre ese asunto”.

—“No sé qué sucedió”.
Habló Siwon abatido.

—“Es que no lo sabías, cuando no regresaste por mí, fue que me di cuenta de que estaba embarazado”. 
Explicó y luego dirigió su mirada a MinHo.

—“¿Por qué no se contactaron conmigo? ¿Por qué no me avisaron?”

—“Para mis padres el accidente de mi hermano fue algo muy duro, ellos lo trajeron a Estados Unidos esperando que se recuperará, yo me hice cargo de los negocios, todos tratamos de olvidar ese terrible momento”.

HeeChul en ese instante sintió un dolor muy fuerte en el pecho, que le dificultaba respirar.

—“¡Papacito!”

Fue lo último que escuchó, y enseguida perdió el conocimiento.

—“¡Hee!, ¡Un médico!”
Exclamó Rizzeta angustiada.

Hyun con rapidez llamó al 911, HeeChul tenía el pulso muy débil. Siwon se puso de pie y avanzó hacia él.

—“¡¡Papacito reacciona!!"
Exclamó Saeng abrazado a su omma, sollozando sin parar.

—“HeeChul”.
Susurró SiWon tomando la fría mano del hombre, entonces su mirada se cruzó con la de su hijo. El hombre se talló los ojos, la garganta se le secó sin poder decirle una palabra.

Varios minutos después la ambulancia llegó, estabilizaron a HeeChul, y de inmediato lo llevaron al hospital. Saeng fue con su él, Hyun con Rizzeta en su auto. KangIn se quedó a cuidar a Young. MinHo y Siwon en su vehículo también acompañaron al hospital.

Apenas la ambulancia llegó, ingresaron a HeeChul a emergencia, había sufrido un infarto de miocardio, como consecuencia de la insuficiencia renal y de la hipertensión que padecía. Volver a ver a Siwon había sido un golpe muy duro para él.

Saeng lloraba abrazado a Hyun, la angustia se apoderó de los presentes, porque nadie salía a darles información, sobre el estado de salud de HeeChul.

Entre tanto MinHo también llevó a su hermano a revisión, pues tampoco se sentía bien, todo lo ocurrido tenía en un estado de trance a aquel hombre. Mientras revisaban a SiWon se acercó a su sobrino.

—“Saeng, lo que necesites cuenta conmigo. Sé que no nos conocemos, pero somos familia, eres hijo de mi hermano”.
Expresó con emoción. Él era muy unido a su hermano y cuando se accidentó se volvió un Playboy, tanto así que estaba por cumplir los cincuenta años y jamás se había casado.

—“Señor Choi, lo lamento... Yo soy muy impulsiva”. 
Se disculpó Rizzeta.

MinHo observó a la mujer con esos hermosos ojos y aquella sonrisa seductora, que ponía a temblar las piernas de cualquiera.

—“No soy rencoroso, estabas en tu derecho... ¿Rizzeta?”

—“Si”.
Contestó ella ruborizada.

En ese momento un médico salió y preguntó por los familiares de HeeChul. Saeng de inmediato se acercó al doctor.
—“Yo soy su hijo... ¿Cómo está mi omma?”